(CNN) – Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC, por sus siglas en inglés) dijeron el viernes que están investigando 109 casos de hepatitis grave e inexplicable en niños en 25 estados y territorios que pueden estar relacionados con un brote mundial.
Entre ellos, el 14% necesitaban trasplantes y cinco niños han muerto.
Casi todos los niños —más del 90%— necesitaron ser hospitalizados.
El Dr. Jay Butler, subdirector de enfermedades infecciosas de los CDC, enfatizó que la investigación —una alianza entre los CDC y los departamentos de salud estatales— es una situación en evolución. No todos los casos de hepatitis que están estudiando ahora pueden ser causados en última instancia por lo mismo.
“Es importante tener en cuenta que esta es una situación en evolución, y estamos lanzando una amplia red para ayudar a ampliar nuestra comprensión”, dijo Butler.
La hepatitis, o hinchazón del hígado, puede ser causada por infecciones, enfermedades autoinmunes, drogas y toxinas. Una familia de virus conocida por atacar el hígado causa la hepatitis A, la hepatitis B y la hepatitis C.
No está claro qué está impulsando estos casos en niños pequeños. Butler dijo que se han considerado algunas de las causas comunes de la hepatitis viral, pero no se encontraron en ninguno de los casos.
Se ha detectado adenovirus en más del 50% de los casos, aunque su papel no está claro.
Reportes hepatitis temprana
El 21 de abril, los CDC alertaron a los médicos sobre un grupo de casos inusuales de hepatitis en nueve niños de Alabama.
Desde octubre, los CDC pidieron a los médicos y funcionarios de salud pública que notificaran a la agencia si tenían casos similares de niños menores de 10 años con enzimas hepáticas elevadas y sin una explicación aparente de su hepatitis.
Desde entonces, los departamentos de salud han estado trabajando con especialistas pediátricos en sus estados para identificar posibles casos. Los números compartidos en la rueda de prensa del viernes son la primera mirada nacional a los casos.
Los casos están bajo investigación en Alabama, Arizona, California, Colorado, Delaware, Florida, Georgia, Idaho, Illinois, Indiana, Louisiana, Michigan, Minnesota, Missouri, Carolina del Norte, Dakota del Norte, Nebraska, Nueva York, Ohio, Pensilvania, Puerto Rico, Tennessee, Texas, Washington y Wisconsin.
La alerta de los CDC ocurrió después de reportes de niños de Inglaterra, Gales, Escocia e Irlanda del Norte que fueron a hospitales con hepatitis inexplicable.
Hasta el 1 de mayo, hay 228 casos probables relacionados con el brote en 20 países, con más de 50 casos bajo investigación, dijo el miércoles en una sesión informativa la Dra. Philippa Easterbrook, científica sénior del Programa Global de Hepatitis de la Organización Mundial de la Salud. Entre estos casos, un niño murió y unos 18 necesitaron trasplantes de hígado, dijo.
La mayoría de los niños estaban sanos cuando desarrollaron síntomas que incluían fatiga, pérdida de apetito, vómitos, diarrea, dolor de estómago, orina oscura, heces de color claro y coloración amarillenta de la piel y los ojos, un signo llamado ictericia.
Inflamación del hígado inusualmente grave
La gastroenteróloga pediátrica Dra. Heli Bhatt del M Health Fairview Masonic Children’s Center en Minneapolis ha tratado a dos niños que forman parte de la investigación de los CDC. Uno, un niño de 2 años de Dakota del Sur, recibió un trasplante de hígado esta semana.
Bhatt dice que la insuficiencia hepática en los niños es “súper rara”. E incluso antes de que los científicos comenzaran a rastrear este brote, la mitad de los casos nunca se explicaron.
Los médicos que han tratado a estos niños dicen que sus casos se destacaron.
“Incluso durante el primer caso, pensé que era extraño”, dice el Dr. Markus Buchfellner, especialista en enfermedades infecciosas pediátricas de la Universidad de Alabama (UAB)en Birmingham, donde el personal comenzó a ver casos en octubre.
“Y luego, cuando llegó el segundo, fue cuando dije: ‘Está bien, tenemos que hablar con alguien sobre esto’”. Se acercó a los médicos sénior de su departamento, quienes se comunicaron con el departamento de salud estatal y los CDC.
Buchfellner dice que los casos se destacaron porque la inflamación del hígado era muy grave.
A veces, los virus comunes como Epstein-Barr o incluso el SARS-CoV-2 elevan un poco las enzimas hepáticas de un niño, lo que indica lo que Buchfellner llama “pequeños fragmentos de hepatitis”, pero los niños generalmente se recuperan a medida que sus cuerpos combaten la infección.
“Pero es muy extraño ver a un niño sano entrar con la cantidad de daño hepático que tenían estos niños”, dijo.
Inicialmente, la UAB vio a nueve niños con hepatitis inexplicable, y los nueve dieron positivo por adenovirus en la sangre. Ninguno de ellos dio positivo por covid-19 durante su hospitalización ni tenía antecedentes documentados de covid-19, dijo Butler en la conferencia de prensa.
Desde que se informaron esos casos, se han identificado dos niños más en Alabama. Sus casos están bajo investigación, lo que eleva el total del estado a 11, dijo el Dr. Wes Stubblefield, oficial médico de los distritos norte y noreste de Alabama.
Hay alrededor de 100 tipos de adenovirus. Se sabe que alrededor de 50 de ellos infectan a los humanos, por lo que los expertos necesitaban observar más de cerca el virus para tratar de averiguar si todos los niños tenían el mismo.
Cuando los investigadores intentaron leer los genes del adenovirus en niños infectados, solo cinco tenían suficiente material genético para obtener una secuencia completa. En los cinco, el virus era de un tipo particular llamado adenovirus 41. Por lo general, causa diarrea y vómitos en los niños, a veces con congestión o tos, pero nunca antes se había asociado con insuficiencia hepática en niños por lo demás sanos.
Butler dijo el viernes que los adenovirus 40 y 41 se han relacionado con la hepatitis, pero casi exclusivamente en niños inmunocomprometidos.
Pistas del Reino Unido
También el viernes, los investigadores de la Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido publicaron un nuevo reporte técnico con una actualización de su investigación sobre la hepatitis. De 163 casos, 126 pacientes han sido examinados para adenovirus y 91, o el 72%, dieron positivo para ese patógeno.
Los investigadores intentaron secuenciar el genoma completo de un adenovirus de uno de los pacientes, pero no pudieron obtener una muestra con suficiente virus para hacerlo. Hubo 18 casos en los que pudieron secuenciar parcialmente el genoma, y todos ellos han sido adenovirus 41F, el mismo que se encontró en los casos de EE.UU.
Muchos se han preguntado si los casos pueden estar relacionados de alguna manera con el SARS-CoV-2, el virus que causa el covid-19.
Los investigadores del Reino Unido dicen que todavía están considerando esa posibilidad, pero solo 24 de los 132 pacientes examinados —el 18%— tenían SARS-CoV-2 detectado.
El reporte dice que no descartan algún papel de una infección por covid-19 en estos casos. Tal vez una infección previa de covid-19 de alguna manera preparó el sistema inmunológico para hacer que estos niños fueran inusualmente susceptibles, o tal vez una coinfección de los dos virus juntos abruma al hígado.
Los investigadores también quieren saber si la hepatitis es parte de algún tipo de síndrome que afecta a los niños después de una infección por SARS-CoV-2, como la rara complicación llamada síndrome inflamatorio multisistémico en niños, o MIS-C.
Otra teoría de trabajo de los investigadores del Reino Unido es que hay algún tipo de respuesta inmunitaria descomunal o irregular en estos niños, tal vez porque estuvieron protegidos más de lo habitual durante la pandemia.
Otra teoría más es que el adenovirus siempre puede haber causado insuficiencia hepática en un pequeño porcentaje de niños infectados, y estos casos raros salen a la luz solo porque está causando una ola de infecciones excepcionalmente grande.
Y los investigadores en el Reino Unido dicen que todavía están probando drogas, toxinas o tal vez una exposición ambiental, aunque es probable que algún tipo de infección sea la causa.
Clasificando el papel del adenovirus 41
Otra cosa que desconcierta a los médicos, dice Buchfellner, es que encontraron adenovirus en muestras de sangre pero no en muestras de tejido hepático tomadas durante las biopsias de los pacientes en Alabama.
“Los nueve tenían biopsias de hígado que mostraban mucha inflamación y hepatitis. Pero no encontramos el virus en el hígado. Solo encontramos el virus en la sangre”, dijo.
El caso de Bhatt, una niña de Dakota del Sur, también resultó positivo para adenovirus en su sangre pero no en su hígado.
Si el adenovirus 41 es de alguna manera responsable en estos casos —y eso sigue siendo solo una posibilidad— Buchfellner dice que no sabe por qué solo aparecería en la sangre pero no en el tejido hepático gravemente dañado. Pero tiene algunas teorías.
“Tal vez el hígado esté eliminando el virus antes de que se elimine en la sangre”, dijo. “Entonces, para cuando se haya hecho el daño al hígado y hagamos la biopsia, el sistema inmunitario ya habrá eliminado el virus del hígado. Y lo que queda es solo inflamación”.
Su segunda teoría es que no es el virus en sí mismo el responsable del daño hepático, sino que tal vez el sistema inmunitario reacciona de forma exagerada cuando intenta combatir el virus y termina dañando el hígado.
Las infecciones por adenovirus son comunes, por lo que tal vez encontrar el virus en algunos de estos pacientes sea solo una coincidencia. “No estamos 100% seguros de que se trate solo de ese adenovirus. Todavía queda mucho por saber”, dijo Bhatt.
Investigación activa
En una declaración del 29 de abril sobre los casos, los CDC escribieron: “Creemos que el adenovirus puede ser la causa de estos casos reportados, pero aún se están investigando otros posibles factores ambientales y situacionales”.
Butler dijo el viernes que los expertos están considerando una variedad de posibilidades, incluida la exposición a animales.
“Realmente estamos lanzando una red amplia y manteniendo la mente abierta en términos de si los datos de adenovirus pueden reflejar un transeúnte inocente o si puede haber cofactores que hacen que las infecciones de adenovirus se manifiesten de una manera que no se ha visto comúnmente antes”, dijo.
Los investigadores dicen que saben que esta noticia puede preocupar a los padres.
Butler dice que los investigadores todavía creen que estos casos son muy raros. No han visto un aumento, por ejemplo, en los niños que llegan a las salas de emergencia con hepatitis.
“Todavía les estamos diciendo al menos a nuestras familias aquí en Alabama —y animo a otras familias de la misma manera— a que no se preocupen demasiado por esto todavía”, dijo Buchfellner. “Quiero decir, al final del día, este sigue siendo un fenómeno bastante raro”.
Buchfellner dice que los adenovirus se transmiten comúnmente en guarderías y escuelas. Por lo general, no causan nada peor que algo que se siente como una gastroenteritis viral durante unos días.
“Ha existido durante mucho tiempo y seguirá existiendo. Y en total, solo tenemos alrededor de 200 casos que se han reportado en todo el mundo. Entonces, esta no es una situación similar a una pandemia de covid en la que todos deben estar realmente preocupado por esto”, dijo.