Nueva York (CNN Business) – Los conductores estadounidenses nunca han pagado tanto por gasolina. El precio por galón de gasolina regular alcanzó los US$ 4,14, según Oil Price Information Service, una agencia que recolecta y calcula los precios para la AAA.
El precio medio alcanzó los US$ 4 por galón durante el fin de semana por primera vez en 14 años y el nuevo precio rompió el récord anterior de US$ 4,11 por galón que se había mantenido desde julio de 2008. Según Tom Kloza, jefe global de análisis de energéticos de Oil Price Information Service, “la mayoría de las gasolineras están en piloto automático, están comprando todo el producto que pueden en cuanto pueden y esto puede inspirar otra ronda de aumentos locos”.
A medida que Rusia continúa con la invasión a Ucrania, los precios de la gasolina están aumentando al ritmo más rápido desde que el huracán Katrina azotó la costa del Golfo de EE.UU. y gran parte de la industria nacional del petróleo y el refinado en 2005.
Rusia es uno de los principales exportadores de petróleo del mundo, y la mayor parte de su producción se destina a Europa y Asia. Según los datos del Departamento de Energía, el petróleo ruso solo representó el 2% de las importaciones estadounidenses en diciembre. Pero el petróleo se cotiza en los mercados mundiales de materias primas, por lo que el impacto se siente en todas partes.
Las sanciones impuestas a la economía rusa tras la invasión han eximido hasta ahora las exportaciones de petróleo. Pero los comerciantes se han mostrado reacios a comprar petróleo ruso debido a la incertidumbre sobre el cierre de las transacciones, dadas las limitaciones del sector bancario del país, así como a la preocupación por encontrar barcos petroleros dispuestos a atracar en los puertos rusos. “Los precios del gas se dispararán cada día a menos que se produzca un avance que ponga fin a los boicots de facto al petróleo ruso”, afirmó Kloza.
El gobierno de Biden ha dicho que está estudiando la posibilidad de prohibir las importaciones de petróleo ruso. Sin embargo, esta medida tendría un impacto limitado en los precios mundiales o nacionales, ya que se envía muy poco a EE.UU., según Kloza.
Ahora hay 21 estados, además de la ciudad de Washington, donde el precio supera los US$ 4: todo el noreste y el Atlántico medio, así como la Costa Oeste, Nevada, Arizona, Illinois, Alaska, Hawaii, Michigan y Florida. Los precios más altos están en California, donde la media estatal se sitúa en US$ 5,34 el galón.