(CNN Español) – El avance de los talibanes en Afganistán genera preocupación en la comunidad internacional. Si bien la crisis afecta a toda la población del país, existe un grupo especialmente vulnerable ante el conflicto: los niños y niñas.
Conflicto, desnutrición, violencia y explotación sexual, abuso doméstico, matrimonio infantil, reclutameinto, entre otros, son algunos de los riesgos que enfrentan los niños de Afganistán.
“Afganistán ha sido, durante muchos años, uno de los peores lugares del mundo para ser niño. Pero durante las últimas semanas, la situación de muchos niños se ha vuelto aún más desesperada”, sostuvo United Nations Children’s Fund (Unicef, por sus siglas en inglés) en un comunicado difundido este lunes.
Las cifras respaldan esta preocupación. Según Unicef, desde principios de año, “más de 552 niños han muerto y más de 1.400 han resultado heridos” en Afganistán. En tanto, “la mitad de la población, más de 18 millones de personas –entre ellas casi 10 millones de niños- necesita ayuda humanitaria”.
La preocupación de Unicef y de otros organismos internacionales ha crecido por el aumento de las violaciones graves de los derechos de los niños, especialmente su reclutamiento por parte de grupos armados.
“Es urgente que todas las partes tomen las acciones necesarias para minimizar el daño a los niños y dar prioridad a su protección en la conducción de las hostilidades, así como proteger las escuelas y hospitales”, dijo Virginia Gamba, representante especial del Secretario General de la ONU para los Niños y los Conflictos Armados, en un comunicado.
Según el último informe de la ONU sobre los niños y los conflictos armados, 5.770 jóvenes afganos fueron asesinados o mutilados entre enero de 2019 y diciembre de 2020.
Además, la ONU calcula que “1 millón de niños menores de 5 años estarán gravemente desnutridos para el final de 2021 y 3 millones sufrirán de desnutrición moderada/aguda”.
La violencia, la falta de acceso a la educación y la situación de las niñas es otro foco de preocupación ante el avance talibán en la región.
Las niñas afganas podrían ser obligadas a casarse muy jóvenes, podrían ser víctimas de asesinatos por honor, abuso, violencia sexual, entre otros.
“Los niños afganos sufren muchos de los mismos riesgos, junto con el reclutamiento militar en conflictos armados y la explotación sexual”, afirma Unicef.
La educación de niños y niñas
Una de las primeras incertidumbres que surgieron cuando los talibanes tomaron el poder en Afganistán fue la cuestión educativa.
Si bien los talibanes aseguran que van a garantizar los derechos que el Islam le ha otorgado a las mujeres en el país, entre ellos el acceso a la educación, un video publicado por CNN muestra que unas niñas en una mezquita local ya no aprenden ciencia o matemáticas. Solo estudian el Corán.
“El sistema educativo de Afganistán se ha visto devastado por más de tres décadas de conflicto sostenido”, explica Unicef en su página web. “Para muchos de los niños del país, completar la escuela primaria sigue siendo un sueño lejano, especialmente en las zonas rurales y para las niñas, a pesar de los recientes avances en el aumento de la matrícula”.
Según datos del organismo, unos 3,7 millones de niños no asisten a la escuela en Afganistán. Y el 60% de ellos son niñas.
“Solo el 16% de las escuelas de Afganistán son exclusivas para niñas y muchas de ellas carecen de instalaciones sanitarias adecuadas”, dice Unicef.
Esto hace más difícil que las menores puedan asistir a la escuela.
Además, se suman “ciertos factores socioculturales y creencias tradicionales también socavan la educación de las niñas”.
Un ejemplo: si bien los matrimonios infantiles son ilegales en Afganistán, el 17% de las niñas se casa antes de cumplir 15 años, según Unicef.
Con todos los obstáculos, los niños y niñas que sí logran acceder a la escuela, suelen recibir una educación de menor calidad. Esto se debe a que “solo el 48 por ciento de sus maestros tienen las calificaciones académicas mínimas (equivalente a un título asociado)”, según los datos de Unicef.
Reclutamiento y violencia
Otro de los padecimientos de los niños en Afganistán es el conflicto armado. Factores como desplazamiento interno, la migración forzada y otros también los ponen en riesgo de los grupos armados.
Sobre este punto, Unicef señala que el reclutamiento de niños “a menudo está oculto por procedimientos inadecuados de verificación de la edad”.
Para mitigar esta situación, el organismo ha apoyado durante años el establecimiento de centros de protección infantil en los departamentos de policía y oficinas de reclutamiento.
Con el reciente avance talibán, la ONU también hizo un llamado especial a proteger a los niños de estas situaciones. “Hoy, hago un llamamiento a todas las partes, especialmente a los talibanes, para que eviten el reclutamiento y el uso, el secuestro y la matanza y mutilación de niños, pongan fin a todas las violaciones y tomen urgentemente medidas concretas para proteger a los niños, las escuelas y los hospitales, y mitigar la situación de los niños. víctimas”, dijo Gamba.
Además, pidió que Afganistán mantenga la criminalización de la práctica del bacha bazi, una forma de abuso sexual contra los niños, en línea con las revisiones del código penal en 2018, según un comunicado de la ONU.
El peligro del desplazamiento
La crisis afgana, agravada ahora por el avance talibán, ha producido un creciente desplazamiento de familias, tanto en el interior de Afganistán como hacia otros países. Esto también representa un riesgo especial para los niños.
Alrededor del 80% de casi un cuarto de millón de afganos que se vieron obligados a huir desde finales de mayo de 2021 son mujeres y niños, según datos de Acnur.
El organismo resalta que los afganos viven una crisis de desplazamiento desde hace cuatro décadas. En tanto, más de 550.000 afganos han sido desplazados internos desde principios de 2021. En tanto, un total de 72.375 refugiados afganos están alojados en Afganistán y unos 2.215.445 refugiados se encuentran en Irán y Pakistán, según ACNUR.
“Los niños de entre 12 y 17 años, pero a veces incluso de 10 años, se encuentran entre las personas más vulnerables del mundo”, dice Unicef sobre este punto. “Algunos buscarán empleo en Irán como trabajadores indocumentados; otros son inmigrantes que emprenden el arriesgado viaje a Turquía o Europa”, señala el organismo.
Algunos serán forzados a regresar, y eso también es peligroso, pues en el proceso suelen ser separados de sus familias, agrega Unicef. Y resalta: “Solos y en el limbo, son un blanco fácil para los contrabandistas y traficantes de personas”.