(CNN) – Es hora de estar atentos al tiempo, ya que esta semana se despliega un aluvión de amenazas meteorológicas por todo Estados Unidos, creando peligros de costa a costa.
Desde una “bomba ciclónica” hasta mal tiempo y los fenómenos conocidos como nor’easters, esta semana lo tiene todo.
Órdenes de evacuación en algunas zonas quemadas de California
Mientras una “bomba meteorológica” se convierte en un aguacero en todo el Oeste, se han emitido nuevas órdenes de evacuación para los lugares vulnerables cercanos a las cicatrices de incendios recientes.
Los funcionarios del condado de Santa Bárbara han elevado la reciente advertencia de evacuación a una orden de evacuación para partes de la zona quemada por el incendio de Alisal. Aumenta la preocupación por la posibilidad de que se produzcan peligrosos flujos de escombros debido a la previsión de fuertes lluvias sobre la tierra recientemente quemada.
Las órdenes de evacuación significan que es ilegal permanecer en el lugar, con una amenaza inmediata para la vida y la propiedad.
Las amenazas asociadas a este río atmosférico no se detienen ahí. Se pronostican varios metros de nieve en la cordillera de Sierra Nevada, lo que creará condiciones de conducción casi imposibles, según la oficina del Servicio Meteorológico Nacional (NWS) en Hanford, California.
Se esperan grandes retrasos en los viajes ya que es probable que se apliquen controles de cadena y cierres de carreteras. Estaba previsto que las nevadas más intensas se produjeran en la noche de este domingo a este lunes y serán más intensas en elevaciones por encima de los 1500 metros. Fuertes vientos con ráfagas de más de 80 kilómetros por hora acompañarán a la nieve pesada y húmeda.
El NWS tiene avisos de inundaciones repentinas en una gran extensión del centro y norte de California. Las acumulaciones de lluvia de 76 a 152 milímetros, con cantidades localmente superiores a 255 milímetros, darán lugar a inundaciones repentinas localizadas, deslizamientos de tierra y desprendimientos de rocas.
Las carreteras y los arroyos especialmente vulnerables son los que más riesgo corren con este evento, ya que se prevé que las fuertes lluvias duren hasta el lunes.
Posible brote de tornados hasta el lunes
A principios de esta semana es posible que se produzcan condiciones meteorológicas adversas en gran parte del país.
Se está preparando el escenario para un brote que comienza este domingo a través del valle del Mississippi medio que se moverá hacia el este a las Carolinas y los estados del Atlántico medio para este lunes.
Se ha informado de tornados, granizo de gran tamaño y vientos dañinos hasta la noche de este domingo en partes de Arkansas, Missouri, Illinois e Indiana.
Sin embargo, el Centro de Predicción de Tormentas ha destacado un área específica desde St. Louis hasta Springfield, Missouri, como una amenaza significativa de tornados. Esta región tiene una probabilidad superior al 10% de que se produzca un tornado fuerte (EF-2 a EF-5) en un radio de 40 kilómetros de cualquier punto concreto.
El otoño suele considerarse una estación secundaria de máxima intensidad de fenómenos meteorológicos graves en Estados Unidos.
Las grandes oscilaciones de temperatura asociadas al cambio de estación pueden contribuir a impulsar el desarrollo de fenómenos meteorológicos severos. Aunque los tornados pueden producirse en cualquier momento del año, el otoño suele experimentar un aumento de la actividad cuando el aire cálido y húmedo del sur interactúa con frentes fríos cada vez más potentes del norte.
Los modelos meteorológicos apuntan a un posible nor’easter a mediados de semana
La misma energía asociada al brote de mal tiempo se traducirá en un potente sistema de bajas presiones conocido como nor’easter a lo largo de la costa este de EE.UU. para este martes y el miércoles.
Las condiciones parecen favorables para que se desarrollen fuertes vientos del noreste, que es como un nor’easter recibe su nombre. También es posible que se produzcan inundaciones costeras y lluvias intensas en el sur de Nueva Inglaterra.
Todavía se desconocen los detalles específicos del pronóstico, ya que aún faltan varios días para que se produzca este fenómeno, pero existe la posibilidad de que se produzcan inundaciones urbanas y en las calles. Algunos modelos informáticos predicen más de 150 milímetros de lluvia en la región.
Como las hojas de otoño aún no han caído en gran parte de Nueva Inglaterra, los fuertes vientos podrían derribar fácilmente árboles y ramas. Esto podría provocar cortes de electricidad en toda la región.