(CNN) – Una estudiante universitaria con burka se ha convertido en un símbolo de la resistencia en el estado indio de Karnataka, donde las tensiones religiosas aumentan por el derecho a llevar ropa religiosa en la escuela.
Muskan Khan intentaba entregar un trabajo universitario en la ciudad de Mandya cuando fue abordada por un grupo de hombres hindúes que llevaban pañuelos de color azafrán, el color del partido gobernante Bharatiya Janata (BJP), según un video publicado en las redes sociales.
Los hombres la acosan con preguntas mientras atraviesa el recinto escolar y le exigen que se quite el velo, pero en lugar de obedecer, Khan grita “Allahu Akbar” («Dios es [el] más grande») mientras levanta el puño.
El enfrentamiento ilustra la división religiosa que se ha ido ampliando en Karnataka desde que un grupo de niñas comenzó a protestar frente a su escuela pública en enero, después de que se les negara la entrada en el aula por llevar un hijab.
Las niñas solicitaron al tribunal superior del estado que se levantara la prohibición, lo que provocó protestas rivales de estudiantes hindúes de derecha.
El miércoles, el tribunal remitió la petición a un grupo más amplio de jueces, pero no se ha fijado una fecha para las audiencias.
Los activistas afirman que la disputa sobre el hiyab es un ejemplo más de una tendencia más amplia en la India, en la que se han tomado medidas enérgicas contra la población musulmana minoritaria de la India desde que el BJP del primer ministro Narendra Modi llegó al poder hace casi ocho años.
Dicen que al negar a las mujeres musulmanas la opción de llevar el hiyab, el gobierno les está negando sus libertades religiosas, consagradas en la Constitución de la India.
“Se trata de un intento masivo del BJP de homogeneizar la cultura india, de convertirla en un Estado solo para hindúes”, declaró la activista musulmana de 23 años Afreen Fatima, que ha protestado en apoyo de las estudiantes en su ciudad natal, Allahabad, en el estado de Uttar Pradesh, al norte de India.
“Las mujeres musulmanas están aisladas en India. Y la situación empeora cada día”.
La “pelea por el hiyab”
Lo que empezó como una pequeña protesta se convirtió en noticia nacional después de que otras instituciones educativas gestionadas por el gobierno en Karnataka negaran la entrada a las estudiantes que usan hiyab.
Desde entonces, las protestas se han extendido a otras ciudades. Este mes, decenas de estudiantes salieron a la calle en Delhi, la capital de la India, con pancartas y gritando eslóganes para expresar su enojo ante la prohibición. Y cientos más han protestado en Calcuta y Hyderabad, según informa Reuters.
El martes, Karnataka, gobernada por el BJP, ordenó el cierre durante tres días de todos los institutos y colegios en medio de las crecientes tensiones. Y el miércoles, las autoridades de la capital del estado, Bengaluru, prohibieron las protestas ante las escuelas durante dos semanas.
Para muchas mujeres musulmanas, el hiyab es una parte integral de su fe. Mientras que en algunos países occidentales se considera una fuente de controversia, en la India no está prohibido ni se restringe su uso en lugares públicos.
El ministro de Educación de Karnataka, B.C. Nagesh, se mostró partidario de prohibir el hiyab en los centros educativos, citando el mandato del Estado sobre la vestimenta religiosa.
“El Gobierno es muy firme en que la escuela no es una plataforma para practicar el dharma (religión)”, dijo a News-18, afiliada de CNN.
Pero los expertos dicen que el problema va más allá de un código de vestimenta.
Karnataka, donde solo el 13% de la población es musulmana, está gobernada por el BJP.
Según el abogado Mohammed Tahir, que representa a un grupo de demandantes ante el tribunal, Karnataka es un “semillero” de la ideología Hindutva, apoyada por muchos grupos de derecha, que pretende hacer de la India la tierra de los hindúes.
Karnataka ha prohibido la venta y el sacrificio de vacas, un animal considerado sagrado para los hindúes. También ha introducido un polémico proyecto de ley anticonversión, que dificulta el matrimonio de parejas de diversas religiones o la conversión al islam o al cristianismo.
Y, según el abogado Tahir, es probable que la tensión religiosa en el estado aumente antes de las elecciones estatales del próximo año.
“Estas cuestiones (como la prohibición del hiyab) son muy fáciles de polarizar a toda la comunidad en busca de votos”, dijo.
En una declaración el martes, los Musulmanes Indios por la Democracia Secular dijeron que “condenan enérgicamente el intento de las fuerzas de la Hindutva y el gobierno del BJP de Karnataka de involucrar a los campus universitarios y escolares en el incendio comunitario en el estado”.
“Los campus universitarios se han transformado así en otro terreno de juego para el BJP y otros mayoritarios hindúes de derecha”, dice el comunicado.
CNN ha intentado ponerse en contacto con las autoridades del estado, pero no ha recibido respuesta.
Las mujeres musulmanas siguen siendo objeto de ataques
Las protestas sobre el hiyab se producen tras una serie de ataques en línea contra las mujeres musulmanas en la India.
A principios de enero, el gobierno de la India investigó un sitio web que pretendía ofrecer mujeres musulmanas en venta. Era la segunda vez en menos de un año que una falsa subasta en línea de ese tipo desataba la indignación en el país.
“Vinieron a por nosotras a través de Internet”, dijo Fátima, que aparecía en la aplicación. “Ahora apuntan directamente a nuestra práctica religiosa. Empezó en un colegio, y fue creciendo. No tengo motivos para creer que vaya a terminar ahí”.
El martes, la ganadora del Premio Nobel de la Paz, Malala Yousafzai, calificó la disputa por el hiyab de “horrorosa”.
“La objetivación de las mujeres persiste, por usar menos o más. Los líderes de la India deben detener la marginación de las mujeres musulmanas”, escribió en Twitter.
El presidente de la Federación de Estudiantes de la India, V. P. Sanu, criticó la prohibición del hiyab, diciendo que se utilizaba “como una razón para negar el derecho de las mujeres musulmanas a la educación”.
Modi se refirió brevemente a las mujeres musulmanas en un discurso pronunciado este jueves en Uttar Pradesh, cuando comenzaron las votaciones locales en el estado.
El primer ministro dijo que su gobierno “está con todas las mujeres musulmanas víctimas”.
No se refirió a la prohibición del hiyab, pero dijo que el gobierno dio “libertad” a las mujeres musulmanas al suprimir la controvertida práctica musulmana del triple talaq, que permite a un hombre musulmán divorciarse de su esposa con solo pronunciar tres veces la palabra árabe para divorcio, “talaq”. El gobierno de la India penalizó la práctica en 2019.
Khan, la estudiante que gritó a los hombres hindúes, dijo que estaba defendiendo sus derechos religiosos.
“Cada religión tiene libertad, India es una unidad… cada religión tiene libertad”, dijo Khan a los periodistas el miércoles.
“Ellos están siguiendo su cultura y yo estoy siguiendo mi cultura. Deberían dejarnos seguir nuestra cultura y no poner ningún obstáculo”.
– Esha Mitra de CNN contribuyó con este reportaje.