(CNN) – Comprar una vivienda barata en Italia es una posibilidad atractiva para muchos viajeros, sobre todo con el número cada vez mayor de ciudades que ofrecen casas por casi nada a través de planes de recuperación.
Mientras que algunos han sido lo suficientemente valientes como para dar el salto y adquirir una casa cuyo precio oscila entre uno y unos pocos miles de euros en un pueblo rural italiano, es probable que otros se hayan desanimado por el miedo a que algo salga mal.
Pero, ¿hay alguna señal de alarma a la que los compradores potenciales deban prestar atención cuando piensen en comprar de una casa de este tipo? ¿Y cómo saber si están pisando en terreno no confiable?
Cuando se trata de ofrecer consejos y sugerencias valiosas sobre este tema en particular, nadie está mejor preparado que quienes ya lo hicieron.
FOTOS | Consejos para comprar una casa barata en Italia
En enero, la localidad italiana de Biccari saltó a los titulares cuando empezó a vender tanto viviendas de un euro en mal estado como casas listas para ser ocupadas que necesitaban arreglos mínimos, siendo estas últimas las más exitosas.
El alcalde Gianfilippo Mignogna optó por ofrecer las viviendas en un intento de reanimar el maltrecho pueblo, cuya población ha disminuído a lo largo de los años al marcharse numerosos residentes a buscar trabajo en las ciudades italianas o en otros países.
A continuación, tres de los que compraron, o ayudaron a comprar, una de las viviendas llave en mano cuentan su experiencia.
Problemas “heredados”
Mariano Russo, argentino con raíces italianas, compró una acogedora casa de 55 metros cuadrados y dos plantas en Biccari por 7.000 euros (unos US$ 7.800).
La casa de Russo estaba reformada cuando se vendió, incluso las paredes estaban recién pintadas, y tiene una terraza panorámica, mientras que la entrada está situada en un pintoresco callejón del centro histórico del pueblo. Además del precio de compra, el notario para la escritura de compra le costó 3.000 euros (US$ 3.400) más.
“Ya es habitable. Spolo hay que modernizar el sistema de agua corriente y la calefacción, y tal vez arreglar algunas partes del suelo”, dice Russo, directivo de Argentina Per Il Mondo, una organización que une a los ítalo-argentinos de todo el mundo.
“La estructura es sólida, aunque es una casa antigua no hay moho en las paredes y el techo está en perfecto estado”.
Según Russo, el proceso de compra fue muy fluido gracias al apoyo del topógrafo local encargado del proyecto.
“Es fundamental tener a alguien que te guíe en el camino, tuvimos la suerte de contar con este agente”, explica Russo, que planea vivir en Biccari con su mujer y sus dos hijas durante gran parte del año.
“Nos preparó el papeleo y nos ayudó a pagar los impuestos de la propiedad. Se aseguró de que la casa estuviera libre de cualquier deuda anterior, algo que no quieres descubrir después de haberla comprado”.
Sin embargo, Russo estuvo a punto de verse atrapado en la pesadilla laberíntica en la que otros se han encontrado al comprar una propiedad italiana con múltiples propietarios.
Esta casa tenía dos propietarios, hermanas que vivían en ciudades diferentes. Ambas tenían que ponerse de acuerdo primero en la venta y luego en el precio final.
Afortunadamente, las hermanas estaban en buenos términos y las cosas salieron bien. Pero no siempre es así.
Según la ley italiana, aunque una propiedad tenga 1.000 propietarios diferentes, cada uno debe estar de acuerdo con la venta, de lo contrario no puede llevarse a cabo. Y digamos que en Italia hay bastantes parientes peleones.
Por tanto, los compradores, con la ayuda del foro, deben evitar el riesgo de que un heredero desconocido aparezca de la nada para reclamar la propiedad vendida.
Russo señala que también es importante asegurarse de que no hay hipotecas pendientes sobre la propiedad y de que todos los arreglos o renovaciones mínimas realizados por los anteriores propietarios tienen un permiso legal cuyo costo haya sido pagado. De lo contrario, el nuevo propietario tendrá que solucionarlo o enfrentarse a las consecuencias legales.
Los compradores también deben ser conscientes de los daños a terceros que puedan haber causado los antiguos propietarios de la vivienda antes de firmar la escritura de compra.
Por ejemplo, si una tubería de agua dañada inundó la cocina de un vecino, o si un tejado caído agrietó un edificio adyacente a la propiedad.
Incluso las remodelaciones anteriores podrían ser un problema si no se aprobaron debidamente o se autorizaron a posteriori mediante la llamada amnistía de construcción.
“Una de las hermanas no pudo estar presente el día de la escritura, así que delegó en la otra para que firmara en su nombre”, explica Russo.
“Nos aseguramos de que todo estaba bien con la venta. Las hermanas habían remodelado la casa en el pasado, habían derribado una pared para unir dos habitaciones, pero la amnistía de la construcción estaba resuelta”.
“Todo esto debe aparecer en los papeles, antes de la venta. Nadie quiere problemas de última hora”.
Si esa remodelación no se ha comunicado al foro, que es un requisito legal, el nuevo comprador podría encontrarse en una situación en la que la escritura de compra, y la venta, se anulan.
FOTOS | Bisaccia, otro pueblo italiano que está vendiendo casas a 1 euro
El intermediario adecuado
Encontrar un agente eficaz fue un factor clave para Rolf Bauer, ingeniero jubilado de Alemania, a la hora de elegir una casa de oferta en Biccari.
“Me gusta el ambiente del pueblo, creo que el destino me envió aquí. Este verano viajé a Apulia para elegir una casa y fue el primer pueblo en el que me detuve. Era perfecto”, dice Bauer, que pagó 30.000 euros (US$ 34.000) por su casa reformada.
“Enseguida encontré la oficina del topógrafo, que era genial. Tener a la persona adecuada que te ayude a elegir la casa más adecuada para ti es muy importante”.
Bauer optó por comprar en Apulia en lugar de en Sicilia, donde en varias ciudades se venden casas a un euro.
“Sicilia está demasiado al sur, además nunca quise una casa de un euro”, explica. “Requiere demasiado trabajo”.
Bauer, que tiene otras propiedades en Europa, consideró que los gastos del agente –menos de 500 euros (US$ 560)– eran muy inferiores a los que ha tenido que pagar en otros países.
Al haber elegido Biccari para su residencia, Bauer no tiene que pagar impuestos sobre la propiedad, lo cual es otro punto a favor.
“Me di cuenta de que hay que hacer algo con el dinero,utilizarlo para relajarse y disfrutar de la vida”, dice. “Soy un coleccionista de casas, y en Biccari encontré un lugar cálido donde puedo vivir varios meses al año. Odio el frío, aquí probablemente ni siquiera necesite poner la calefacción”.
Su casa de 150 metros cuadrados está repartida en tres plantas, con vistas panorámicas, y cuenta con techos abovedados, una cocina abierta, una gran bodega y una escalera de piedra que conduce a la entrada principal.
Bauer realizó él mismo algunas de las obras menores, como poner nueva loza, la mejora del sistema eléctrico y la instalación de una nueva regadera. Tiene previsto convertir el dormitorio del piso superior en un porche.
A diferencia de la mayoría de los compradores, Bauer no compró ningún mueble, ni electrodoméstico, ni siquiera las bombillas. En cambio, los envió desde países como Alemania, donde, según él, los precios, y a veces la calidad, pueden ser mejores.
“Depende de lo que quieras, y de si tienes contactos de proveedores en otros lugares como yo. Siempre es bueno echar un vistazo y comparar”, dice.
Bauer, que es un gran jugador de squash, lleva ya dos meses viviendo en su nueva morada de Biccari, y está disfrutando mucho de la experiencia.
Aunque el idioma ha sido una especie de barrera pues Bauer no habla italiano, hasta ahora ha recurrido a las aplicaciones de traducción, y ha comprobado que los lugareños suelen hacer el esfuerzo de intentar entender si están interesados en hablar con él.
Problemas notariales
El proceso de compra de una vivienda barata en Biccari fue un poco más complicado para Aksana Klimavets, una intérprete rusa que vive en Italia que ayudó a una empresaria moscovita a comprar una antigua vivienda aquí por 15.000 euros (unos US$ 16.800).
Escondida en un estrecho callejón empedrado, la casa de tres plantas estaba totalmente reformada en el momento de la venta, con techos abovedados blancos recién pintados, escaleras de mármol y una terraza panorámica con vistas a una pequeña plaza; los antiguos propietarios incluso dejaron un carrito de bebé olvidado.
Pero, según Klimavets, encontrar un notario disponible para dar fe de las firmas en la escritura fue increíblemente difícil y el proceso de venta duró varios meses.
“Cuando conseguimos encontrar un notario, nos dijeron que teníamos que transferir el dinero inmediatamente antes de la escritura, lo que es imposible dadas las estrictas normas rusas sobre los pagos internacionales que tardan muchos días”, explica. “El banco tiene que comprobar y autorizar, y esto retrasó la venta”.
Para acelerar el proceso, el cliente de Klimavets decidió transferir el dinero al notario con bastante antelación a la reunión reprogramada para firmar el acuerdo, lo que significaba comprar la casa sin verla.
Una vez acordado esto, el cliente voló desde Moscú para firmar la escritura y descubrió que el notario se había equivocado de dirección.
“Por suerte, lo comprobamos dos veces o habríamos acabado comprando la propiedad de otra persona”, añade Klimavets.
Cuando ella y el comprador se reunieron con los propietarios, descubrieron que la casa no solo tenía cinco herederos, sino que había sido heredada varias veces.
“Esa casa tiene una historia muy larga, durante la reunión de la escritura, el notario nos leyó la lista de los anteriores propietarios y ahora estamos en contacto con un heredero para transferir las facturas de los servicios”, explica.
Tras superar este obstáculo, la nueva propietaria tuvo que pasar por el proceso de abrir una cuenta bancaria en Italia, que puede ser especialmente difícil para los que proceden de Rusia, antes de poder pagar cualquier factura o disfrutar de su retiro vacacional.
Pero, a pesar de estas dificultades, Klimavets afirma que su cliente se ha enamorado de las limpias calles de Biccari y de su prístino entorno.
“Para los rusos, Apulia es un destino de primera”, añade. “Está el aeropuerto [internacional] de Bari y la tumba de San Nicolás, que es un lugar de peregrinación ruso-ortodoxo”.
La compradora, una empresaria, no puede esperar a poder aprovechar al máximo su nueva propiedad, y planea añadir más ventanas y otra chimenea.