(CNN) – La Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés) del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, le da una posición privilegiada a la crisis climática en su nuevo documento de planificación estratégica a cuatro años, luego de que la administración Trump borrara toda mención al clima de su plan anterior.
Abordar la resiliencia climática es uno de los tres objetivos principales descritos en el plan de FEMA para 2022-2026, que indica cómo responderá a los desastres y gastará los fondos federales. El documento se compartió primero con CNN.
El nuevo plan no solo mete reversa al de la administración de Trump, sino que pone aún más énfasis en la crisis climática que los planes producidos por la administración Obama.
“Debemos reconocer que nos enfrentamos a una crisis climática y educarnos a nosotros mismos y a la nación sobre los impactos que el cambio de nuestro clima representa en el campo de la gestión de emergencias”, dijo en el plan la administradora de FEMA de Biden, Deanne Criswell.
Lo que incluye el plan de FEMA
El plan enfatiza la comprensión de cómo el clima está cambiando y exacerbando los desastres naturales – inundaciones más frecuentes, huracanes más húmedos e incendios forestales cada vez más destructivos – y también subraya cómo la agencia intentará distribuir fondos de manera más equitativa a comunidades históricamente desatendidas.
“La intersección de los severos impactos del cambio climático y la realidad de las desigualdades que existen en las comunidades antes de que ocurra un desastre es lo que estamos abordando agresivamente en FEMA”, dijo Criswell a CNN en un comunicado.
El nuevo documento se centra en tres áreas clave: un enfoque en la equidad en la respuesta de gestión de emergencias y la diversificación de la fuerza laboral de la agencia, el refuerzo de la resiliencia climática en todo el país y el fortalecimiento de su fuerza laboral de gestión de emergencias.
“El cambio climático es el mayor desafío al que se enfrentan los administradores de emergencias en la actualidad, y seguirá dando forma a las próximas décadas”, se lee en el plan. Según el documento, la agencia fusionará la ciencia climática en su política, programas, asociaciones, operaciones de campo y capacitación, según el informe.
Mitigación de inundaciones
El informe también subraya los planes de FEMA para ayudar a las comunidades a adaptarse al cambio climático. FEMA utilizará la mayor parte de los US$ 6.800 millones que recibió del proyecto de ley de infraestructura bipartidista para ayudar a las comunidades a lidiar con los desastres naturales, incluidas las inundaciones.
La mitigación de inundaciones puede significar varias cosas, incluida la elevación de viviendas y edificios que han sido afectados repetidamente por inundaciones. FEMA también puede usar fondos para ofrecer adquisiciones a los residentes cuyas casas están siendo devoradas por el aumento del nivel del mar.
“FEMA ya no se ve a sí misma solo como una agencia de respuesta, sino como una verdadera agencia de resiliencia”, dice en el informe la Asesora Nacional de Clima de la Casa Blanca, Gina McCarthy.
La administración de Biden está hablando sobre el cambio climático mucho más que incluso las administraciones demócratas anteriores. Craig Fugate, exadministrador de FEMA con Obama, le dijo a CNN que el clima no había sido una gran parte de la planificación de desastres de la agencia hasta el huracán Sandy en 2012.
“Hasta ese momento, no estábamos lidiando estrictamente con el clima”, dijo Fugate, ahora el director de resiliencia de la empresa de software One Concern. Agregó que cuando sucedió Sandy, “se estaba volviendo más evidente que el clima ya había cambiado y no estábamos adaptados a ello”.
Equidad
La equidad es otro gran enfoque en el plan. El plan de FEMA dice que la agencia requerirá que “las comunidades desatendidas puedan acceder y aprovechar los recursos de FEMA de manera que satisfagan sus necesidades”, y eliminar las barreras a los fondos y programas federales para comunidades más pequeñas y desatendidas que carecen de personal y administradores de emergencias.
Fugate dijo que el énfasis concertado de FEMA en la equidad es notable y puede dirigirse hacia lo que él llamó la “división de resiliencia”, donde las comunidades más vulnerables quedan atrás por fórmulas de financiamiento federal que pueden priorizar bases impositivas más ricas, y que las comunidades más ricas con planificadores pueden aprovechar al máximo.
En el pasado, FEMA “se centró mucho en evitar riesgos medidos en dólares”, dijo Fugate a CNN. “Las comunidades más vulnerables se han quedado atrás; históricamente hemos estado midiendo la mitigación en dólares”.
Fugate dijo que cualquier cambio que la agencia pueda hacer que “mida los impactos en las personas como el motor principal en lugar de los dólares” sería un avance positivo.
“Nunca fue la intención del programa hacer eso, pero al enfocarse únicamente en los dólares … creó ese escenario”, dijo.