Nota del editor: Mari Rodríguez Ichaso ha sido colaboradora de la revista Vanidades durante varias décadas. Es especialista en moda, viajes, gastronomía, arte, arquitectura y entretenimiento, productora de cine y columnista de estilo de CNN en Español. Las opiniones expresadas en esta columna son exclusivamente suyas. Lee más artículos de opinión en cnne.com/opinion.
(CNN Español) – En medio de crisis mundiales, y saliendo poco a poco de más de dos años de la pandemia del covid-19, nos damos cuenta de que la vida sigue. Nuestro día a día continúa y nada lo detiene. Y la recuperación de nuestra cotidianidad incluye preparar nuestro vestuario, pensar en nuestro look, y estar listas para hacer más “vida presencial” y menos “vida virtual”.
Y esto me lleva a compartir con ustedes una tendencia (que personalmente me encanta) que consiste en sentir más atracción y placer por una moda más clásica, más segura, menos vanguardista y, sin duda, más bella y muy favorecedora. Una moda que nos transporta a momentos de serenidad y elegancia. De permanencia.
Y aunque en algunas pasarelas internacionales veamos modelos estrambóticos, medios locos y hasta francamente feos –que nos confunden–, a la hora de juzgar los desfiles y hablar sobre moda todos prefieren la de diseñadores que se distinguen por un estilo “seguro”, bello y muy “ponible”. ¡Así de realista!
¿Un ejemplo de ello? La moda de Ralph Lauren, uno de los más importantes iconos internacionales de la moda. Y tanto en Miami como en la Ciudad de Mexico, Nueva York, Londres o París ¡es todo un fenómeno de mercadeo en el mundo! Y sus tiendas –igual que cafés y restaurantes–¡son un éxito total!
El secreto de su moda no es complicado y consiste en ofrecer diseños clásicos para mujeres y hombres, los que lucen regios, tienen excelente calidad y buen gusto. Blazers, jerseys, pantalones y ropa de noche discretamente exquisita y bien cortada y manufacturada. Y su marca Polo, con el famoso “caballito” bordado, es un fenómeno internacional para toda la familia.
Otro creador europeo y chic –e igual de clásico– es Giorgio Armani, el rey de las sutilezas en la moda, cuyos conjuntos de blazers y pantalones son carísimos, pero piezas fetiches que hacen soñar a miles de mujeres en todo el mundo. Un blazer de Armani es…¡lo máximo!
Y para quien no puede gastar los precios de sus diseños hay infinidad de marcas más económicas –como Gap, Primark, Old Navy, H&M, la venta en línea de Shein, la superexitosa Zara, y muchas otras, que imitan muy bien su estilo! ¡Y son maravillosas!
¿Conclusión? Que la vida continúa y nuestro nuevo vestuario tiene a su disposición el confort de ropa que nos “arropa” con la armonía de diseños, telas y colores con los que nos sentimos elegantes y muy seguras de nuestra imagen. ¡Y eso es precisamente lo más importante!