(CNN) – Dieciocho meses después del inicio de la pandemia de covid-19, con la variante delta alimentando un resurgimiento masivo de enfermedades, muchos hospitales están alcanzando un nuevo mínimo desgarrador. Ahora están perdiendo bebés por el coronavirus.
La primera muerte reportada de un recién nacido relacionada con el covid ocurrió en el condado de Orange, Florida, y un bebé murió en Mississippi. El condado de Merced en California perdió a un niño menor de un año a fines de agosto.
“Es tan difícil ver sufrir a los niños”, dijo el Dr. Paul Offit, experto en enfermedades infecciosas del Children’s Hospital of Philadelphia, que, como otros hospitales pediátricos en todo el país, se ha visto inundado de pacientes con covid.
Hasta que la variante delta asedió este verano, casi todos los niños parecían salvarse de los peores estragos del covid-19, por razones que los científicos no entendían del todo.
Aunque no hay evidencia de que la variante delta cause una enfermedad más grave, el virus es tan infeccioso que los niños están siendo hospitalizados en grandes cantidades, principalmente en estados con bajas tasas de vacunación.
Casi el 30% de las infecciones por covid reportadas durante la semana que terminó el 9 de septiembre fueron en niños, según la Academia Estadounidense de Pediatría.
Los médicos diagnosticaron más de 243.000 casos en niños en la misma semana, lo que elevó el número total de infecciones por covid en niños menores de 18 años desde el inicio de la pandemia a 5,3 millones, con al menos 534 muertes.
Los expertos dicen que es una cuestión de matemáticas básicas. “Si 10 veces más niños están infectados con delta que las variantes anteriores, entonces, por supuesto, veremos 10 veces más niños hospitalizados”, dijo el Dr. Dimitri Christakis, director del Centro Infantil de Salud, comportamiento y Desarollo, en el Instituto de Investigación Infantil de Seattle.
Pero el aumento más reciente da una nueva urgencia a una pregunta que ha desconcertado a los científicos durante toda la pandemia: ¿qué protege a la mayoría de los niños de enfermarse gravemente? ¿Y por qué a veces falla esa protección?
“Esta es una pregunta urgente y compleja”, dijo el Dr. Bill Kapogiannis, médico senior y experto en enfermedades infecciosas del Instituto Nacional de Salud Infantil y Desarrollo Humano Eunice Kennedy Shriver.
“Estamos haciendo todo lo posible para abordarlo, utilizando todas las herramientas que tenemos disponibles”, dijo Kapogiannis. “Las respuestas no pueden llegar lo suficientemente pronto”.
Investigando los sistemas inmunes
Durante gran parte de la pandemia, los médicos solo podían preguntarse por qué el sistema inmunológico de los niños fue mucho más exitoso en rechazar el coronavirus.
A pesar del alarmante número de niños hospitalizados en el reciente aumento, es mucho menos probable que los jóvenes se enfermen gravemente. Menos del 1% de los niños diagnosticados con covid son hospitalizados y alrededor del 0,01% mueren, tasas que no han cambiado en los últimos meses, según la Academia Estadounidense de Pediatría. La mayoría de los niños ignoran el virus con poco más que un resoplido.
Un creciente cuerpo de evidencia sugiere que el sistema inmunológico innato de los niños generalmente corta la infección desde el principio, evitando que el virus se establezca y se multiplique sin control, dijo el Dr. Lael Yonker, profesor asistente de pediatría en el Hospital General de Massachusetts.
En una serie de estudios publicados el año pasado, el equipo de marido y mujer de los Dres. Betsy y Kevan Herold descubriió que los niños tienen una inmunidad mucosa particularmente fuerte. Se llama así porque los actores clave en este sistema no están en la sangre, sino en las membranas mucosas que recubren la nariz, la garganta y otras partes del cuerpo que frecuentemente se encuentran con gérmenes.
Estas membranas actúan como los muros de piedra en capas que protegían a las ciudades medievales de los invasores. Están hechos de células epiteliales, que también recubren muchos órganos internos, que se encuentran al lado de soldados clave del sistema inmunológico llamados células dendríticas y macrófagos, dijo Betsy Herold, jefa de la división de enfermedades infecciosas pediátricas del Albert Einstein College de Medicina.
Los centinelas del sistema inmunológico
Significativamente, estas células están cubiertas de proteínas, llamadas receptores de reconocimiento de patrones, que actúan como centinelas, explorando continuamente el paisaje en busca de algo inusual.
Cuando los centinelas notan algo extraño, como un nuevo virus, alertan a las células para que comiencen a liberar proteínas llamadas interferones, que ayudan a coordinar la respuesta inmunitaria del cuerpo.
En un estudio de agosto en Nature Biotechnology, Roland Eils y sus colegas del Instituto de Salud de Berlín de Alemania encontraron que las vías respiratorias superiores de los niños están “preactivadas” para combatir el nuevo coronavirus. Sus vías respiratorias están repletas de estos centinelas, incluidos algunos que se destacan en reconocer el coronavirus.
Eso permite que los niños activen inmediatamente su sistema inmunológico innato, liberando interferones que ayudan a apagar el virus antes de que pueda establecerse, dijo Eils.
En comparación, los adultos tienen muchos menos centinelas al acecho y tardan unos dos días en responder al virus, dijo Eils. En ese momento, el virus puede haberse multiplicado exponencialmente y la batalla se vuelve mucho más difícil.
Cuando la inmunidad innata no logra controlar un virus, el cuerpo puede recurrir al sistema inmunológico adaptativo, una segunda línea de defensa que se adapta a cada amenaza única. El sistema adaptativo crea anticuerpos, por ejemplo, adaptados a cada virus o bacteria que encuentra el cuerpo.
Si bien los anticuerpos son algunas de las piezas más fáciles de medir de la respuesta inmune y, por lo tanto, a menudo se citan como sustitutos de la protección, los niños no parecen necesitar tantos para luchar contra el covid, dijo Betsy Herold.
De hecho, la investigación de Herold muestra que los niños con covid tienen menos anticuerpos neutralizantes que los adultos. (Tanto los niños como los adultos suelen producir suficientes anticuerpos para frustrar futuras infecciones por coronavirus después de una infección natural o una vacuna).
Si bien el sistema inmunológico adaptativo puede ser eficaz, a veces puede causar más daño que bien.
Al igual que los soldados que matan a sus camaradas con fuego amigo, un sistema inmunológico hiperactivo puede causar daños colaterales, desencadenando una cascada inflamatoria que pisotea no solo los virus, sino también las células sanas de todo el cuerpo.
Así reacciona el sistema inmunológico de los niños
En algunos pacientes con covid, la inflamación descontrolada puede provocar coágulos sanguíneos potencialmente mortales y síndrome de dificultad respiratoria aguda, que ocurre cuando se acumula líquido en los alvéolos pulmonares y dificulta la respiración, dijo Betsy Herold. Ambas son causas comunes de muerte en pacientes adultos con covid.
Debido a que los niños generalmente eliminan el coronavirus muy rápido, evitan este tipo de inflamación peligrosa, dijo.
Las investigaciones muestran que los niños sanos tienen grandes cantidades de un tipo de célula pacificadora, llamadas células linfoides innatas, que ayudan a calmar un sistema inmunológico hiperactivo y reparar el daño a los pulmones, dijo el Dr. Jeremy Luban, profesor de la Facultad de Medicina de la Universidad de Massachusetts.
Los niños nacen con muchas de estas células, pero su número disminuye con la edad. Y tanto los niños como los adultos que están enfermos de covid tienden a tener menos de estas células reparadoras, dijo Luban.
Los hombres también tienen menos células reparadoras que las mujeres, lo que podría ayudar a explicar por qué los hombres tienen un mayor riesgo de morir por covid que las mujeres.
Tanto los niños como los adultos pueden desarrollar “covid prolongado”, los problemas de salud persistentes que experimentan aproximadamente el 10% de los adultos más jóvenes y hasta el 22% de los mayores de 70 años. Mientras que solo del 4% al 11% de los niños tienen síntomas persistentes.
Preguntas sin respuesta
Los científicos tienen menos pistas sobre lo que sale mal en ciertos niños con covid, dijo Kevan Herold, quien enseña inmunobiología en la Facultad de Medicina de Yale.
Las investigaciones sugieren que los niños tienen un sistema inmunológico innato más robusto que los adultos porque han experimentado muchas infecciones respiratorias recientes, durante los primeros años, que pueden preparar su sistema inmunológico para ataques posteriores.
Pero no todos los niños ignoran al covid tan fácilmente, dijo Eils. Los recién nacidos no han vivido lo suficiente como para preparar su sistema inmunológico para la batalla. Incluso los niños pequeños pueden no lograr una respuesta contundente, dijo.
En el Children’s Hospital New Orleans, la mitad de los pacientes de covid tienen menos de 4 años, dijo el Dr. Mark Kline, especialista en enfermedades infecciosas y médico en jefe.
“Hemos tenido bebés de tan solo 7 semanas, 9 semanas de edad en la UCI con ventiladores”, dijo Kline. “Tuvimos un bebé de 3 meses que requirió ECMO”, o oxigenación por membrana extracorpórea, en la que el paciente está conectado a una máquina similar a la máquina de bypass corazón-pulmón que se usa en la cirugía a corazón abierto.
Incluso los niños previamente sanos a veces mueren a causa de infecciones respiratorias, desde covid hasta la influenza o el virus sincitial respiratorio.
Pero los estudios han encontrado que del 30% al 70% de los niños hospitalizados con Covid tenían afecciones subyacentes que aumentan su riesgo, como síndrome de Down, obesidad, enfermedades pulmonares, diabetes o inmunodeficiencias. Los bebés prematuros también corren un mayor riesgo, al igual que los niños que se han sometido a un tratamiento contra el cáncer.
Una cosa que los niños hospitalizados tienen en común es que casi ninguno está vacunado, dijo la Dra. Mary Taylor, presidenta de pediatría del Centro Médico de la Universidad de Mississippi.
“Realmente no hay forma de saber qué niño con covid tendrá un resfriado y estará bien y qué niño estará gravemente enfermo”, dijo Taylor. “Es una sensación de impotencia para las familias sentir que no hay nada que puedan hacer por su hijo”.
Aunque los científicos han identificado mutaciones genéticas asociadas con covid grave, estas variantes son extremadamente raras.
El rol de los “autoanticuerpos”
Los científicos han tenido más éxito al esclarecer por qué ciertos adultos sucumben al covid-19. Algunos casos de covid grave en adultos, por ejemplo, se han relacionado con anticuerpos equivocados que se dirigen a los interferones, en lugar del coronavirus.
Un estudio de agosto en Science Immunology informó que tales “autoanticuerpos” contribuyen al 20% de las muertes por covid.
Sin embargo, los autoanticuerpos son muy raros en niños y adultos jóvenes, y es poco probable que expliquen por qué algunos jóvenes sucumben a la enfermedad, dijo la coautora del estudio, la Dra. Isabelle Meyts, inmunóloga pediátrica de la Universidad Católica de Lovaina en Bélgica.
Aunque las hospitalizaciones están disminuyendo en todo el país, solo ahora están surgiendo algunas de las consecuencias más graves de la infección.
¿Qué es el síndrome inflamatorio multisistémico o MIS-C?
Dos meses después del aumento de la vairante delta, los hospitales de todo el sur están viendo una segunda ola de niños con una afección poco común pero potencialmente mortal llamada síndrome inflamatorio multisistémico o MIS-C.
A diferencia de los niños que desarrollan neumonía por covid, la principal causa de hospitalizaciones entre los niños, los que tienen MIS-C suelen tener infecciones leves o asintomáticas, pero se enferman mucho aproximadamente un mes después y desarrollan síntomas como náuseas, vómitos, sarpullido, fiebre y diarrea.
Algunos desarrollan coágulos de sangre y una presión arterial peligrosamente baja. Más de 4.661 niños han sido diagnosticados con MIS-C y 41 han muerto, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
Aunque los científicos aún no conocen la causa exacta de MIS-C, la investigación de Yonker del Hospital Massachusetts General y otros sugiere que las partículas virales pueden filtrarse desde el intestino al torrente sanguíneo, causando una reacción del sistema en todo el cuerpo.
Es demasiado pronto para saber si los niños que sobreviven al MIS-C sufrirán problemas de salud duraderos, dijo la Dra. Leigh Howard, especialista en enfermedades infecciosas pediátricas del Centro Médico de la Universidad de Vanderbilt.
Aunque un estudio de agosto en The Lancet muestra que la vairante delta duplica el riesgo de hospitalización en adultos, los científicos no saben si eso es cierto para los niños, dijo el Dr. Anthony Fauci, el principal funcionario de enfermedades infecciosas del país.
“Ciertamente, en este momento, no sabemos si los niños tienen una enfermedad más grave, pero la estamos vigilando”, dijo.
Para proteger a los niños, Fauci instó a los padres a vacunarse a sí mismos y a los niños de 12 años en adelante. En cuanto a los niños demasiado pequeños para las vacunas contra el covid, “la mejor manera de mantenerlos a salvo es rodearlos de personas vacunadas”.
Esta historia fue producida por KHN.