(CNN) – Los talibanes utilizaron disparos, detenciones y palizas para terminar con la disidencia sobre su gobierno este martes, cuando decenas de manifestantes afganos marcharon por Kabul en la mayor protesta que ha visto la capital desde que el grupo militante tomó el poder el mes pasado.
Según fotos y videos compartidos en las redes sociales, los activistas gritaron en apoyo de los combatientes de la resistencia en la provincia de Panjshir y corearon contra Pakistán, pues consideran que está inmiscuido en los asuntos afganos.
Los videos del centro de Kabul mostraban a decenas de hombres y mujeres marchando por las calles al grito de “Muerte a Pakistán” mientras los manifestantes se dirigían al palacio presidencial.
En medio de las escenas caóticas en las calles, los militantes talibanes intervinieron y dispararon al aire para dispersar a los manifestantes. Los videos mostraban a la gente dispersándose o agachándose en medio de continuas ráfagas de disparos. En un principio no se reportaron víctimas.
Los testigos estimaron que la multitud era de entre 300 y 500 personas, muchas de las cuales eran mujeres que llevaban el hiyab.
Los manifestantes cuestionan el papel de Pakistán
Algunos manifestantes se quejaron del papel que ha desempeñado el jefe de la inteligencia militar de Pakistán al concluir las negociaciones para la formación de un gobierno. El jefe de los servicios de inteligencia, el teniente general Faiz Hamid, llegó a Kabul el fin de semana y se reunió con altos cargos talibanes, incluido el mulá Baradar, jefe de la Oficina Política de los talibanes.
Un hombre dijo: “La protesta cerca de la plaza Zanbak fue dispersada por los talibanes disparando al aire. La mayoría de nuestros amigos se dirigieron hacia el Hotel Serena. Un grupo se reunió aquí y otro marchó hacia la embajada de Pakistán. No importa que traten de detenernos, brotaremos [de nuevo], creceremos. No nos callaremos. Nunca aceptaremos la esclavitud y la invasión de ningún extranjero”.
En un video de Kabul del martes, se ve a una mujer enfrentarse a un militante talibán. El periodista afgano Ahmad Jawid Kargar dijo a CNN que los talibanes detuvieron a decenas de mujeres que protestaban frente a la puerta presidencial y las llevaron al sótano del Banco Azizi, situado en las cercanías. CNN no ha podido confirmar el número de personas detenidas.
Un fotoperiodista no afgano que formaba parte de la docena de representantes de los medios de comunicación detenidos en la protesta dijo que había estado retenido durante dos horas. El periodista dijo a CNN: “Antes de detenerme, un talibán me golpeó con su AK-47 en la nuca”. Dijo que su cámara estaba rota, pero que cuando los talibanes descubrieron que no era afgano fueron mucho más amables. “No trataban igual a los periodistas locales y se aseguraron varias veces de que yo no lo era”.
El fotoperiodista, que pidió no ser nombrado, dijo que se estaba volviendo imposible trabajar en Kabul. “No podemos hacer nada. Nos prohíben la cobertura. No podemos hacer nuestro trabajo. Son muy agresivos. Lo he visto con mis propios ojos: vi a un hombre apuntar con su arma a la gente, estaba dispuesto a disparar. Otro hombre tuvo que detenerlo. Estuvo muy cerca de hacerlo. Algunos son simplemente incontrolables”.
El fotoperiodista añadió: “Hoy había unas 500 personas en la protesta. Las mujeres estaban detenidas en un estacionamiento exterior. No se les permitía salir de ese espacio. Ese era su método para detenerlas y pararlas”.
Según varias cuentas en las redes sociales de periodistas afganos, al menos algunos de los reporteros y camarógrafos detenidos han sido puestos en libertad.
Algunos habían sido golpeados, según las cuentas en las redes sociales de sus organizaciones.
Kabul News publicó en Twitter que Ahmad Najim Sultani, fotógrafo de Kabul News TV, resultó herido e Imran Fazli, periodista, fue golpeado durante la protesta de hoy en Kabul. “Los talibanes también confiscaron el equipo fotográfico”, se indicó.
La cadena afgana TOLO news dijo en un tuit: “Waheed Ahmadi, fotógrafo de TOLO news, fue liberado por las fuerzas talibanes después de una detención de tres horas. Los talibanes devolvieron las fotos al Sr. Ahmadi con una cámara”.
Ariana News, otra cadena de televisión privada con sede en Kabul, también había dicho que su reportero y su camarógrafo habían sido detenidos.
El grupo de derechos humanos Amnistía Internacional declaró en un mensaje en Twitter que está “profundamente preocupada por los informes sobre el uso de la violencia contra manifestantes pacíficos y periodistas en Kabul por parte de los talibanes. Ejercer el derecho a la libertad de reunión pacífica es un derecho humano. Los talibanes deben respetar y permitir a la gente ejercer sus derechos”.
Mientras que Human Rights Watch tuiteó: “En otro indicio más de que los nuevos gobernantes de #Afganistán no tolerarán la disidencia pacífica, los talibanes volvieron a utilizar la fuerza para aplastar una protesta de cientos de mujeres de #Afganistán que reclamaban sus derechos hoy”.
En las protestas de Kabul también se corearon eslóganes a favor del líder del Frente Nacional de Resistencia (NFR, por sus siglas en inglés), Ahmad Masoud, que lidera la oposición a los talibanes desde la provincia de Panjshir. El lunes hizo un llamamiento a un levantamiento nacional contra el régimen talibán, cuando el grupo militante se adjudicó la victoria en la región montañosa, tras dos semanas de intensos combates con el NRF. Sin embargo, el NRF desmintió esta afirmación y su portavoz Ali Nazary declaró a CNN: “La resistencia sigue en todo el valle”.
Un hombre dijo a Reuters: “Vine hoy a preguntar por qué Pakistán está destruyendo Panjshir. Soy de Panjshir. La gente tiene que expresar su ira, hombres y mujeres, no deben quedarse callados. Pakistán entra a mi país y lo destruye. Ni Pakistán ni los talibanes o al-Qaeda tienen ese derecho. Viva Panjshir y su resistencia”.
Consultado por la gestión de las protestas en una rueda de prensa para anunciar el nuevo gobierno,el portavoz talibán Zabihullah Mujahid dijo que no se permitirían las manifestaciones ilegales. Dijo que los manifestantes debían respetar las normas durante la actual situación de emergencia en el país.
Desestimó las afirmaciones de los manifestantes sobre la injerencia pakistaní en Afganistán, diciendo que eran rumores que habían circulado durante dos décadas.
En la última semana ha habido una serie de protestas de menor envergadura en Kabul y otras ciudades afganas en las que las mujeres activistas han pedido a los talibanes que respeten sus derechos y les permitan participar en el gobierno. Una protesta de mujeres en Kabul fue disuelta el fin de semana.
Según múltiples videos e imágenes publicadas en las redes sociales el martes, también hubo una protesta en la ciudad occidental afgana de Herat en la que también se coreó “Muerte a Pakistán”. En varios videos se escucharon disparos mientras los manifestantes corrían o se protegían. Al menos dos personas murieron y otras tres resultaron heridas, según un funcionario del hospital regional de Herat, que pidió que no se revelara su nombre por su seguridad.
Las muertes se debieron a que los talibanes “dispararon al aire” para intentar dispersar a la multitud de manifestantes, dijo el funcionario del hospital. Los talibanes aún no han comentado públicamente sobre las muertes.