Londres (CNN Business) – El Banco Central Europeo está avanzando en sus esfuerzos por crear una versión digital del euro a medida que el uso del dinero en efectivo disminuye y China acelera las pruebas de su propio e-yuan.
El banco central anunció este miércoles una investigación de dos años que examinará “cuestiones clave relativas al diseño y la distribución” de un euro digital y analizará el posible impacto en el mercado. La decisión final sobre el despliegue de un euro digital se produciría más adelante.
“Dada la transformación digital en curso, que tiene el potencial de transformar el panorama de los pagos e incluso todo el sistema financiero, los bancos centrales deben ser audaces y seguir el ritmo del cambio”, dijo Fabio Panetta, miembro del Comité Ejecutivo del Banco Central Europeo (ECB, por sus siglas en inglés), en una entrada de su blog.
Un euro digital no sustituiría al dinero en efectivo, pero funcionaría de forma muy parecida. En lugar de pagar bienes o servicios con billetes, los europeos podrían utilizar una forma electrónica de dinero emitida por el Banco Central Europeo o los bancos centrales nacionales a una cartera digital.
Panetta dijo que el banco central intentará empezar a desarrollar un euro digital una vez que haya terminado el periodo de investigación. Ese proceso posterior “podría durar unos tres años”, lo que situaría a Europa en la senda de la posible puesta en marcha de una moneda digital en 2026.
Por qué Europa toma medidas
El Banco Central Europeo reconoce que “todavía hay que responder a muchas preguntas” antes de introducir un euro digital. Pero el banco central cree que vale la pena explorarlo para “garantizar que en la era digital los ciudadanos y las empresas sigan teniendo acceso a la forma más segura de dinero, el dinero del banco central”, dijo la presidenta Christine Lagarde en un comunicado.
También está claro que al Banco Central Europeo le preocupan las consecuencias de esperar demasiado tiempo para actuar.
En un discurso pronunciado el mes pasado, François Villeroy de Galhau, gobernador del banco central de Francia, dijo que el dinero del banco central podría quedar relegado a un segundo plano a medida que disminuya el uso del efectivo y surjan nuevas monedas y tokens digitales. Europa comenzó a estudiar más seriamente un euro digital después de que Facebook desvelara sus planes de crear una moneda digital en 2019.
Villeroy también destacó el progreso de China en el lanzamiento de un yuan digital, que ya está disponible en varias ciudades de ese país.
“El riesgo es claramente que Europa pierda impulso no solo en su empeño por reforzar el papel internacional del euro, sino incluso en preservarlo”, dijo. “El reto aquí es también una preocupación geopolítica”.
Pero algunos expertos dudan de que sea necesario un euro digital, teniendo en cuenta la cantidad de consumidores que ya realizan transacciones con tarjetas de crédito o débito o con servicios de pago móvil.
“Soy un poco escéptico de que la gente lo necesite realmente”, dijo Grégory Claeys, miembro del grupo de reflexión Bruegel, con sede en Bruselas.
¿Podría haber un dólar digital?
Los funcionarios de la Reserva Federal de Estados Unidos también están debatiendo la posibilidad de crear un dólar digital, aunque se mueven con más cautela que sus homólogos europeos.
Randal Quarles, vicepresidente de supervisión de la Reserva Federal, dijo el mes pasado que cualquier propuesta para crear una moneda digital del banco central, o CBDC, debe superar una “barra alta”.
“Antes de dejarnos llevar por la novedad, creo que debemos someter las promesas de una CBDC a un cuidadoso análisis crítico”, dijo.
El funcionario señaló que el dólar estadounidense “ya está muy digitalizado” y rechazó la idea de que Estados Unidos tenga que actuar simplemente porque otras jurisdicciones se hayan adelantado.
“Parece poco probable… que el estatus del dólar como moneda de reserva mundial, o el papel del dólar como moneda dominante en las transacciones financieras internacionales, se vea amenazado por la creación de una CBDC extranjera”, dijo Quarles.