(CNN) – ¿Existe un alimento más modesto pero universalmente adorado que el sándwich?
Y aunque la hamburguesa de una persona puede ser el katsu sando o el chivito de otra, existen pocos países en el planeta que no recurran a algún tipo de pan con relleno para curar un antojo.
FOTOS | Conoce 23 de los mejores sándwiches del mundo
Recorrer los sándwiches del mundo es, en cierto modo, como recorrer el mundo.
Para ayudarte a elegir el sándwich en torno al cual planificar tu próximo viaje, aquí tienes 23 de los mejores sándwiches del mundo:
Pambazo, México
Puede que lo primero que se nos venga a la cabeza cuando hablamos de México sean las tortillas. Pero uno de los antojitos más famosos del país es el pambazo, un bocadillo callejero favorito de Veracruz y Puebla que, según se dice, está inspirado en la forma de un volcán mexicano.
Es un bocadillo que llena mucho y que lleva el pan teñido de rojo gracias a que se remoja en salsa de chile guajillo, ligeramente picante. Abre grande para disfrutar de las papas y el chorizo cubiertos con lechuga, queso y crema.
Tramezzino, Italia
Aunque es originario de Turín, Venecia ha llevado este popular tentempié de bar al siguiente nivel, rellenando adecuadamente triángulos de pan blanco al estilo del té inglés con rellenos que incluyen desde aceitunas y atún, huevos duros y verduras, hasta montones de crujiente prosciutto con trufa.
Los bares de toda Venecia sacan bandejas de tramezzini a la hora de comer. Si estás haciendo las cosas bien, los disfrutarás junto al canal con una copa de vino local.
Shawarma, Medio Oriente
El nombre de Shawarma proviene de la palabra árabe que significa “girar”, una referencia a la forma en que el relleno de carne de este sándwich favorito de Medio Oriente se cocina en un asador vertical. En adaptaciones que se extendieron por el Mediterráneo y Europa, el shawarma se ha reinterpretado como gyro en Grecia o doner kebab en Alemania, vía Turquía.
Aunque hay muchas variantes de esta popular comida callejera, su base es la carne especiada (normalmente pollo, cordero o ternera) que se asa de manera vertical y se corta directamente en el asador. La carne es metida en un pan pita ligero, acompañado por elementos como tomate, cebolla y perejil, y quizás también salsa tahini y salsa picante.
Bánh mì, Vietnam
Los vietnamitas reinterpretaron el sándwich de baguette, un vestigio culinario del colonialismo francés, a su gusto.
Los bánh mì se venden ahora en carritos de comida en casi todas las esquinas de Ho Chi Minh y de todo Vietnam, y son muy apreciados más allá de las fronteras del país.
La versión clásica es a base de carne de cerdo, con chả lụa (rollo de cerdo al estilo vietnamita), zanahorias ralladas en vinagre, daikon en vinagre, hojas de cilantro, mayonesa y otros ingredientes. También se pueden encontrar variantes con tofu y rebanadas delgadas de pollo al limón. El sabor es crujiente, fresco, sabroso y absolutamente delicioso.
Muffaletta, Nueva Orleans, Estados Unidos
Los inmigrantes italianos que se asentaron en el barrio francés de Nueva Orleans a finales del siglo XIX y principios del XX son los responsables de la invención de este sándwich por excelencia de Nueva Orleans, hecho con pan siciliano redondo y cubierto de ajonjolí, que fácilmente puede superar el tamaño de su cabeza.
En el interior de la muffaletta, se mezclan capas de aceitunas picadas, salami de Génova, jamón y varios quesos (frecuentemente suizo y provolone) para un efecto delicioso.
Chivito, Uruguay
Aunque el nombre de este sándwich uruguayo se traduce como “cabrito”, la carne de ese rumiante está decididamente ausente de este decadente platillo de filete en lonchas finas (llamado churrasco), jamón, tocino, lechuga, mayonesa y mozzarella fundida.
Apilado en un panecillo similar al de las hamburguesas o al de la chapata, el chivito se suele rematar con un huevo frito, para que no te quedes con hambre.
Pan bagnat, Francia
Si te gusta una buena ensalada Niçoise, lo más probable es que seas un fan del pan bagnat, un sándwich que también procede de Niza, en el sur de Francia, y que se prepara con pain de campagne crujiente, un favorito de las panaderías.
Cortado por la mitad (pero no del todo), el pan se abre para mostrar capas de verduras crudas, anchoas, aceitunas, huevos duros en rodajas, trozos de atún y abundante aceite de oliva, sal y pimienta. Buen provecho, sin duda.
Smørrebrød, Dinamarca
Amado en toda Escandinavia, pero especialmente emblemático por ser uno de los platos nacionales de Dinamarca, este sándwich abierto se traduce como “pan con mantequilla”, pero el smørrebrød es mucho más.
Típicamente se sirve en pan de centeno y los aderezos incluyen decenas (quizás cientos) de combinaciones que van desde el arenque al curry o en escabeche y pequeños camarones rosas, hasta huevos cocidos en rodajas y roast beef sobre una capa de mantequilla. Al más puro estilo escandinavo, el smørrebrød también apuesta por la estética: los sándwiches son tan bonitos de ver como deliciosos.
Spatlo, Sudáfrica
Especialmente ligado a la provincia de Gauteng y a Johannesburgo, el sándwich spatlo sudafricano (a menudo llamado kota, que se traduce vagamente como cuarto de pan) se elabora con un cuarto de pan ahuecado y atiborrado al máximo con carne y mucho más.
En su interior hay papas fritas sazonadas, queso, tocino, mortadela, salchichas al estilo ruso y, tal vez, un montón de salsa atchar picante (hecha con mangos verdes) y un huevo frito.
Sándwich de carne ahumada de Montreal, Canadá
Los carnívoros dicen “oui” a este sándwich de Quebec hecho con carne ahumada entre rebanadas de pan de centeno ligero y aderezado con mostaza amarilla.
Se dice que el mejor brisket utilizado en un auténtico sándwich de carne ahumada de Montreal se deja en remojo hasta dos semanas en salmuera y aromáticos como cilantro, pimienta en grano y ajo antes de ser ahumado y rebanado a mano para ser disfrutado en la gloria eterna del sándwich.
Po’boy, Nueva Orleans, Estados Unidos
Se rumorea que el po’boy (también conocido como “poor boy”) se inventó para alimentar a los conductores de tranvías de la ciudad durante una huelga en 1929.
La historia sigue siendo confusa, pero el sabor de este sándwich ciertamente no lo es.
Quien pruebe esta baguette cargada de mayonesa y relleno de ostras fritas (o quizás de camarones fritos o roast beef) y apilado con lechuga, tomate y pepinillos, se encuentra con un bocadillo maravillosamente delicioso.
Fricassé, Túnez
Con un reconfortante panecillo de levadura frito como base y un delicioso relleno de atún, papas y huevo cocido en el interior, este sándwich norteafricano ofrece un alimento completo en un paquete aparentemente pequeño.
El sándwich de comida callejera y de picnic favorito de Túnez, el fricassé, suele hacerse más atractivo con aceitunas negras en rodajas, limón en conserva y harissa, el condimento picante omnipresente en esta parte del mundo, hecho con chiles rojos secos, ajo y una mezcla de especias que suele incluir alcaravea, comino y semillas de cilantro.
Sándwich cubano, Cuba/Estados Unidos
Según Andy Huse, autor de un libro de próxima aparición sobre el sándwich cubano, este favorito de Florida es motivo de constante debate en Miami y Tampa, donde los puristas discuten sobre sus ingredientes fundamentales y su origen.
Tanto si lo comes con salami (a la manera de Tampa) como si no (a la manera de Miami), este sándwich con capas de jamón cocido, cerdo asado, pepinillos, mostaza, queso suizo y mantequilla y prensado entre trozos de esponjoso pan cubano es un alimento sencillo, abundante y casi siempre asequible.
Sándwich de pepino, Reino Unido
Los sándwiches de pepino, en el lado más delicado del espectro de los sándwiches, son un elemento tradicional del té de la tarde inglés, que a menudo se encuentra en las mismas bandejas con bollos y pastelillos.
En el pan blanco extra suave sin corteza se colocan capas de pepinos ingleses muy finos (pelados, por favor, y luego ligeramente salados y escurridos), mantequilla, un ligero espolvoreo de pimienta fina y quizás un poco de hierbas frescas como el eneldo. Corta el sándwich en triángulos y acompáñalo con una taza de té.
Chip butty, Reino Unido
Lo contrario de la elegancia, el chip butty va en serio: después de todo, se trata de un sándwich en pan blanco con mantequilla y relleno de papas fritas (también conocidas como chips en su país de origen, Gran Bretaña) que parecen hacerse un hueco en toda esa suavidad.
Se dice que sus raíces se remontan a la década de 1860 y a una tienda de pescado y papas fritas de Lancashire, Inglaterra, y que el chip butty se puede aderezar con condimentos opcionales que van desde el ketchup y el vinagre de malta hasta la mayonesa.
Katsu sando, Japón
Una chuleta de cerdo frita, aplanada y empanizada con panko y metida en un esponjoso pan de leche blanco japonés llamado shokupan, es la base de este bocadillo de culto en las tiendas de conveniencia de Japón.
Considerado como cocina yōshoku (de influencia occidental), el katsu sando se suele adornar con col rallada y también se presenta en versiones de pollo y ensalada de huevo (tamago).
Reuben, Estados Unidos
Si le preguntan a los habitantes de Nebraska, dirán que el Reuben fue inventado allí por un bodeguero local que quería alimentar a una banda de hambrientos jugadores de póker. En Nueva York, la historia cuenta que el descuidado y pecaminoso sándwich de pan de centeno recibió el nombre del fundador del restaurante Reuben de Nueva York.
Lo que no está en disputa es la delicia que va dentro de un Reuben: carne estilo “corned beef” en rodajas, chucrut, queso suizo y aderezo ruso o Mil Islas. Necesitarás servilletas. Muchas.
Croque monsieur/madame, Francia
Esta maravilla crujiente (croquant), arquetipo de los sándwiches franceses, se presenta en versión femenina y masculina (madame y monsieur) y se originó en los cafés de Francia como un tentempié.
En el caso del croque monsieur, las rebanadas de pan blanco cubiertas de queso rallado y rellenas de jamón en lonchas finas y emmental o gruyere en su interior se sumergen en una masa de huevo y se fríen. En el caso del croque madame, el huevo se sirve frito sobre el sándwich.
Philly cheesesteak, Filadelfia, Estados Unidos
El sándwich más apreciado de la Ciudad del Amor Fraterno es un delicioso platillo caliente con ribeye cortado finamente, láminas de provolone y pimientos y cebollas salteados al gusto.
Los puristas insisten en que el Philly cheesesteak está envuelto en un bollo de hoagie. Pero si preparas uno en casa, cualquier pan blanco grueso resultará satisfactorio.
Broodje haring, Países Bajos
Como una probada al salado mar del Norte en forma de sándwich, el Como un sabor del salado Mar del Norte destilado en forma de sándwich, este clásico sándwich holandés es solo para los amantes del pescado.
Servido en frío, el broodje haring lleva un crujiente pan tipo baguette relleno de finas lonchas de arenque frío curado en sal y cebolla picada. Dependiendo del lugar de los Países Bajos en el que te encuentres, también puede llevar pepinillos en rodajas. Lo puedes encontrar en cualquier lugar donde haya un mercado en los puestos llamados vishandels.
Falafel pita, Medio Oriente
No extrañarás la carne en este alimento básico vegetariano de la cocina de Medio Oriente. El falafel pita es exactamente lo que su nombre sugiere. Unas crujientes bolas fritas de falafel, hechas con garbanzos remojados y molidos, mezclados con hierbas, se introducen en una pita caliente y esponjosa y se complementan con lechuga, tomates, salsa tahini y otros aderezos que pueden incluir salsa de chile y hummus.
En las calles de Beirut, Ammán y muchos otros lugares de Medio Oriente, la gente hace filas para comprar este sándwich.
Choripán, Argentina
Las salchichas salpicadas con mostaza y salsa chimichurri son los ingredientes de este clásico argentino cuyo nombre es una mezcla de chorizo y pan.
Se cree que los orígenes del choripán se remontan a los gauchos, conocidos por sus asados de carne a la parrilla. Pero hoy en día, este sándwich informal y saciante se puede encontrar más allá de Buenos Aires y los Andes, en puestos de comida, partidos de fútbol y restaurantes de toda Sudamérica. Lo mejor es disfrutarlo recién salido de la parrilla.
Rollo de langosta, Nueva Inglaterra, Estados Unidos
Los habitantes de Nueva Inglaterra aprecian mucho su humilde rollo de langosta, una delicia costera veraniega con grandes trozos de carne de langosta cocida al vapor, normalmente mezclada con jugo de limón, mayonesa y hierbas, y metida en un rollo parecido al de un hot dog.
Puedes encontrarlos en las marisquerías de todo Estados Unidos. Pero comer uno en una clásica choza de langostas en el tramo de costa que va de Maine a Connecticut será un escenario difícil de superar.