CNNE 1091749 - deficit de camioneros en espana podria causar retrasos de abastecimiento
La crisis en la cadena de suministro también afecta a los camioneros de España
02:56 - Fuente: CNN

Hong Kong (CNN Business) – Pocos temas son más importantes para Beijing que la seguridad alimentaria. Durante siglos, los gobernantes se han enfrentado a los desafíos de alimentar a una población grande y en expansión. Las sequías, las inundaciones y las hambrunas ocupan un lugar destacado a lo largo de la historia de China, y las rebeliones iniciadas por campesinos hambrientos derrocaron numerosas dinastías imperiales.

Pero el último intento del Gobierno de evitar las preocupaciones sobre los precios y la oferta parece estar fuera de control.

Una misiva sobre el almacenamiento de alimentos del Ministerio de Comercio de China provocó compras de pánico y especulaciones frenéticas en línea esta semana.

A primera vista, el aviso no parece muy diferente de las típicas directivas que el gobierno chino ha enviado en el pasado enfatizando la necesidad de apuntalar suministros.

Este ordena a las autoridades locales que se aseguren de que sus ciudadanos tengan un “suministro adecuado” de elementos esenciales este invierno. También instruye a esos gobiernos a mantener estables los costos de los alimentos, un punto de preocupación en las últimas semanas, ya que el clima extremo, la escasez de energía y las restricciones de covid-19 amenazan el suministro.

Pero la directiva del lunes ha atraído la atención de los chinos comunes de una manera que pocos otros avisos gubernamentales lo han hecho.

En parte, eso parece deberse a que incluye un lenguaje poco común sobre la necesidad de que las autoridades locales alienten a las familias a acumular “artículos de primera necesidad”. Incluso si el aviso no estaba destinado a ser leído por un hogar promedio, muchos en línea lo han aprovechado como una advertencia personal.

El Gobierno “ni siquiera nos dijo que almacenáramos bienes cuando estalló el brote de covid a principios de 2020”, escribió un usuario en el servicio Weibo similar a Twitter a principios de esta semana.

La reacción se ha intensificado desde entonces. Un video publicado en Weibo por la revista de noticias estatal China News Weekly muestra largas filas de compradores en las tiendas de comestibles de Changzhou, una ciudad en la provincia de Jiangsu. Sus carros están llenos de productos y otros suministros, mientras que los estantes de las tiendas están vacíos.

La alimentación es un tema muy delicado en China. La Gran Hambruna China durante las décadas de 1950 y 1960 provocó la muerte de decenas de millones de personas.

La tragedia permanece en la memoria viva de muchos en el país. Y aunque la economía de China ha experimentado una transformación dramática desde entonces, las preocupaciones sobre la seguridad alimentaria persisten: el Gobierno, por ejemplo, dio a conocer recientemente un “plan de acción” que anima a la gente a no pedir más comida de la que necesita y a informar sobre restaurantes que desperdician comida.

Sin embargo, el malestar causado por el aviso del Ministerio de Comercio ha sido inusualmente intenso. La especulación desenfrenada incluso ha vinculado el llamado a almacenar alimentos con el aumento de las tensiones entre Beijing y Taipei. China considera a Taiwán una “parte inseparable” de su territorio, a pesar de que el Partido Comunista Chino nunca ha gobernado la isla autónoma.

No hay nada en absoluto que corrobore los rumores de que China se está preparando para una guerra inminente. Pero el pánico en línea sugiere cierta tensión, según Willy Lam, profesor adjunto en el Departamento de Historia de la Universidad China de Hong Kong.

“Es un reflejo de la tensa situación geopolítica entre China y los países vecinos”, dijo.

Lam también señaló varias inquietudes económicas que pueden estar contribuyendo a la confusión. La crisis energética de este año obligó a las fábricas a suspender parte de la producción y provocó apagones en los hogares, problemas que en algunos casos “ocurrieron sin previo aviso del Gobierno”, dijo.

“Refleja la ansiedad de la gente con respecto a nuevos aumentos drásticos en los [costos de] alimentos y también una desconfianza en el Gobierno”, agregó Lam.

El gobierno chino y algunos medios de comunicación estatales han tratado de disipar los temores sobre la escasez de alimentos.

Zhu Xiaoliang, un funcionario del Ministerio de Comercio, le dijo a la emisora estatal CCTV esta semana que hay muchos suministros para todos. Zhu enfatizó que la directiva estaba destinada a las autoridades locales.

El Departamento de Manejo de Emergencias de Jiangsu, mientras tanto, reconoció las preocupaciones sobre los “suministros de emergencia” en su cuenta de WeChat el martes. Pero la agencia dijo que cualquier recomendación para el almacenamiento es “normal” y tiene la intención de “mejorar la conciencia de la gente sobre la prevención de desastres”.

El compromiso del Gobierno con una política de covid cero, incluso cuando los países de todo el mundo reabren y aprenden a vivir con el coronavirus, también es probable que sea un factor. Un solo caso puede impulsar a las autoridades chinas a actuar, confinando áreas enteras y llevando a cabo pruebas masivas o requisitos de cuarentena.

Esas medidas “probablemente afectarán a los residentes que van a las tiendas y también afectarán las horas de funcionamiento de los mercados”, dijo Chenjun Pan, analista senior de Rabobank que investiga la agricultura en China.

Wang Hongcun, funcionario de la Oficina de Comercio Municipal de Beijing, reconoció la semana pasada que las estrictas medidas de contención pueden estar contribuyendo al aumento del costo de los alimentos, y agregó que el costo de tránsito entre regiones podría aumentar. Señaló que los precios de algunas verduras en la capital del país se habían disparado un 50% o más en octubre.

Lam dijo que tampoco es probable que Beijing cambie de rumbo, lo que significa que las ciudades deben prepararse para soportar bloqueos potencialmente prolongados mientras el Gobierno intenta mantener bajo el recuento de casos de coronavirus.

“Esta es una preparación para el hecho de que estas condiciones de confinamiento continuarán, aunque en general, las cifras totales para China son en realidad muy bajas en comparación con otros países”, agregó. “Es poco probable que Beijing detenga esta política de tolerancia cero”.

El buró de CNN en Beijing contribuyó a este informe.