Nueva York (CNN Business) – McDonald’s llegó a un acuerdo con el exCEO Steve Easterbrook, que obliga al ejecutivo desacreditado a devolver el paquete de indemnización que recibió por el despido, que asciende a más de US$ 100 millones.
Easterbrook fue despedido en 2019 después de que la junta directiva del gigante de la comida rápida determinara que había violado la política de la compañía al demostrar “mal criterio acerca de una reciente relación consensual con una empleada”. En agosto de 2020, McDonald’s presentó una demanda contra Easterbrook por mentir a la junta sobre el alcance de sus relaciones con empleados.
En una presentación ante la Comisión de Seguridad e Intercambio de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés) este jueves, McDonald’s criticó a Easterbrook por su “mala conducta, mentiras y esfuerzos para impedir las investigaciones sobre sus acciones” y que el acuerdo es el mejor camino a seguir.
“Este acuerdo hace responsable a Steve Easterbrook de su clara mala conducta, incluyendo la forma en que explotó su posición como CEO”, dijo en la presentación Enrique Hernández, Jr. el presidente de la junta directiva de McDonald’s. “La resolución evita un proceso judicial prolongado y nos permite seguir adelante”.
Easterbrook admitió en la presentación ante la SEC que en ocasiones no defendió los valores de McDonald’s ni cumplió con algunas de sus responsabilidades como líder de la compañía. También se disculpó ante la junta directiva, sus excompañeros de trabajo y los franquiciados y proveedores de la empresa.
El importe total de su indemnización es de US$ 105 millones en efectivo y acciones. Sin embargo, no está claro a cuánto corresponde cada parte.
La demanda de McDonald’s afirma que la empresa fue informada de otras relaciones de Easterbrook con empleadas en julio, y abrió una nueva investigación que encontró pruebas de tres relaciones sexuales.
Las pruebas de esas relaciones, según la demanda, llegaron en forma de “docenas de fotografías y videos de desnudos, parcialmente desnudos o sexualmente explícitos de varias mujeres”, incluidas fotografías de las tres empleadas. Easterbrook supuestamente adjuntó las imágenes a correos electrónicos que envió desde su trabajo a su cuenta personal.