(CNN Business) – La calificación de la economía en el primer trimestre completo del gobierno de Biden como presidente: buena, pero no genial.
La economía de Estados Unidos creció en el segundo trimestre a un ritmo ligeramente más rápido de lo que se había informado anteriormente, gracias al aumento del gasto de los consumidores, las exportaciones y la inversión en inventarios, informó este jueves la Oficina de Análisis Económico.
Es la segunda vez que se revisa al alza el ritmo de crecimiento del trimestre.
El producto interior bruto (PIB), la medida más amplia de la actividad económica, se expandió a un ritmo del 6,7% entre abril y junio, en lugar del 6,6% y el 6,5% de las estimaciones anteriores.
Sin embargo, incluso con la nueva revisión al alza, ese crecimiento sigue siendo inferior a las expectativas, señaló Mike Englund, economista jefe de Action Economics.
El crecimiento limitado se debe en gran parte a “las interrupciones de la cadena de suministro, que se agravaron en el tercer trimestre”, añadió Englund en una nota a los clientes.
Sin embargo, los estadounidenses gastaron mucho en servicios en la primavera y principios del verano, sobre todo en salir a comer y viajes, debido al aumento en las tasas de vacunación. También gastaron en productos farmacéuticos y en ropa y calzado. Los hoteles y restaurantes fueron los que más contribuyeron al crecimiento del PIB en la comparación de sectores.
El índice de precios que sigue el gasto de los consumidores, el llamado índice de precios PCE, que es la medida de inflación preferida por la Reserva Federal, se mantuvo sin cambios respecto a las estimaciones anteriores en el 6,5%. Es el nivel más alto desde principios de la década de 1980.
El informe también incluyó un recuento de los beneficios empresariales: los bancos y las empresas financieras de Estados Unidos vieron aumentar sus beneficios en US$ 52.800 millones en el segundo trimestre, en comparación con el mísero aumento de US$ 1.300 millones del primer trimestre.
Los beneficios de todas las demás empresas aumentaron en US$ 221.300 millones, frente a los US$ 133.200 millones de los tres primeros meses del año.
Las solicitudes de subsidio de desempleo alcanzan su nivel más alto en siete semanas
En otros datos económicos, las solicitudes semanales de subsidio de desempleo aumentaron a 362.000 la semana pasada, incluyendo los ajustes por variaciones estacionales, según el Departamento de Trabajo. Sin los ajustes estacionales, las solicitudes disminuyeron ligeramente.
Fue el nivel más alto de solicitudes desde principios de agosto, así como la primera vez desde el inicio de la pandemia que las solicitudes aumentaron durante tres semanas consecutivas.
“Sin embargo, la situación actual es muy diferente a la de entonces, por lo que yo tendría mucho cuidado al hacer esa comparación” con el inicio de la pandemia, afirmó el economista jefe de PNC, Gus Faucher, en una nota a los clientes, añadiendo que “el nivel de solicitudes iniciales ahora es solo un 6% de lo que era en ese entonces”.
Las solicitudes continuas de subsidio de desempleo, que contabilizan a los trabajadores que solicitaron prestaciones durante al menos dos semanas seguidas, tuvieron una ligera variación en la semana terminada el 18 de septiembre.
En la semana que finalizó el 11 de septiembre, cinco millones de trabajadores estadounidenses recibieron prestaciones en el marco de los distintos programas gubernamentales, frente a los más de 11 millones de la semana anterior, lo que demuestra que el fin de los programas de desempleo de la era de la pandemia del gobierno se está reflejando en los datos semanales.