(CNN) – Los casos en el noreste de Estados Unidos están en aumento impulsados por la subvariante BA.2. A medida que el país navega por el tercer año de la pandemia de covid-19, Filadelfia volvió a introducir la obligación de usar mascarillas en espacios cerrados y algunas universidades están exigiendo el uso de mascarillas durante los últimos días del semestre de primavera.
La población estadounidense no se enfrentará a un confinamiento como el que se está produciendo en Shanghái, donde no se permite salir de las residencias, las pruebas de covid son obligatorias y los suministros de alimentos se están agotando. Es poco probable que la mayoría de los estadounidenses se enfrenten a restricciones, ni siquiera moderadas, contra la pandemia por parte de los gobiernos locales. Así que esto deja en manos de cada uno la posibilidad de protegerse.
Después de tres años, la mayoría de la gente sabe cómo hacerlo: vacunas, mascarillas, distanciamiento, lavado de manos y, no lo olvidemos, ventilación.
Pero a medida que nos incorporamos a las oficinas, las escuelas y los espacios públicos, hay algunas cosas que podemos controlar, como el uso de mascarillas, y otras que no están bajo nuestro control, como el que nuestras oficinas tengan una ventilación mejorada.
¿Cómo debe determinar la gente qué precauciones seguir? ¿Deberían volver a imponerse el uso de mascarillas en interiores? ¿Existen entornos en los que la gente debería considerar el uso de mascarillas en el exterior? ¿Qué pasa si tienes que volver a la oficina y los demás no usan mascarilla? ¿Y deberíamos volver a omitir los grandes eventos en espacios cerrados?
Para ayudarnos con estas preguntas, hablé con la doctora Leana Wen, analista médica de CNN, médica de urgencias y profesora de política y gestión sanitaria en la Escuela de Salud Pública del Instituto Milken de la Universidad George Washington. También es autora de “Lifelines: A Doctor’s Journey in the Fight for Public Health”.
La siguiente conversación fue editada ligeramente por razones de longitud y claridad.
CNN: Puedes hacernos un repaso rápido: ¿qué medidas de protección son eficaces contra esta subvariante BA.2 tan contagiosa?
Dra. Leana Wen: BA.2 es una subvariante de la variante ómicron del coronavirus. Parece ser aún más contagiosa que ómicron. Al igual que las variantes anteriores, se propaga por contacto directo y se transmite por el aire. Alguien que tose y estornuda exhala gotas que pueden transmitir el virus. El virus también puede transportarse en aerosoles microscópicos que se expulsan al respirar. Además, las superficies pueden desempeñar un papel más importante en la transmisión de ómicron. Alguien que haya tosido sobre su mano y luego haya tocado una puerta podría dejar el virus allí y transmitirlo a alguien que toca esa puerta y luego su nariz o boca.
Las medidas de protección de las que hablamos al principio de la pandemia siguen funcionando contra ómicron. Las mascarillas funcionan muy bien, aunque aquí instaría a que la gente usara una mascarilla N95 o equivalente, como una KN95 o KF94. Una mascarilla de tela es mucho menos eficaz, especialmente contra una variante tan contagiosa como la BA.2.
La ventilación es muy importante. El riesgo de transmisión al aire libre es exponencialmente menor que el de la transmisión en interiores, y un espacio bien ventilado y menos concurrido también tiene un riesgo mucho menor que un lugar en el que las personas están aglomeradas en un espacio sin ventilación. Las superficies desempeñan un papel menos importante que la transmisión por aerosol, pero sigue siendo una buena práctica lavarse bien las manos o utilizar un desinfectante de manos si se da la mano a la gente y se tocan superficies de uso frecuente. Esto reducirá no solo la transmisión de este coronavirus, sino también la de otros patógenos respiratorios y gastrointestinales.
También tenemos más herramientas a nuestra disposición que en 2020. A saber, tenemos vacunas y refuerzos, que protegen muy bien contra la enfermedad grave y también reducen el riesgo de infección por covid-19. Realizarse una prueba antes de reunirse con otras personas ayudan a saber si son infecciosas y deben evitar la reunión. Esa es otra medida preventiva clave a la que ahora tenemos acceso.
CNN: ¿Qué debe tener en cuenta la gente a la hora de decidir qué precauciones quiere tomar, como cancelar las reservas en restaurantes o usar mascarillas en espacios cerrados?
Wen: Yo consideraría tres cosas. Primero, ¿cuál es el riesgo de covid-19 en tu comunidad? Ya he hablado antes de cómo se pueden utilizar las nuevas directrices de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU. (CDC, por sus siglas en inglés) Si tu comunidad se encuentra en una zona naranja, o de “alto riesgo”, según las métricas de los CDC, debes usar mascarilla en el interior. Si está en verde o amarillo, o riesgo “bajo” o “medio”, puedes optar por no hacerlo, dependiendo de los otros dos factores.
La segunda cosa que hay que pensar es, ¿cuál es tu situación médica y las circunstancias de los demás en tu hogar? Si en general estás sano y estás totalmente vacunado y reforzado, tu probabilidad de sufrir una enfermedad grave a causa de covid-19 es muy baja. Esto es diferente si estás inmunodeprimido o vives con alguien de edad avanzada con múltiples enfermedades. Es aconsejable tener un umbral de precaución más alto en función de la situación médica de tu familia.
En tercer lugar, ¿qué importancia tiene para ti seguir evitando el covid-19? Por supuesto, ninguno de nosotros quiere infectarse por el coronavirus, y nadie debería intentar contagiarse. Pero hay algunas personas que quieren evitarlo a toda costa y otras que aceptan que si salen de viaje, reanudan fiestas, cenan en restaurantes y realizan otras actividades previas a la pandemia, tendrán cierto nivel de riesgo. Es una decisión personal que variará de una persona a otra.
CNN: ¿Tiene sentido usar mascarilla en algunas situaciones pero no en otras?
Wen: Por supuesto. El riesgo es acumulativo. Puedes volver a hacer algunas cosas que son de menor riesgo o de mayor valor, pero seguir tomando algunas precauciones. Por ejemplo, si trabajas en una oficina que tiene una buena ventilación y está bien espaciada, y exige una prueba de vacunación, puedes considerar no usar mascarilla en ese entorno. Pero también puedes decidir usar mascarillas en lugares cerrados y concurridos, como tiendas de comestibles y estaciones de tren. Una vez más, insisto en que si usas una mascarilla, sea una N95 o una equivalente, porque será tu mejor oportunidad de protegerte contra la muy contagiosa subvariante BA.2.
CNN: ¿Qué pasa con los espacios abiertos? ¿Es la subvariante BA.2 tan contagiosa que podría transmitirse allí?
Wen: El riesgo de transmisión al aire libre de la subvariante BA.2 es muy bajo, hasta el punto de que es prácticamente inexistente. Las reuniones sociales al aire libre son muy seguras, y ciertamente el riesgo es menor que el entorno equivalente en el interior. No creo que la gente deba usar mascarillas al aire libre, pero puede haber situaciones en las que alguien sea extremadamente vulnerable, por ejemplo, un paciente con cáncer que esté recibiendo quimioterapia, y quiera ser más cuidadoso. En ese caso, debería sentirse libre de usar una mascarilla cuando esté al aire libre y en entornos más concurridos.
CNN: ¿Y si tienes que volver a la oficina y los demás no usan mascarilla?
Wen: Tienes que decidir qué es lo mejor para ti, teniendo en cuenta que el uso de una mascarilla con un N95 o equivalente funciona muy bien, es decir, incluso si los demás a tu alrededor no la usan, sigues estando bien protegido si llevas una mascarilla bien ajustada y de alta calidad en todo momento.
También depende de las características específicas de tu lugar de trabajo.
Supongamos que trabajas en una oficina bien ventilada, que todos los que te rodean están vacunados y que estás bien distanciado de los demás. Podrías decidir quitarte la mascarilla cuando estés sentado en tu escritorio, pero ponértela de nuevo para entrar en un ascensor abarrotado o en una sala de conferencias donde estés sentado hombro con hombro con otras personas. Podrías decidir ir a una comida al aire libre con tus colegas, pero saltarte la hora feliz en un bar abarrotado. Todas estas son decisiones razonables, dependiendo de cómo pienses en tu propio riesgo.
CNN: ¿Debe la gente evitar las reuniones en interiores, sabiendo que pueden producirse brotes?
Wen: No necesariamente. Una vez más, depende de lo que ocurra en tu comunidad, de tu situación médica y de lo mucho que quieras evitar el covid-19. En mi caso, mi zona, en la ciudad de Baltimore, se encuentra en una zona verde o de “bajo riesgo” de transmisión de covid-19, según los CDC. Mi marido y yo estamos vacunados y reforzados. Tenemos dos niños pequeños que son demasiado jóvenes para ser vacunados, pero también reconocemos que va a ser muy difícil evitar que se contagien del coronavirus dado lo transmisible que es esta nueva variante.
Por ello, estoy asistiendo a grandes eventos, incluyendo conferencias y reuniones en interiores. Preferiría que en estos eventos se exigiera una prueba de vacunación y un resultado negativo en el mismo día. Si no lo hacen, son menos seguros, y ciertamente entiendo que otros quieran evitarlos por el momento, al igual que entiendo que otros quieran seguir asistiendo a ellos. Para mí, esto no es diferente de la decisión de volver a ir al gimnasio, reanudar los viajes o cenar en restaurantes cerrados. Algunos pensarán que esas actividades merecen el riesgo. Otros no.