(CNN) — Un arrendatario de South Lake Tahoe, California, tuvo invitados desconocidos viviendo debajo de su casa.Durante meses, el inquilino, que prefiere mantener el anonimato, había escuchado ruidos ocasionales como de un ronroneo bajo las tablas del piso.
Preguntó a los vecinos si oían lo mismo, pero solo reportaron silencio.
Finalmente, la semana pasada, más sonidos los llevaron a creer que esos ruidos podrían haber sido un oso. Fue entonces cuando llamaron para revisar la casa a BEAR League, un grupo sin fines de lucro dedicado a mantener a los osos en áreas seguras.
Debajo descubrieron cinco osos negros: una mamá y cuatro cachorros.
La directora ejecutiva de BEAR League, Ann Bryant, le dijo a CNN el jueves pasado que los animales probablemente estuvieron hibernando debajo de la casa desde principios de diciembre.
Los ruidos que escuchó el inquilino probablemente eran los ronquidos, o cuando los osos lactaban o rodaban, dijo Bryant. “Los osos no hibernan profundamente, entran más bien en un estado de letargo ligero”, agregó.
Cuando llamaron a BEAR League a la casa el lunes, la mamá osa estaba en una abertura debajo de la casa. Ya iba saliendo, pero se detuvo y se sentó en el lado opuesto del patio.
Esto llevó a los funcionarios a creer que podría haber tenido cachorros debajo de la casa y que estaba esperando que salieran de manera segura.
Después de iluminar el área con una linterna, los oficiales vieron un par de ojos brillaban bajo la esquina más alejada de la casa.
Calcularon que los cachorros tendrían un año y evaluaron tácticas para sacarlos.
Finalmente, los cachorros salieron sin ayuda y se encontraron con su madre.
“De repente, salió un cachorro, dos cachorros, tres, cuatro cachorros”, dijo Bryant, “Cuando el residente llamó, no imaginaba que había tantos osos debajo de la casa”.
Por fortuna, los osos no dañaron la casa. En otros casos, los propietarios de viviendas pueden no tener tanta suerte.
En octubre, una mujer de California fue mutilada por otro oso negro que irrumpió en su cabaña en el norte del lago Tahoe. Y un oso de 226 kilos llamado Hank the Tank que ha estado deambulando por las calles en el área de Tahoe Keys en South Lake Tahoe durante meses, tiene a los residentes preocupados.
Bryant dice que no es raro que estas peludas criaturas hagan de estos espacios bajo las casas su hogar durante los meses de invierno. En este caso, la mamá oso construyó un nido y los cinco durmieron la mayor parte del tiempo.
Desde que despertaron, el grupo ha sido visto en el área de South Lake Tahoe.
El miércoles por la noche regresaron a la misma casa en busca de su refugio anterior, que desde entonces quedó con un protector eléctrico que, al tocarlo, da una pequeña descarga para alejar a los osos.
Bryant aseguró que esta descarga no daña ni lastima a los osos de ninguna manera, solo los asusta.