(CNN Español) – Este lunes, dos días después de la muerte de Abimael Guzmán, fundador del grupo terrorista Sendero Luminoso, voceros de los grupos parlamentarios del Congreso de Perú publicaron un comunicado en el que expresan que el cuerpo de Guzmán “debe ser incinerado” y no generar espacios para que se “realicen actos de reivindicación del cabecilla”.
El gobierno del presidente Pedro Castillo indicó este domingo en su cuenta de Twitter que respetan la ley y la independencia de poderes, y que a ellos no les “corresponde decidir sobre la disposición final del cuerpo del terrorista Abimael Guzmán, pues es competencia del Ministerio Público”.
Por su parte, Zoraida Ávalos Rivera, fiscal de la nación, dijo este lunes en una entrevista al medio local RPP Noticias y que fue publicada en la cuenta de Twitter del Ministerio Público que como Guzmán falleció en su celda fue necesario abrir una investigación y su cuerpo ya ha sido sometido a varios exámenes antropológicos, patológicos, odontogramas, toxicológicos, pruebas de ADN, entre otros. La fiscal indicó que había sido informada de que el odontograma y la prueba dactilar correspondía a la identidad de Guzmán.
“Con respecto a la incineración, no hay marco normativo que así lo disponga. Este es un vacío que estamos viendo… que debe ser tratado por los órganos competentes, llámese el Congreso o llámese el Ejecutivo”, dijo Ávalos Rivera.
Por el momento, se desconoce qué sucederá con el cuerpo del otrora líder de Sendero Luminoso. Según Ávalos Rivera, la investigación para determinar la causa de su muerte está en marcha.
Guzmán murió este sábado en un centro de reclusión de máxima seguridad por “complicaciones en su estado de salud”, informó en un comunicado el Instituto Nacional Penitenciario.
Guzmán, alias “Camarada Gonzalo” y quien fuera en años el hombre más buscado en Perú, fue detenido en 1992 y cumplía cadena perpetua por el delito de terrorismo. También fue condenado por tráfico ilícito de drogas.
Sendero Luminoso fue responsable de más de 30.000 muertes en Perú entre 1980 y 2000, según el informe de la Comisión de la Verdad y Reconciliación.
Uno de los ataques terroristas más recordados y atribuidos a Sendero Luminoso ocurrió en 1992 cuando dos coches bomba explotaron en Lima dejando 25 muertos.