(CNN Business)– “Top Gun: Maverick” llega a los cines este fin de semana, marcando el regreso de una de las estrellas de cine más grandes de los años 80 y 90.
No hablamos de Tom Cruise.
Val Kilmer regresa a la pantalla para retomar su papel de Tom “Iceman” Kazansky en la esperada secuela del éxito de taquilla de 1986. Cruise es la estrella principal de “Top Gun: Maverick”, y aunque Kilmer tiene un papel notable, puede que algunos cinéfilos más jóvenes no caigan en la cuenta de la gran estrella que alguna vez fue.
Las películas de Kilmer han recaudado una gran cantidad de dinero a lo largo de su dilatada carrera: casi US$ 2.000 millones en la taquilla mundial, según Comscore (SCOR). (Cruise acumula más de US$ 10.000 millones en la taquilla mundial).
Kilmer, como Cruise, se convirtió en una gran estrella en “Top Gun”, interpretando a “Iceman”, el engreído pero genial rival de Pete “Maverick” Mitchell de Cruise.
Después de ese icónico rol, Kilmer protagonizó una larga racha de exitosas películas que abarcan todos los géneros: películas de superhéroes como “Batman Forever” de 1995 en la que interpretó al Caballero de la Noche, y giros memorables en westerns como Doc Holliday en “Tombstone” de 1993, biopics como Jim Morrison en “The Doors” de 1991 y en películas policíacas como ladrón de bancos en la obra maestra de Michael Mann de 1995, “Heat”.
Pero “Top Gun: Maverick” es probablemente el canto del cisne para Kilmer, quien se sometió a una traqueotomía que alteró por completo su voz. Kilmer reveló en 2017 que tenía cáncer de garganta y se ha alejado bastante de la actuación.
Los problemas de salud fuera de la pantalla de Kilmer están entretejidos en la historia de “Top Gun: Maverick”, lo que le da a la secuela una capa emocional de la vida real. Si la nueva película es de hecho el último papel de Kilmer, en ella concluirá una de las carreras más interesantes y rentables en la historia de Hollywood.
El año pasado, Kilmer apareció en “Val”, un documental íntimo que trataba sobre sus problemas de salud y exploraba su carrera. El documental comparte interacciones que grabó en video con su familia y en platós durante años.
David Rooney, crítico de cine en jefe de The Hollywood Reporter, escribió en su reseña que el elemento más conmovedor de “Top Gun: Maverick” se produce durante el breve tiempo de pantalla del personaje de Kilmer, Iceman, cuyos problemas de salud reflejan los que sufre el actor en la vida real, generando un padecimiento resonante”.
“Hay calidez recíproca, incluso amor, en una escena entre Iceman y Maverick que reconoce el vínculo que tanto les costó ganar a los personajes, así como la rivalidad que lo precedió, con un delicado humor “, escribió Rooney.