(CNN Español) – La nueva variante ómicron del coronavirus ha hecho sonar las alarmas en todo el mundo y la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha calificado al riesgo global como “muy alto”, mientras los investigadores se preguntan si causa una enfermedad más severa y si es más transmisible.
Estados Unidos y varios países en Europa y del resto del mundo han establecido restricciones para los vuelos provenientes de países en el sur de África y especialmente de Sudáfrica, donde se registraron los primeros casos de ómicron.
Mientras tanto, investigadores trabajan contrarreloj para determinar cuán transmisible es esta variante ómicron y cuán efectivas podrían ser las vacunas que existen al momento, ante la preocupación de que la variación tenga el potencial de escapar de los inmunizantes.
La pregunta que preocupa: ¿causa ómicron una enfermedad más severa?
De acuerdo con la última actualización publicada por al OMS este domingo, no hay al momento información sobre la severidad de la covid-19 generada por ómicron en comparación con otras variantes, incluyendo delta, y deberán pasar varias semanas de investigaciones para averiguarlo.
Tampoco hay información que sugiera que ómicron, identificada como variante B.1.1.529, cause síntomas distintos a los de otras variantes.
Sí existen datos preliminares sobre un aumento en las hospitalizaciones por covid-19 en Sudáfrica, pero esto puede atribuirse al crecimiento general de los contagios en el país. También se sabe que ómicron se ha convertido rápidamente en la variante dominante en los lugares donde ha surgido en Sudáfrica.
Sudáfrica ha vacunado con dos dosis a menos del 36% de su población adulta y su tasa de nuevas vacunaciones ha descendido en los últimos días, según el Departamento de Salud del país.
Por otro lado, una doctora que trató a algunos pacientes en Sudáfrica dijo a Reuters que sus pacientes solo tenían síntomas leves. “La queja clínica más predominante es la fatiga severa durante uno o dos días, y luego el dolor de cabeza y los dolores corporales”, dijo Angelique Coetzee, presidenta de la Asociación Médica Sudafricana.
Al respecto, la OMS señaló que los primeros reportes de contagios en Sudáfrica han sido entre gente joven, que generalmente tienden a experimentar una enfermedad leve o moderada.
La OMS también ha indicado que pruebas preliminares sugieren que puede haber un mayor riesgo de reinfección con ómicron, en comparación con otras variantes de interés, pero la información es limitada.
Una serie de mutaciones en ómicron
Científicos genómicos en Sudáfrica dijeron a principios de esta semana que la variante tiene un número inusualmente alto de mutaciones, con más de 30 en la proteína de pico, la estructura que el virus utiliza para entrar en las células que atacan.
Esas mutaciones podrían hacer que la variante sea más transmisible y más resistente a las vacunas.
Investigadores han señalado por ejemplo a la mutación E484K, que puede hacer que el virus sea menos reconocible para algunos anticuerpos, o la N501Y, que dio a las variantes alfa y gamma su mayor transmisibilidad. Ambas están presentes en ómicron.
La nueva variante también está afectada, al igual que delta, por la mutación D614G, que parece ayudar al virus a adherirse mejor a las células que infecta.
“El número de mutaciones per se no significa que la nueva variante vaya a causar ningún problema; aunque puede hacer que tenga un aspecto más diferente para el sistema inmunitario”, dijo en un comunicado el Dr. Peter English, ex presidente del Comité de Medicina de Salud Pública de la Asociación Médica Británica.
Con información de Christina Maxouris, Maggie Fox, Laurent Kent