(CNN) – Un jurado de Los Ángeles encontró a Robert Durst, el sujeto en el que se inspira la serie de HBO “The Jinx”, culpable de homicidio premeditado por el asesinato de su mejor amiga, Susan Berman, hace más de 20 años.
Durst fue acusado por el homicidio premeditado de su amiga cercana y confidente Susan Berman en el año 2000 en su casa de Beverly Hills, horas antes de que ella se dispusiera a hablar con investigadores sobre la misteriosa desaparición de su primera esposa, Kathleen McCormack Durst, quien fue vista por última vez en 1982.
McCormack Durst fue declarada legalmente muerta en 2017. Su cuerpo no ha sido encontrado y nadie ha sido acusado en el caso.
Durst, de 78 años, subió al estrado en su defensa durante el juicio en la Corte Superior del Condado de Los Ángeles. Negó haber matado a Berman y dijo que la encontró en el piso de su habitación con un disparo fatal en la nuca.
El testimonio de Durst duró tres semanas, y gran parte del interrogatorio se convirtió en un enfrentamiento contencioso con el fiscal principal, John Lewin.
Los fiscales alegan que Durst le disparó a Berman en la cabeza. Dijeron que Durst le confió a Berman que había matado a Kathleen, y ella lo ayudó a cubrir sus huellas.
En el estrado, Durst negó haber asesinado a su primera esposa y, más tarde, a Berman. Pero bajo interrogatorio, Durst testificó que perjuraría si los hubiera matado. Lewin llevó a Durst a admitir que cometió perjurio cinco veces durante el juicio, que se reanudó en mayo después de una demora de 14 meses debido a la pandemia.
Una pieza clave de evidencia fue la llamada nota de “cadáver”, una carta críptica enviada a la policía con la dirección de Berman y la palabra “cadáver” en mayúsculas que llevó a los detectives a su cuerpo.
En el documental de HBO de 2015 “The Jinx”, Durst dijo que la carta podría haber sido enviada solo por el asesino de Berman. Los abogados defensores habían negado anteriormente que Durst escribiera la nota, y trataron sin éxito de excluir del juicio las pruebas escritas a mano al respecto.
Los cineastas confrontaron a Durst con otra carta que una vez le envió por correo a Berman, escrita con una letra casi idéntica a la nota del “cadáver”. En ambas, Beverly Hills estaba mal escrito como “BEVERLEY”.
En una presentación judicial a fines del año pasado, los abogados del magnate inmobiliario dieron marcha atrás y reconocieron que Durst escribió la nota anónima. “Esto no cambia el hecho de que Bob Durst no mató a Susan Berman”, dijo en ese momento el abogado defensor Dick DeGuerin.