(CNN Español) – Francia Márquez se convirtió este domingo 19 de junio en la vicepresidenta electa de Colombia cuando triunfó en las urnas junto a Gustavo Petro en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales del país. El ascenso de Francia Márquez en la política comenzó con los resultados electorales en la consulta de la coalición de izquierda en Colombia que fueron históricos.
Francia Márquez (quien creció en Yolombó, Cauca, en 1981) es, según su propia descripción, la primera mujer “negra, afrodescendiente, oriunda de las regiones más empobrecidas” de Colombia que sacó una votación histórica el pasado 13 de marzo: obtuvo más de 783.000 votos en la consulta del Pacto Histórico (14%). Participó en representación del partido Polo Democrático Alternativo.
Quedó segunda después de Gustavo Petro, quien después la llamó para que fuera su fórmula vicepresidencial.
El fenómeno electoral de Francia Márquez
A pesar de que la victoria de Petro fue contundente, los votos de Francia Márquez superaron las expectativas de expertos, y tuvo más apoyo de alguien con mayor visibilidad como Camilo Romero, quien fue senador y gobernador del departamento de Nariño.
La votación de Francia Márquez fue superior a la de, por ejemplo, el ganador de la consulta de centro, Sergio Fajardo, quien obtuvo poco más de 723.000 votos.
Francia Márquez recorrió gran parte del país con una campaña para —según ella— dignificar la política y hacer visibles a “los nadie”, a las mujeres violentadas y a las víctimas de las violencias de este país.
“Vengo del territorio de los nadies y de las nadies, vengo de los territorios olvidados en términos de inversión social, pero violentados por una política de muerte”, dijo Márquez a periodistas en marzo. “Entonces no tendría sentido estar en el Pacto Histórico si no va a transformar esas realidades que sigue viviendo la gente”.
Francia Márquez, una activista orgullosa de su negritud
Francia Márquez nació en una montaña en medio de dos ríos en el municipio de Suárez, Cauca, en el suroeste de Colombia. Allí, según contó, aprendió de minería, agricultura y pesca. Desde muy joven empezó a liderar espacios en su comunidad, y a empoderar a los suyos, incluso desde el reconocimiento de su negritud, en un país altamente racista.
“Me convertí en una activista del proceso de comunidades negras donde aprendí a reconocerme como una mujer negra, a reconocer mi cabello, mi negrura, con orgullo, porque este país nos ha hecho sentir vergüenza, nos ha hecho sentir que somos responsables de las desgracias que nos ha tocado vivir”, dijo Márquez, quien ha sido abanderada de las luchas de las comunidades negras desde temprana edad.
Márquez es mamá de dos hijos, a quienes, por miedo, tuvo que sacar del país mientras adelantaba la campaña actual, afirmó en marzo. Es abogada graduada de la Universidad Santiago de Cali y fue galardonada en 2018 con el Premio Goldman, algo así como un ‘Premio Nobel del Medio Ambiente’ por su lucha en la comunidad de La Toma “parar la minería ilegal de oro en su tierra ancestral” que estaba contaminando con mercurio el río en el que pescaba toda su comunidad.
Y aunque dice que no hace promesas, recalca que es “una prioridad” resolver el problema del hambre en todo el país. Pero para eso, explica, es necesario que su proyecto llegue a la presidencia en estos próximos tres meses. Márquez ha dicho que no le importa el cargo en el que esté, sino que pueda trabajar por las comunidades más vulnerables.
Según dijo el analista político Jorge Andrés Hernández a CNN, antes de la elecciones del 13 de marzo, Márquez era vista como una mujer con poca experiencia política en puestos de elección popular, a lo que ella responde que su lucha no empezó ni con el Pacto Histórico ni con la política representativa.
“Yo llevo desde mi niñez luchando por dignificar la vida”, dijo Márquez en marzo a un grupo de periodistas.
Su lucha contra el racismo y a favor de feminismo
Márquez dice que su triunfo de las consultas internas se las debe en gran parte a las mujeres y a los jóvenes, y asegura que su victoria “ya es una evidencia que estamos rompiendo con el patriarcado y el machismo en la política”.
Con su lema de campaña “Soy porque somos” pretende buscar la justicia racial, defender los derechos humanos y el cuidado de la vida y el territorio, así como los derechos de las mujeres. De hecho dice que gracias a muchas de las mujeres del país logró el hito de tener la segunda votación en el Pacto Histórico.
“La desventaja que tuvimos en este proceso es que la mayoría de los colombianos y las colombianas no nos conocen”, asegura.
Sin embargo, la lucha feminista marca trascendentalmente su proyecto político. Ella dice que no está interesada en llegar al poder solo por un cargo, ni en hacer pactos con mujeres que estén a punto de romper el “techo de cristal”.
En Colombia, ninguna mujer ha ocupado la Presidencia, pero Marta Lucía Ramírez fue elegida fórmula a la vicepresidencia de Iván Duque, y ganaron la elección presidencial en 2018. Ramírez es la primera mujer en ocupar el cargo de vicepresidente.
“Yo estoy aquí para cogerme de las manos con las mujeres que no han tenido voz, con las que nunca han tenido posibilidades ni privilegios, a las que les han silenciado la voz y a las que no les han permitido por su condiciones de mujeres empobrecidas y racializadas vivir tranquilas, en paz y con dignidad”.
Nota del editor: esta pieza fue publicada originalmente el 15 de marzo y fue actualizada el 19 de junio.