(CNN Español) – Luego de tres días consecutivos de movilizaciones por las calles del microcentro de Asunción, este jueves organizaciones campesinas llegaron a un consenso con el Poder Ejecutivo y el Congreso Nacional a fin de levantar las protestas.
El documento calificado por los agricultores como un “preacuerdo” aborda tres reivindicaciones: acceso a tierras, reestructuración de deudas y apoyo a la agricultura familiar campesina.
El encuentro tuvo lugar este jueves en la sede del Congreso y estuvo encabezado por representantes del Ministerio de Agricultura y Ganadería, parlamentarios y dirigentes campesinos.
“Establecimos un acuerdo con el Ministerio de Agricultura que se compromete, mediante el acta, en priorizar los proyectos que han sido presentados en el marco del acuerdo que hoy se ratifica”, sostuvo Jorge Galeano de la Coordinadora Nacional Intersectorial (CNI).
Galeano anunció que el próximo 18 de agosto se desarrollará una nueva reunión con la participación de referentes del Senado, del Banco Nacional de Fomento, el Crédito Agrícola de Habilitación y el Banco Central del Paraguay para tratar temas relacionados a las deudas campesinas y levantamiento de la protesta campesina.
La viceministra de Agricultura, Bettina Aguilera, explicó que en la reunión de la próxima semana abordarán aspectos técnicos sobre los proyectos productivos presentados por los campesinos para ajustarlos a las disposiciones reglamentarias.
“Hay unos US$ 14 millones previstos para la reactivación de la agricultura familiar campesina de los cuales el 43% ya fueron ejecutados”, recordó Aguilera.
Los agricultores exigen que se cumpla un acuerdo firmado a finales de 2020 con el Ejecutivo para la reactivación de la agricultura familiar campesina afectada por la crisis económica de la pandemia y por adversidades climatológicas que afectaron los cultivos.
Antes de marcharse a sus tierras, los líderes de la Coordinadora Nacional Intersectorial adelantaron que además impulsarán un debate nacional para tratar que el Gobierno suspenda todo tipo de desalojo en época de pandemia a los efectos de resguardar la vida de la población indígena y campesina.