CNNE 1032432 - erikamouynes panama

(CNN) – La ministra de Relaciones Exteriores de Panamá, Erika Mouynes, pidió a su embajador en Washington Juan De Dianous que presente una nota formal al Departamento de Estado de EE.UU. en la que exponga los argumentos por los cuales “no consideramos apropiado un nivel 4 para Panamá, en las advertencias de viaje que Estados Unidos hace a sus ciudadanos”.

La alerta de viaje, que aparece en el sitio web del Departamento de Estado, posiciona a Panamá en el nivel 4 que, según la publicación, representa la recomendación de no trasladarse al país, en este caso por los riesgos frente al covid-19 y la delincuencia.

La advertencia se emite justo cuando el presidente de Panamá Laurentino Cortizo se encuentra en una gira de trabajo en Dallas, Austin y Houston, Texas, según el mandatario en busca de inversiones para la recuperación económica, generación de empleos y promoción del país.

El ministro encargado de Economía y Finanzas, Jorge Almengor, había dicho el martes que “es sano que los países alerten a sus nacionales de que tomen las medidas y las precauciones adecuadas, igual que nosotros lo hacemos para la salida de los panameños hacia otras jurisdicciones”.

En su alerta, el Departamento de Estado cita un aviso de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), que indica un nivel muy alto de casos de covid-19 en Panamá, país que hasta la tarde de este miércoles reportó 418.604 casos de coronavirus, de los cuales 6.661 fallecieron y 13.643 se encuentran activos. De ellos hay 743 hospitalizados y 111 en cuidados intensivos.

“La medida de Estados Unidos es una alerta de viaje a casi toda América Latina, incluyendo países de la región y vecinos como Costa Rica, República Dominicana y otros. Sin embargo, a nosotros nos afecta porque, definitivamente, sobre Panamá las personas tienden a pensar que está cerrado”, explicó a CNN Ernesto Orillac, presidente de la Cámara Nacional de Turismo de Panamá.

Orillac dice que el turismo está mayormente afectado por la implementación de medidas restrictivas muy severas, que incluyen la entrada de pasajeros a Panamá.

Se refiere al protocolo del Aeropuerto Internacional de Tocumen, que indica que todos los viajeros que ingresan al país deben presentar una prueba de antígenos o PCR negativo de covid-19, hecha con 48 horas de antelación. Pero cuando se trata de pasajeros procedentes de Sudamérica, el Reino Unido, Sudáfrica y la India, se deben someter a una prueba de covid-19 molecular en la terminal aérea, que le cuesta US$ 85 al viajero. De resultar negativa, la persona debe cumplir una cuarentena obligatoria de tres días en un hotel. De ser positiva, el aislamiento obligatorio es de 14 días, también en un hotel.

Sobre este tema, el ministro encargado de Economía y Finanzas dijo que “en Panamá hemos sido lo más conservadores posible” con la entrada de turistas, residentes y obviamente panameños, para que cumplan todas las medidas de bioseguridad tanto en pruebas como en vacunas contra el covid-19.

Pero la alerta de viaje del Departamento de Estado también pide cautela por la delincuencia, principalmente en áreas que identifica de mayor riesgo, como el Golfo de los Mosquitos y algunas zonas de Darién donde, según la publicación, opera el crimen organizado.

Más allá, la Cámara Nacional de Turismo de Panamá asegura que actualmente “la ocupación hotelera está en el suelo”. Según Orillac, si se considera el 60% de los hoteles abiertos, la ocupación “no llega al 20%”. Pero “si se toma el 100% de la plaza hotelera, Panamá no llega al 10% de ocupación”.