(CNN) – Funcionarios de Shanghái dijeron este martes que lograron “cero covid-19 a nivel comunitario”, en lo que parecía ser el punto de inflexión de una campaña costosa y de mano dura para controlar un brote de la variante ómicron. Pero, muchos residentes siguen siendo escépticos ante que la ciudad reabrirá pronto.
“Covid-19 cero a nivel comunitario” significa que las infecciones ya no se encuentran fuera de las instalaciones de cuarentena centralizadas o los vecindarios bajo los confinamientos más estrictos, y es un requisito previo para que se levanten esas medidas.
Zhao Dandan, subdirector de la Comisión Municipal de Salud de Shanghái, dijo en una conferencia de prensa este martes que los 16 distritos del centro financiero chino ya lograron esa distinción. Pero 860.000 personas permanecen bajo el nivel de cuarentena más estricta, lo que significa que no pueden salir de sus hogares.
Desde que el líder de China, Xi Jinping, prometió continuar con su política de cero covid-19, el 5 de mayo, las autoridades de Shanghái han tomado medidas cada vez más duras, cancelando las entregas de alimentos en algunos vecindarios, obligando a los residentes que dieron negativo en la prueba de covid-19 a la cuarentena gubernamental y desinfectando sus hogares sin consentimiento.
Sin embargo, aunque las fuertes medidas han alimentado el descontento entre los residentes, también parecen haber reducido las infecciones. Shanghái reportó menos de 1.000 casos nuevos tanto el domingo como el lunes, la primera vez por debajo de las cuatro cifras desde el 24 de marzo, según la Comisión de Salud de la ciudad.
Shanghái promete reactivación desde junio
El anuncio se produce un día después de que Shanghái se comprometiera a aliviar gradualmente su confinamiento por el covid-19 y volver a la normalidad en junio, luego de siete semanas de paralización impuesta por el Gobierno que infligió un gran dolor a los residentes y asestó un golpe devastador a la economía.
En una conferencia de prensa este lunes, los funcionarios de Shanghái declararon que el brote está “bajo control efectivo” ya que 15 de los 16 distritos de la ciudad habían detenido la propagación comunitaria del covid-19, con menos de 1 millón de sus 25 millones de residentes aún en estricta cuarentena.
Las autoridades dijeron que la reapertura de la ciudad se realizará en tres fases, con el objetivo de restaurar la vida a la normalidad y reiniciar completamente las operaciones de fábricas en junio.
“Desde el 1 de junio hasta mediados y finales de junio, bajo la premisa de controlar los riesgos de repunte de contagios, normalizaremos la prevención y el control de epidemias, y restableceremos plenamente la producción y la vida normal en la ciudad”, dijo el vicealcalde, Zong-ming.
Los supermercados, las tiendas de conveniencia y las farmacias comenzaron a reabrir este lunes, dijo Zong, y agregó que les seguirían las peluquerías y los mercados agrícolas mayoristas.
Los servicios de tren hacia y desde Shanghái también se han reanudado gradualmente desde este lunes, seguidos de los vuelos nacionales. A partir del 22 de mayo se reanudarán los servicios de autobús y metro. Los pasajeros necesitarán una prueba de covid-19 negativa, tomada dentro de las 48 horas, para abordar el transporte público, según Zong.
Los residentes de Shanghái no están convencidos de que puedan volver a la normalidad
El plan de reapertura fue recibido con escepticismo por algunos residentes de Shanghái que han perdido la confianza en el Gobierno local.
En marzo, las autoridades de Shanghái negaron reiteradamente que la ciudad se cerraría. La policía incluso arrestó a dos personas acusadas de “difundir rumores” sobre la inminencia de tal medida.
Cuando el Gobierno local anunció un confinamiento en dos etapas, a fines de marzo, dijo que duraría solo cuatro días y prometió que los suministros diarios serían suficientes. Pero los días se convirtieron en semanas y muchos lucharon para asegurar el acceso a los alimentos y otras necesidades diarias.
“Puedes engañarme, pero por favor no lo hagas todo el tiempo”, dijo un usuario en la plataforma Weibo de China, similar a Twitter, en un comentario que circuló ampliamente.
En las redes sociales chinas, algunos residentes de Shanghái dijeron que todavía no se les permitía salir a pesar de que sus vecindarios no informaron casos recientes. Otros arremetieron contra los informes de los medios estatales que afirman que la vida en la ciudad está volviendo a la normalidad.
Mientras tanto, se satirizó un artículo en el sitio web del Diario del Pueblo, en el que el portavoz del Partido Comunista presentaba imágenes que pretendían mostrar la reapertura de restaurantes, cafeterías y supermercados.
“Aunque no tengo permitido salir en Shanghái, puedo sentir una verdadera calidez por sus noticias falsas. ¡Gracias, Diario del Pueblo!”, dijo un residente en una publicación en las redes sociales bajo un hashtag que se traduce vagamente como “el olor a cocina está regresando a Shanghái”.
“¿Es Shanghái un mundo paralelo?”, preguntó otro usuario bajo el mismo hashtag.
El hashtag, que ha sido visto 140 millones de veces, parece haber llamado la atención de los censores de Internet de China. Para el martes por la tarde solo se podían ver los posts publicados por cuentas oficiales bajo ese hashtag.
Algunos residentes de Shanghái incluso dejaron comentarios sarcásticos en la cuenta oficial de Weibo del “Centro Nacional Antifraude”, una aplicación lanzada por el Ministerio de Seguridad Pública de China para combatir las estafas telefónicas.
“Por favor, ve tras el Gobierno de Shanghái y hazlos callar. Mienten con los ojos bien abiertos todos los días, ya es suficiente”, dijo un usuario de Shanghái.
Otros mantuvieron su ira por la información del Diario del Pueblo. “People.cn está difundiendo rumores. El Shanghái descrito en sus palabras no es el Shanghái en el que estoy viviendo ahora”, dijo un usuario.
La mayoría de los comentarios habían sido eliminados el martes por la tarde.