(CNN) – Mientras la segunda tormenta de la semana se extiende por Estados Unidos, el choque de temperaturas provocará un peligroso clima invernal en todo el país, y el hielo dará de qué preocuparse.
Podría parecer un déjà vu con respecto a la tormenta que dejó caer una mezcla invernal y fuertes lluvias en Estados Unidos a principios de esta semana. Y en muchos sentidos, lo es.
Sin embargo, la nueva tormenta traerá consigo cantidades más importantes de hielo. Las acumulaciones de hielo asociadas a la tormenta suponen una gran amenaza para los trayectos y las infraestructuras en zonas que van desde el centro de Estados Unidos hasta el noreste.
“Es probable que se produzcan acumulaciones de hielo significativas superiores a 0,6 cm desde el valle del río Rojo de Texas hasta los Ozarks y el sureste de Missouri. A nivel local, es posible que haya una capa de hielo dañino de 1,2 cm o más, lo que podría provocar cortes de electricidad dispersos, daños en los árboles y viajes peligrosos”, tuiteó el Centro de Predicción Meteorológica (WPC, por sus siglas en inglés).
El centro-sur de Estados Unidos es el blanco para la acumulación de hielo, al esperar hasta 2 centímetros de hielo a través de áreas del noreste de Arkansas este jueves, creando condiciones peligrosas.
“Viajar podría ser casi imposible”, advirtió la oficina del Servicio Meteorológico Nacional (NWS, por sus siglas en inglés) en Little Rock.
Puede que hoy no lo parezca, pero el noreste tampoco está fuera de peligro, ya que una mezcla de condiciones invernales similar se dirige hacia ellos este viernes.
A medida que el sistema se desplaza a través de la región de los Grandes Lagos durante la noche del jueves y hacia el sur de Nueva Inglaterra a primera hora del viernes, se esperan fuertes nevadas y mucho hielo.
El centro-sur de Pennsylvania y el oeste de Maryland podrían registrar acumulaciones de hielo de hasta un 0,6 centímetros. Aunque estén más acostumbrados al clima invernal, “se esperan viajes peligrosos generalizados y daños en la infraestructura eléctrica”, advirtió el WPC.
Se esperan 15 centímetros de nieve o más en gran parte del noreste y el sur de Nueva Inglaterra, con zonas de Massachusetts que probablemente tendrán casi un 30 centímetros de nieve. Se prevé que Boston reciba unos 22 centímetros de nieve para el final de la semana.
La ciudad de Nueva York podría recibir alrededor de 6 centímetros de nieve el jueves por la noche, pasando a una mezcla de condiciones invernales y finalmente a lluvia el viernes.
El sistema de bajas presiones que está produciendo una mezcla de hielo desde Texas hasta Nueva York también hará caer metros de nieve en las Montañas Rocosas el miércoles, causando preocupación por las avalanchas. Algunas áreas en las elevaciones más altas podrían recibir hasta 1,2 metros de nieve a causa de la tormenta. Las grandes cantidades de nieve en las elevaciones más altas de Colorado llevaron al Centro de Información de Avalanchas de Colorado a emitir advertencias de avalanchas desde este miércoles hasta el jueves por la mañana.
“Existen condiciones muy peligrosas de avalancha en el campo. La nieve pesada y los fuertes vientos darán lugar a avalanchas naturales”, dijo el Centro.
Los fuertes vientos también harán que se sienta aún más frío.
Las temperaturas en gran parte de las Montañas Rocosas, las Llanuras y el Valle del Mississippi están descendiendo drásticamente, entre 11 y 22 grados por debajo de la media, según el WPC. Las bajas temperaturas pretenden igualar o superar los anteriores récords de temperaturas frías diarias.
Más de 10 millones de personas están actualmente bajo avisos y advertencias de sensación térmica a lo largo de 14 estados. Las zonas de las llanuras están experimentando condiciones que ponen en peligro la vida, con una sensación térmica que oscila entre los -34°C y los -45,5 °C.
“La sensación térmica peligrosa podría causar congelación en la piel expuesta en tan solo 10 minutos”, dijo el NWS en Bismark, ND.
Sin embargo, las temperaturas de la costa este cuentan una historia diferente.
“Por el contrario, las temperaturas estarán entre 5,5°C y 11°C por encima de la media en la mayor parte de la Costa Este, con varias localidades que batirán o empatarán récords de temperaturas altas desde el miércoles hasta el jueves por la mañana”, dijo el WPC.
Una diferencia extrema de temperaturas crea el ambiente perfecto para las tormentas de hielo.
“Cuando el aire cálido y húmedo y el aire frío tratan de ocupar el mismo terreno, se producen tormentas de hielo. El aire gélido del Ártico es mucho más pesado que el aire cálido y flotante que llega desde el sur. Ese aire cálido se desplaza sobre el aire frío como si fueran paquetes que suben por una cinta transportadora. Las nubes hacen que llueva, pero se congela cuando cae o toca el suelo bajo cero”, explicó Chad Myers, meteorólogo de CNN.
En el lado sur de la tormenta, las temperaturas más cálidas en la superficie provocarán la aparición de fuertes lluvias en la parte baja de los valles del Mississippi y Tennessee, con el consiguiente riesgo de inundaciones localizadas.
El jueves por la mañana se esperan fuertes precipitaciones de entre 5 y 7 centímetros, que se desplazarán hacia el este del valle del Ohio a lo largo del día. Las ciudades, las carreteras y los arroyos corren el mayor riesgo de sufrir inundaciones repentinas, según el WPC.
Se espera que el sistema se aleje de la costa a primera hora del sábado, poniendo fin a una semana repleta de notas del tiempo para EE.UU., pero dejando un frío intenso en el aire en todo el país.