(CNN)– El reciente aumento de las hospitalizaciones por covid-19 este verano está teniendo un efecto profundo en Texas, un estado que ha visto cómo sus dirigentes rechazaban medidas como el uso obligatorio de mascarillas, pero que ahora se enfrenta a hospitales saturados de pacientes enfermos.
Y en medio de las crisis en los centros de salud, así como las batallas judiciales que se libran sobre la legalidad de las medidas de seguridad en las escuelas, la reciente noticia de que el gobernador Greg Abbott ha dado positivo en la prueba de covid-19 ha acentuado el mensaje de los funcionarios de salud de que los tejanos deben permanecer vigilantes durante la pandemia.
El Departamento de Servicios de Salud del Estado dijo que Texas está en “una de sus peores luchas” que ha enfrentado contra el covid-19, y los tráilers mortuorios fueron solicitados este mes como una maniobra de preparación.
“La preocupación por la capacidad de los hospitales está empeorando. Las muertes están aumentando más rápidamente”, dijo el departamento el miércoles. Más de 12.400 personas están hospitalizadas con el virus hasta el miércoles, según los datos del estado, un aumento respecto a las 10.791 del miércoles pasado.
Las camas de unidades de cuidados intensivos se están agotando, y los empleados de la sanidad están trabajando frenéticamente para encontrar espacio disponible para los que lo necesitan.
En el Hospital Goodall Witcher, situado en la localidad de Clifton, en el centro de Texas, los funcionarios tienen dificultades para trasladar a los pacientes de covid-19 que necesitan atención en la UCI a otros hospitales, ya que están al límite de su capacidad, dicen.
La jefa de enfermería, Joycesarah McCabe, dijo a KWTX, afiliada a la CNN, que llama a hospitales de todo Texas en busca de disponibilidad. A veces se hacen llamadas a estados vecinos, como Louisiana o Nuevo México.
“No tenemos camas, y ahí se acaba la conversación. Algunos dirán ‘estamos cerrados, estamos en desvío completo, hemos estado en desvío completo durante dos semanas’”, dijo McCabe a KWTX. “A veces, al otro lado del teléfono hay alguien que dice: ‘Lo siento, lo siento mucho’. Porque saben que estamos desesperados”.
McCabe dijo que los propios empleados han perdido a familiares o amigos mientras prestaban atención en el hospital rural. “Una enfermera, un ecografista y uno de nuestros médicos perdieron a alguien el sábado o el domingo a causa del covid. El más joven tenía 21 años, el mayor 38”, dijo McCabe a KWTX.
Justin Squyres, un médico del hospital, dijo a KWTX: “Perdí a mi hermano el sábado. Esperamos cinco días por una cama en la UCI y nunca ocurrió”.
“No tengo forma de saber si una cama en la UCI lo habría salvado”, dijo Squyres. “Pero no es el único, hay muchos otros”, se lamentó.
Los datos muestran que la batalla para frenar el covid-19 es ardua
El Departamento de Salud y Servicios Sociales de Texas (DSHS, por sus siglas en inglés) está animando a los residentes a vacunarse contra el covid-19 para evitar que el número de infecciones se agrave, ya que solo hay 322 camas de UCI disponibles en el estado.
“La vacunación completa previene casi todos los casos de enfermedad grave, hospitalización y muerte”, dijo el departamento.
Casi el 66% de los tejanos que cumplen los requisitos para vacunarse han recibido al menos una dosis, según los datos del estado, y el 54,7% estaban completamente vacunados. Esta cifra es ligeramente inferior a la media nacional del 70,2% de receptores elegibles con al menos una dosis y el 59,6% totalmente vacunados, según los CDC.
Las personas más jóvenes de todo el país se han vacunado en menor medida que los individuos de mayor edad, y los expertos sanitarios apuntan a un aumento de las inoculaciones en todos los grupos de edad como forma de ayudar a frenar la pandemia.
La media móvil de siete días de vacunaciones para la población infantil de entre 12 y 17 años está aumentando en Texas, según el DSHS, pasando de una media de unas 10.500 vacunas a principios de julio a unas 21.500 el lunes. Un tercio de los menores de 12 a 17 años en el estado están ahora completamente vacunados, dijo el departamento.
Sin embargo, los niños menores de 12 años aún no pueden ser vacunados. Y Texas es el estado con más hospitalizaciones pediátricas por covid-19 del país, con 239, según los últimos datos publicados el lunes por el Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE.UU.
Florida, que también se ha visto fuertemente afectada por las infecciones pediátricas y ha recibido críticas junto a Texas por la negativa de los dirigentes estatales a permitir la imposición de mascarillas locales, tenía 170 niños hospitalizados con covid-19.
Los distritos locales desafían la prohibición del uso obligatorio de mascarillas
Los funcionarios estatales electos no han ocultado su intención de seguir impidiendo que los distritos escolares locales impongan el uso obligatorio de mascarillas en las escuelas.
Esta semana, la oficina del fiscal general de Texas, Ken Paxton, publicó una lista actualizada de entidades gubernamentales que, según él, “imponen ilegalmente el uso de máscaras” y no cumplen con el decreto de Abbott que prohíbe a las entidades gubernamentales, incluidos los distritos escolares, exigir el uso de máscaras.
“Me comprometo a proteger los derechos y las libertades de todos los tejanos”, dijo Paxton en Twitter.
Algunas de las entidades que figuran en la lista de incumplimientos han presentado demandas que actualmente están tramitando en el sistema judicial. Una reciente sentencia de la Corte Suprema de Texas se alineó con el decreto de Abbott.
Sin embargo, algunos distritos se están defendiendo buscando soluciones fuera de los tribunales. El Distrito Escolar Independiente de París (PISD), situado al noreste de Dallas, votó a favor de modificar su actual código de vestimenta para incluir las mascarillas.
“La junta cree que el código de vestimenta puede ser utilizado para mitigar los problemas de salud transmisibles, y por lo tanto ha modificado el código de vestimenta de PISD para proteger a nuestros estudiantes y empleados”, dijo el distrito en un comunicado.
“El gobernador de Texas no tiene la autoridad para usurpar el poder y el deber exclusivos de la junta directiva para gobernar y supervisar la gestión de las escuelas públicas del distrito”, dijo.
Dado que Abbott -que está totalmente vacunado y aseguró este miércoles a los tejanos que estaba de buen humor- dio positivo en la prueba de covid-19, los críticos destacaron el momento como una prueba más para el uso de mascarillas y la precaución. El presidente del Partido Demócrata de Texas, Gilberto Hinojosa, instó a los gobiernos locales a seguir adelante con los mandatos.
“Le deseo lo mejor al gobernador Abbott: nadie merece estar enfermo o sufrir este virus infranqueable. Mi esperanza es que el gobernador se dé cuenta de lo vulnerables que somos ante esta crisis sanitaria, deje de jugar a la política y haga lo necesario por la salud de todos los tejanos”, dijo Hinojosa.
“La vida de los niños no se puede negociar por una potencial victoria política. Elogio a la casi docena de distritos escolares y gobiernos locales que continúan desafiando las órdenes del gobernador y que, a pesar de la contundente oposición, eligen hacer lo correcto por la seguridad de nuestros niños y comunidades”.
– Rosa Flores, Raja Razek, Ray Sanchez, Kay Jones, Nicole Williams y Mallory Simon de CNN contribuyeron con este reportaje.