(CNN Español) -- Mientras la acumulación de fuerzas militares de Rusia en la frontera con Ucrania y la amenaza de un conflicto bélico en Europa acaparan la atención del mundo, Moscú sigue insistiendo en que no busca una guerra y que la responsabilidad de la crisis es de la OTAN, aunque Estados Unidos y sus aliados han dicho que la autoría de la crisis pertenece a Rusia. ¿En qué se basa esta postura y en qué se basa la de la alianza atlántica? Sergey Lavrov, canciller de Rusia, dijo este jueves frente a un grupo de periodistas en la primera respuesta formal de su país al documento que la OTAN y Estados Unidos le entregaron el día anterior con respecto a la crisis en Ucrania. Suenan tambores de guerra en Ucrania: ¿cómo puede afectar esto a los países de América Latina? En las fronteras del país con Ucrania se han estado concentrado fuerzas militares desde hace meses, y la amenaza de un conflicto bélico ha generado una escalada entre Rusia y la OTAN, cuyo miembro más poderoso es Estados Unidos. “No hay una reacción positiva sobre el tema principal en este documento. El problema principal es nuestra posición clara sobre la inadmisibilidad de una mayor expansión de la OTAN hacia el este y el despliegue de armas de ataque que podrían amenazar el territorio de la Federación Rusa”, dijo Lavrov. La reacción de Lavrov al documento, que en sí mismo era también una respuesta a las exigencias de Rusia presentadas semanas antes, parece cimentar la postura de Moscú en torno la escalada militar: que la expansión de la OTAN hacia el este, con el ingreso a la alianza de múltiples países y la vecindad con Ucrania, son una amenaza para su seguridad y la principal causa de sus despliegues recientes. Las acusaciones de Rusia En diciembre el presidente de Rusia, Vladimir Putin, ya había explicado en más detalle por qué culpaba a la OTAN por la crisis en Ucrania. ¿Qué es la OTAN y en qué momentos actúa? "¿Cómo reaccionarían los estadounidenses si en su frontera con Canadá desplegáramos nuestros misiles? Es una cuestión de seguridad y ya conocen nuestras líneas rojas", dijo Putin en una conferencia de prensa. "Nos han engañado descaradamente. Cinco oleadas de expansión de la OTAN. Y ahí está: ahora están en Rumanía y Polonia, con sistemas de armas", dijo Putin, asegurando que Rusia "no quiere acciones militares". "Pedimos directamente que no haya más movimientos de la OTAN hacia el este. La pelota está en su cancha". La respuesta de la OTAN Jens Stoltenberg, secretario general de la OTAN, dijo este miércoles que "Rusia debe abstenerse de adoptar posturas basadas en la fuerza coercitiva, una retórica agresiva y actividades malignas dirigidas contra los Aliados y otras naciones", y que debe retirar sus fuerzas de Ucrania, Georgia y Moldova, "donde están desplegadas sin el consentimiento de estos países". Stoltenberg también señaló durante la conferencia de prensa que los países tienen "el derecho a elegir sus propios acuerdos de seguridad", en referencia a los ingresos en los últimos años a la OTAN. "Por tanto, se trata de respetar el derecho de autodeterminación". El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, reafirmó al día siguiente en diálogo con su par de Ucrania, Volodymyr Zelensky, que su país "responderá de manera decisiva si Rusia invade Ucrania", aunque no estaba claro si esto incluirá despliegue de tropas o solo sanciones económicas. "El presidente Biden señaló que Estados Unidos proporcionó a Ucrania más de US$ 500 millones en asistencia humanitaria y para el desarrollo en el último año, y está explorando un apoyo macroeconómico adicional para ayudar a la economía de Ucrania en medio de la presión resultante de la acumulación militar de Rusia", dice el comunicado de la Casa Blanca sobre la llamada entre Biden y Zelensky. ¿Cómo surgió la OTAN? La Organización del Tratado del Atlántico Norte se formó el 4 de abril de 1949 como una alianza defensiva formada por Bélgica, Canadá, Dinamarca, Francia, Islandia, Italia, Luxemburgo, Países Bajos, Noruega, Portugal, Reino Unido y Estados Unidos. La ceremonia oficial de firma de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), el 4 de abril de 1949 en Washington. ¿Defensa contra quién? Contra la Unión Soviética, en el contexto de una incipiente Guerra Fría, y basada en las potencias occidentales aliadas durante la Segunda Guerra Mundial. Estados Unidos, la Unión Soviética y China, habían sido aliados contra las potencias del Eje durante la Segunda Guerra y los tres integran hoy el Consejo de Seguridad de la ONU, junto con el Reino Unido y Francia. El ingreso de Alemania Occidental a la OTAN en 1955 motivó la formación de una alianza defensiva similar, y contraria, entre la Unión Soviética y los países del Europa del este bajo su esfera: el Pacto de Varsovia. La OTAN y el Pacto de Varsovia crecieron en capacidades y miembros durante la Guerra Fría. Pero en 1991, en medio del colapso de la Unión Soviética, el Pacto de Varsovia se disolvió. Las relaciones directas entre la Federación Rusa, surgida en 1991, y la OTAN han estado regidas primero por el Consejo Permanente Conjunto (PJC, por sus siglas en inglés), formado en 1997 en el marco del Acta Fundacional de Relaciones Mutuas, Cooperación y Seguridad entre la OTAN y Rusia, y luego por el Consejo de la OTAN y Rusia (NRC, por sus siglas en inglés), que lo reemplazó en 2004 y sigue vigente. Desde entonces el crecimiento de la OTAN no ha cesado, especialmente en lo referido al ingreso en la alianza de antiguas repúblicas socialistas independizadas de la Unión Soviética o países de Europa del este antiguamente en la esfera de influencia de Moscú. De la cortina de hierro a la Alianza Atlántica Los exmiembros del Pacto de Varsovia Hungría, Polonia, República Checa, Eslovaquia, Bulgaria, Rumania y Albania ingresaron en la OTAN entre finales del siglo XX y comienzos del XXI. Mientras que Alemania del Este también pasó a formar parte de la alianza tras la reunificación, en 1990. Por otro lado los países bálticos Lituania, Estonia y Letonia, independizados de la URSS en 1991, ingresaron la OTAN en 2004. Ucrania, ahora en el centro del conflicto entre Estados Unidos y Rusia, comenzó a acercarse a la OTAN en el mismo año de su independencia, cuando se unió al Consejo de Cooperación del Atlántico Norte, un foro creado junto a ex miembros del Pacto de Varsovia, incluyendo también a Rusia. En 1997 Ucrania firmó con la OTAN un acuerdo de asociación, y en 2008 manifestó sus intenciones de convertirse en miembro, una aspiración compartida también por Georgia, otro estado independizado de la Unión Soviética. Pero Rusia se opuso con fuerza a ambas aspiraciones, llevando incluso a la OTAN a poner paños fríos y posponer el proceso. También en Ucrania el gobierno y el parlamento han reaccionado en forma similar ante las presiones de Moscú. Además, en 2008 Rusia protagonizó una corta guerra en Georgia en apoyo de rebeldes prorusos en dos provincias rebeldes –que derivó en la secesión de las llamadas repúblicas de Osetia del Sur y Abjasia, aún reconocidas por la mayoría de los países como parte de Georgia- y en 2014 invadió y anexó la península de Crimea, hasta entonces parte de Ucrania. En relación con la situación de 2014 en Ucrania, el entonces secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, anunció que la alianza había decidido "poner en revisión toda la gama de cooperación OTAN-Rusia" para enviar "un claro mensaje de que las acciones de Rusia tienen consecuencias". Pero el ingreso de Ucrania, que se encuentra en guerra con separatistas prorrusos en las provincias orientales de Lugansk y Donetsk desde entonces, se congeló, y ahora el país se enfrenta a una nueva crisis a medida que fuerzas militares rusas se concentran en la frontera. Con información de Tara John, Matthew Chance, Laura Smith-Spark, Luke McGee, Anna Chernova y Sam Fossum.
AFP/AFP vía Getty Images