(CNN) – La desinformación sobre cómo las familias pueden superar la escasez de leche de fórmula infantil impulsa la preocupación de pediatras como la Dra. Tanya Altmann.
La doctora californiana ha recibido llamadas telefónicas, correos electrónicos y mensajes en las redes sociales, no solo de sus pacientes, sino de familias de todo Estados Unidos, junto con fotos de las estanterías vacías de las tiendas que antes contenían leche de fórmula infantil.
Los padres dicen que han ido a una docena de tiendas y han buscado en cientos de sitios web y no pueden encontrar la fórmula infantil de su bebé, y quieren saber qué hacer y si algunas de las supuestas alternativas que están escuchando son correctas.
“Es algo que asusta a estas madres y a sus bebés, y se está convirtiendo en un problema real”, afirma Altmann.
Los problemas en la cadena de suministro y la retirada de productos han provocado la escasez de fórmulas en todo el país. A principios de abril, siete estados informaron que entre el 40% y el 50% de los productos de fórmula infantil estaban agotados. Los fabricantes han dicho que están produciendo a plena capacidad para fabricar todo lo que pueden, pero esta semana el 43% de las fórmulas infantiles estaban agotadas, según un nuevo informe de Datasembly.
La Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA, por sus siglas en inglés) trabaja con Abbott Nutrition, la empresa implicada en la reciente retirada de productos, para reanudar la producción de forma segura y encontrar herramientas para apoyar el suministro de fórmulas infantiles, según un portavoz de la FDA. Pero es probable que sus instalaciones de Michigan estén todavía a unas dos semanas de volver a funcionar, a la espera de la aprobación de la FDA, y probablemente pasarán otras seis u ocho semanas hasta que los productos vuelvan a ser distribuidos a las tiendas, según un comunicado de la empresa.
Algunas personas recurren a comunidades online de cuidadores para obtener algunas ideas sobre qué hacer si no pueden conseguir la fuente de nutrientes para su bebé. Sin embargo, los pediatras están preocupados por el impacto en la salud de algunas de las ideas publicadas en línea, dijeron Altmann y el Dr. Steven Abrams, profesor de pediatría de la Universidad de Texas en Austin y expresidente del Comité de Nutrición de la Academia Estadounidense de Pediatría.
Los pediatras dijeron que hay maneras de superar la escasez para muchas personas, y es importante trabajar con su pediatra para abordar las necesidades particulares de su bebé. Aquí están las respuestas a algunas de las preguntas sobre lo que es seguro y lo que no lo es.
¿Puedo hacer fórmula para infantes casera?
No.
“Hay mucha discusión sobre la posibilidad de hacer la leche de fórmula en casa y cosas por el estilo, y realmente quiero desalentar eso tanto como sea posible”, dijo Abrams.
Las fórmulas son complejas, y los investigadores pasaron años desarrollando la proporción correcta para dar a los bebés los nutrientes que necesitan, dijo Altmann.
Las fórmulas infantiles deben ser densas en proteínas, grasas, vitaminas y minerales, muchos de los cuales no se pueden comprar en el supermercado. Y el equilibrio debe ser preciso para la salud y el desarrollo de los bebés, añadió.
“Es muy difícil repetirlo en la cocina”, afirma.
Las fórmulas caseras pueden hacer que el bebé no reciba la nutrición adecuada o que se altere la proporción de sus electrolitos, lo que puede ser peligroso, dijo Altmann. También ha habido casos de contaminación bacteriana, que puede hacer que los bebés enfermen.
¿Puedo hacer que dure más el suministro de leche de fórmula?
No.
Añadir otras fuentes de alimento o añadir más agua a la leche de fórmula es tentador cuando se acerca el final del último recipiente de fórmula, pero los pediatras dicen que no es una buena idea.
Las familias pueden empezar a introducir alimentos sólidos en la dieta de un bebé cuando éste tenga entre 4 y 6 meses de edad, dijo Altmann. Pero estos alimentos no son un sustituto nutricional de la leche de fórmula a esa edad.
“Incluso cuando se empiezan a dar sólidos, la leche materna o la fórmula infantil siguen siendo la principal fuente de nutrición para el bebé”, dijo Altmann.
Y añadir agua adicional para hacer durar más la fórmula que tiene puede diluir los nutrientes esenciales y provocar graves problemas de salud e interferir en el crecimiento y desarrollo adecuados, añadió.
“No somos irracionales. Si no hay nada que se pueda poner en la boca del bebé, excepto la leche de vaca, lo haremos”, dijo Abrams. “Pero no es lo que queremos que haga la gente”.
¿Puedo utilizar leche de fórmula para niños o leche de vaca?
Puede ser.
En realidad, depende de la edad de tu bebé y de lo que diga tu pediatra.
Al menos durante los seis primeros meses es realmente importante usar un producto formulado para bebés, dice Altmann. Pero cuanto más cerca estén del año, puede haber más flexibilidad.
“En realidad, puedes elegir una fórmula para niños pequeños en ese momento, cuando normalmente querrías esperar hasta que tuvieran exactamente un año de edad”, señaló Altmann. “Habla con tu pediatra, siempre, primero”.
“Desaconsejamos el uso de la leche de vaca hasta el año de edad, pero es cierto que cuando el bebé se acerca al año de edad, sobre todo si simplemente no se puede encontrar una fórmula, se podría utilizar eso o una fórmula para niños pequeños”, dijo Abrams. “Ninguna de las dos es ideal, pero cuanto más cerca esté del año, sobre todo a corto plazo, son alternativas”.
¿Se pueden comprar fórmulas internacionales por Internet?
Tal vez.
Altmann dijo que hay algunos productos de alta calidad hechos en Europa y Australia que le gustan y que están disponibles en línea. Pero es importante asegurarse de que se compran en tiendas de confianza.
Ella recomienda comprar en farmacias de confianza del país del que procede la fórmula y comparar los componentes de cada fórmula con los nutrimentos de una aprobada por la FDA.
“No todas las fórmulas internacionales son iguales, por lo que conviene asegurarse de que se sabe lo que se está comprando y de que se trata de un producto de alta calidad”, afirma.
Pero Abrams advierte contra las importaciones, recordando a las familias que las fórmulas importadas no son revisadas por la FDA.
“Es una alternativa menos que ideal, pero si es lo que tienen que hacer, entonces es lo que tienen que hacer”, dijo.
La FDA desaconseja importar la fórmula láctea por Internet porque podría ser falsificada, según un portavoz.
¿Puedo cambiar de marca de fórmula?
Sí.
“Lo que queremos que la gente haga, si es posible, es ser tan flexible como sea posible y hacer cambios de fórmula”, dijo Abrams.
Es posible que el bebé tarde unos días en acostumbrarse a una nueva marca de fórmula láctea, pero en la mayoría de los casos, el cambio está bien, indicó Altmann. Puedes encontrar buenas opciones de fórmula para tu bebé aquí.
Sin embargo, la cosa se complica en los casos en los que el niño toma una fórmula determinada debido a una alergia o sensibilidad.
“Si tu hijo tiene una alergia o sensibilidad y ha tenido reacciones previas a las fórmulas, consulta con tu pediatra antes de cambiarla, porque no todas las fórmulas son iguales”, dijo Altmann. “Pero en la mayoría de los casos, hay otras opciones disponibles a las que podemos ayudar a dirigirte”.
La FDA ha permitido que Abbott Nutrition libere el producto caso por caso para algunas familias que necesitan urgentemente fórmulas especiales y metabólicas, según la agencia.
¿Puedo reanudar el suministro de leche materna?
Es complicado.
Ha habido casos en los que las madres pueden inducir la lactancia por primera vez o reiniciar la lactancia después de haber decidido no amamantar, dijo Altmann. Sin embargo, el proceso es complicado y probablemente requiera la ayuda de un especialista en lactancia.
También hay bancos donde se puede comprar leche materna donada por otras familias. Puedes encontrar bancos de leche cerca de ti a través de la Human Milk Bank Association of North America.