(CNN) – Miles de migrantes han abarrotado un campamento improvisado bajo un puente cerca de la ciudad fronteriza de Del Rio, en Texas.
La oleada de migrantes en el puente internacional de Del Rio fue el resultado de los mensajes, de boca en boca o en las redes sociales, de que la frontera en Del Rio estaba abierta, dijo el jefe de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos, Raúl Ortiz. Las escenas caóticas en el puente, que incluyen a agentes de la ley a caballo utilizando tácticas agresivas, han provocado la ira de los funcionarios locales y federales. Algunos han calificado de inhumano el campamento improvisado.
El secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, dijo este martes que el gobierno espera desalojar el campamento en los próximos nueve o diez días. El gobierno de Biden sigue confiando en una política fronteriza de la época de Trump, vinculada a la pandemia de coronavirus, que permite a las autoridades fronterizas expulsar rápidamente a los migrantes detenidos en la frontera entre Estados Unidos y México. En los últimos días, el gobierno ha intensificado esas expulsiones y aumentó el ritmo de los vuelos de repatriación.
La frontera sur ha experimentado un aumento de la migración que, según los funcionarios del gobierno de Estados Unidos, está desbordando las instalaciones de procesamiento. Muchos migrantes dicen que huyen del deterioro de las condiciones en sus países de origen. Un gran número de migrantes proceden de Haití, que aún se recupera de un gran terremoto que dejó más de 2.000 muertos y miles de heridos, así como del asesinato del presidente Jovenel Moïse en julio.
Las siguientes fotos aportan un vistazo a lo que ocurre en la frontera sur y las condiciones en que se encuentran los migrantes.