(CNN Español) – Durante un mensaje a la nación la noche de este lunes, el presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, anunció su decisión de decretar el estado de excepción por “grave conmoción interna” en todo el territorio nacional para enfrentar la escalada de violencia y asesinatos en las calles que han generado temor y zozobra de la población.
Calificó al narcotráfico como el “principal enemigo” del Ecuador y dispuso la movilización de las Fuerzas Armadas en las provincias de Guayas, Pichincha, El Oro, Santa Elena, Los Ríos, Santo Domingo, Manabí, Esmeraldas y Sucumbíos, por presentar los indicadores más elevados de actividad delictiva. En el resto de las provincias ecuatorianas, la Policía deberá coordinar acciones de vigilancia y prevención del delito, según detalla el decreto.
El presidente dijo que la presencia de las Fuerzas Armadas y de la Policía “se sentirá con fuerza en las calles” a través de patrullajes, inspecciones, requisiciones de droga y otras acciones.
“En los últimos años el Ecuador ha pasado de ser un país de tráfico de drogas a uno que también consume drogas. Esto se refleja en la cantidad de crímenes que hoy tienen relación directa o indirecta con la venta de estupefacientes”, dijo Lasso.
El mandatario dijo que cuando el narcotráfico crece, aumentan los sicariatos, homicidios, robos a domicilios, vehículos, bienes y personas. Indicó que más del 70% de las muertes violentas que hoy ocurren en la provincia de Guayas “está de alguna forma relacionada con el tráfico de drogas”.
Lasso ofreció total respaldo a las acciones que emprendan miembros de la Policía y de Fuerzas Armadas en la lucha contra el crimen y anunció la creación de una unidad de defensa legal de la fuerza pública para que se dedique a la protección de sus miembros.
“Actúen con la valentía que los caracteriza. Este gobierno indultará a todos los que hayan sido injustamente condenados por haber cumplido con su labor. Nuestros jueces deben garantizar la paz y el orden, no la impunidad y el crimen. La ley debe intimidar al delincuente más no al policía”, puntualizó el jefe de Estado.
Finalmente, Lasso lamentó la muerte de un niño de 11 años este domingo durante un cruce de balas durante un asalto a una heladería en Guayaquil.
“Sabemos que nada podrá reparar esta tan terrible pérdida, pero todos debemos coger fuerzas para luchar con mayor determinación, para definitivamente acabar con la violencia que arrebató a Sebastián Xavier y a muchos ecuatorianos”.
El mandatario dijo que en este momento le corresponde a su Gobierno “salvar al país de las garras de la delincuencia”.
Lasso llamó a todos los sectores sociales y políticos a trabajar juntos por la seguridad del país independientemente de sus diferencias.