(CNN) – El centro de nuestra galaxia, la Vía Láctea, alberga una multitud de características intrigantes, que incluyen casi mil hilos magnéticos misteriosos, según una nueva imagen del telescopio.
Los pares y grupos de hebras se extienden por casi 150 años luz de longitud y están igualmente espaciados.
Las extrañas estructuras tienen unos pocos millones de años y varían en apariencia. Algunos de ellos se asemejan a cuerdas de arpa, cascadas o incluso los anillos alrededor de Saturno.
Pero la verdadera naturaleza de los filamentos sigue siendo esquiva.
Farhad Yusef-Zadeh, profesor de física y astronomía en la Universidad Northwestern, descubrió las hebras por primera vez hace 35 años a través de ondas de radio. Determinó que las hebras estaban hechas de electrones de rayos cósmicos que movían sus campos magnéticos casi a la velocidad de la luz. Sin embargo, el origen de estos hilos sigue siendo un misterio.
Ahora, los astrónomos pudieron encontrar 10 veces más hilos que el descubrimiento anterior de Yusef-Zadeh, utilizando el telescopio MeerKAT del Observatorio de Radioastronomía de Sudáfrica.
Un estudio que detalla estos hallazgos fue aceptado para su publicación en The Astrophysical Journal Letters.
“Hemos estudiado filamentos individuales durante mucho tiempo con una visión miope”, dijo Yusef-Zadeh, autor principal del estudio y miembro del Centro de Exploración e Investigación Interdisciplinaria en Astrofísica de Northwestern, en un comunicado.
“Ahora, finalmente vemos el panorama general: una vista panorámica llena de una gran cantidad de filamentos. Solo examinar unos pocos filamentos hace que sea difícil sacar una conclusión real sobre qué son y de dónde provienen. Este es un punto de inflexión en la promoción nuestra comprensión de estas estructuras”.
La nueva imagen detallada en realidad se compone de un mosaico de 20 observaciones diferentes tomadas durante tres años mientras miraba hacia el centro distante de la Vía Láctea, ubicado a 25.000 años luz de la Tierra.
Además de las hebras largas, la imagen muestra las firmas del nacimiento de estrellas y los restos de estrellas explotadas a través de emisiones de radio. Yusef-Zadeh y su equipo de investigación se centraron únicamente en las hebras y las aislaron de los demás fenómenos capturados en la imagen.
“Es como el arte moderno”, dijo. “Estas imágenes son tan bellas y ricas, y el misterio de todo lo hace aún más interesante”.
Separando las hebras
La cantidad de radiación varió de otros eventos cósmicos energéticos, como los remanentes de supernova, mostró el análisis del equipo de los hilos. Los científicos creen que es más probable que los hilos estén relacionados con la actividad pasada causada por el agujero negro supermasivo en el centro de la Vía Láctea en lugar de las explosiones de estrellas.
El equipo también determinó que los campos magnéticos son más fuertes a lo largo de las hebras.
Estudiar un grupo más grande de hebras permite a los científicos comprenderlas mejor, aunque quedan muchos misterios.
“Si fueras de otro planeta, por ejemplo, y te encontraras con una persona muy alta en la Tierra, podrías asumir que todas las personas son altas”, dijo Yusef-Zadeh. “Pero si haces estadísticas de una población de personas, puedes encontrar la altura promedio. Eso es exactamente lo que estamos haciendo. Podemos encontrar la fuerza de los campos magnéticos, sus longitudes, sus orientaciones y el espectro de radiación”.
A medida que el equipo trabaja para identificar cada hilo, todavía están tratando de averiguar la distancia ordenada e igual entre los grupos de hilos, la causa de la aceleración de las partículas o si los hilos se mueven con el tiempo.
“Cada vez que respondemos una pregunta, surgen muchas otras preguntas”, dijo Yusef-Zadeh. “¿Cómo se aceleran los electrones a una velocidad cercana a la de la luz? Una idea es que hay algunas fuentes al final de estos filamentos que aceleran estas partículas”.
Es posible que los hilos estén conectados con un descubrimiento anterior de Yusef-Zadeh y su equipo en 2019: estructuras de globos gigantes en el corazón de la galaxia.
En el futuro se publicarán múltiples estudios sobre las hebras, y los científicos esperan descubrir cómo encajan entre la maraña de objetos cerca del centro de la Vía Láctea.
“Esperamos llegar al fondo, pero se necesitan más observaciones y análisis teóricos”, dijo. “Una comprensión completa de los objetos complejos lleva tiempo”.