(CNN) – Las autoridades encontraron a una mujer alemana de 96 años que huyó el jueves antes de ser juzgada por cargos de colaborar e instigar miles de asesinatos en un campo de concentración nazi y ahora la llevarán ante el tribunal.
“La mujer fue localizada por la policía alemana”, dijo a CNN Frederike Milhoffer, portavoz de la corte en Itzehoe, y agregó que “las autoridades locales están evaluando ahora si puede cumplir una sentencia de prisión”.
El juicio de la exsecretaria, a quien Reuters identificó como Irmgard Furchner, iba a comenzar el jueves según lo programado. La mujer es “sospechosa de haber colaborado e instigado a 11.387 casos de asesinato”, según una acusación judicial.
La acusada era taquígrafa y mecanógrafa en la oficina del comandante en el campo de concentración de Stutthof, cerca de lo que en la actualidad es la ciudad polaca de Gdansk. Se alega que ayudó a los encargados del campo en la matanza sistemática de prisioneros entre junio de 1943 y abril de 1945, según la acusación.
Furchner enfrenta el juicio ante una Sala del Tribunal de Menores porque era adolescente en el momento de los presuntos delitos. Es una de las primeras mujeres en ir a juicio en décadas por presuntos crímenes durante la era nazi.
Según la Oficina Central en Ludwigsburg, que se encarga de investigar los crímenes nazis, alrededor de 65.000 personas murieron en el campo de concentración de Stutthof y sus subcampos, así como en las llamadas marchas de la muerte al final de la guerra.
En julio de 2020, el Tribunal Regional de Hamburgo condenó a dos años de liberad condicional a Bruno D., exguardia de Stutthof de 93 años.
El exguardia supervisó a los prisioneros en Stutthof desde agosto de 1944 hasta abril de 1945 y fue acusado de 5.230 cargos de complicidad de asesinato durante su tiempo como guardia de la SS (la Schutzstaffel, la organización militar y policial de los nazis) en el campo. Se enfrentó a un tribunal de menores porque tenía 17 años en el momento en que sirvió allí.
El próximo jueves también comenzará un juicio contra un guardia de la SS en el antiguo campo de concentración nazi de Sachsenhausen que ahora tiene 100 años.