(CNN) – La Policía Nacional y el Ministerio Público de República Dominicana investigan la muerte de una arquitecta de 36 años, a quien un agente policial que no estaba en servicio supuestamente le propinó un disparo en la cabeza tras un accidente de tránsito en el municipio de Boca Chica, a unos 40 kilómetros de Santo Domingo, la capital del país.
La portavoz de la Policía, la teniente coronel Ana Jiménez Cruceta, dijo en conferencia de prensa que el hecho se produjo la noche de este sábado, luego de que el vehículo conducido por la víctima, Leslie Rosado, impactara la motocicleta que conducía el cabo Janli Disla Batista en compañía de su esposa e hijos.
“Disla Batista, quien andaba en una motocicleta, fue impactado por el vehículo. El cabo, mientras perseguía al vehículo, realizó los disparos que provocaron el lamentable hecho”, explicó Jiménez Cruceta.
La Policía informó que, tras el suceso, Disla Batista trasladó a la víctima al hospital del municipio de Boca Chica, donde fue apresado de inmediato. CNN desconoce si el agente policial ya tiene representación legal.
El Ministerio Público informó, a través de un comunicado este domingo, que en las próximas horas solicitaría medidas de coerción contra el agente. Y adelantó que investiga el caso como un crimen voluntario, tras señalar que las pruebas recabadas hasta el momento muestran una persecución, así como disparos incompatibles con un accidente.
El vocero de la Presidencia, Homero Figueroa, manifestó sus condolencias a la familia de la víctima a través de su cuenta de Twitter.
La Policía de República Dominicana, involucrada en un hecho similar
Este mismo año, una pareja de pastores evangélicos murió a tiros el 30 de marzo a manos de policías, cuando regresaba de participar en una campaña cristiana en el municipio de Villa Altagracia, provincia de San Cristóbal.
La Policía aseguró entonces que se trató de una confusión con el vehículo en el que se desplazaban unos presuntos criminales. Por el caso fueron enviados a cumplir un año de prisión preventiva como medida de coerción los ocho policías que integraban la patrulla, así como el jefe de la dotación policial del municipio.
El Ministerio Público presentó cargos por asesinato con premeditación y acechanza en contra de los agentes, entre otros delitos. Actualmente, el grupo está a la espera del juicio preliminar en un tribunal dominicano.