(CNN Español) – Las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) cumplen 10 años desde que se implementaron en 2011. Con voces a favor y en contra, la discusión en torno a cuánto le aportan al sistema de partidos argentino y cuál es el gasto que representa para el Presupuesto nacional, se reaviva cada vez que se aproxima la cita con las urnas.
En esta ocasión, mientras el oficialista Frente de Todos tendrá elecciones internas en nueve distritos (Santa Fe, Salta, Chaco, Tucumán, Corrientes, Misiones, La Rioja, Chubut y Neuquén), la coalición opositora Juntos por el Cambio tendrá internas en 20 de las 24 jurisdicciones (Buenos Aires, Catamarca, Chaco, Chubut, Córdoba, Corrientes, Entre Ríos, La Pampa, Mendoza, Misiones, Río Negro, Salta, San Luis, Santa Cruz, Santa Fe, La Rioja, Santiago del Estero, Tierra del Fuego, Tucumán y Ciudad de Buenos Aires).
Más allá de la disputa por la selección de candidatos, en el debate público frecuentemente se ponen en tela de juicio los recursos que invierte el Estado en las primarias. Dependiendo del cálculo que se realice, las cifras de gastos difieren entre una y otra fuente.
Según la Dirección Nacional Electoral, el presupuesto original asignado para los comicios de 2021 equivale a unos US$ 172 millones para la organización de las primarias y de las elecciones nacionales. Sin embargo, pospuestas por la pandemia y con una organización diferencial para poner en marcha protocolos para evitar contagios por covid-19, el Ejecutivo nacional aumentó el presupuesto, que llegó a unos US$ 184 millones.
Ese desglose inicial no distingue entre las PASO y las generales. Sin embargo, ante la pregunta de CNN, desde el Ministerio del Interior explicaron que históricamente los comicios primarios consumen un porcentaje más alto del presupuesto asignado que las generales.
Las autoridades consultadas estimaron que se destina un 60% del presupuesto para las primarias y un 40% para las generales. Es decir, cerca de US$ 110 millones, se destinarían a las primarias.
El menor gasto en las elecciones de noviembre se debe, según explicó a CNN la Dirección Nacional Electoral a un conjunto de motivos, entre los que mencionaron una menor cantidad de listas, y que tanto los softwares como la logística de lugares de votación se preparan para las PASO y ya quedan listas para su uso en los comicios nacionales.
A su vez, resaltan que este año, signado por la pandemia, trajo también gastos extra en compra de insumos como desinfectantes, señalización, personal idóneo y una logística diferente ya que se habilitaron más establecimientos para votar.
Si bien la cifra final no está definida, desde la Cámara Nacional Electoral explican que en la semana previa a las PASO ya se llevan gastados unos US$ 74 millones.
Las PASO en números
El gasto extra en dinero que requieren las elecciones primarias en Argentina, también se traduce en un movimiento mayor en épocas de pandemia.
Según el Ministerio del Interior, este año el padrón electoral registra 34.332.992 personas habilitadas para votar, que lo harán en 17.092 establecimientos (unos 2.800 más que en las elecciones anteriores), con un total de 101.457 mesas.
El operativo electoral incluye a 15.170 operadores de transmisión y 2.746 supervisores en todo el país. Además se suman 25.620 urneros y más de 9.000 trabajadores de Correo.
Por su parte, el Comando General Electoral, integrado por las Fuerzas Armadas y las fuerzas de seguridad y policiales, despliega un total aproximado de 95.000 efectivos.