(CNN Español) – El observador permanente de la Santa Sede ante la Organización de Estados Americanos (OEA), monseñor Juan Antonio Cruz, expresó “preocupación” este viernes durante una sesión extraordinaria del Consejo Permanente de la OEA sobre Nicaragua.
En la reunión se analizaron los últimos sucesos en el país, como la retención del obispo de la diócesis de Matagalpa, que cumple 9 días sitiado por la Policía Nacional bajo la acusación de “organizar grupos violentos”, señalamientos que el religioso niega.
“La Santa Sede no puede dejar de expresar su preocupación, mientras asegura su deseo de colaborar siempre con quienes apuestan por el diálogo como instrumento indispensable en la democracia y garante de una civilización más humana y fraterna. En tal sentido, la Santa Sede hace un llamado para que las partes puedan encontrar caminos de entendimiento, basados en el respeto y la confianza recíproca, buscando ante todo el bien común y la paz”, dijo Cruz.
El Consejo Permanente aprobó una resolución que “condena enérgicamente el cierre forzado de organizaciones no gubernamentales, así como el hostigamiento y las restricciones arbitrarias de organizaciones religiosas y las voces críticas del gobierno y sus acciones en Nicaragua”.
Además, reitera la insistencia “en que el gobierno de Nicaragua libere a todos los presos políticos, cese la intimidación a la prensa independiente y garantice el ejercicio al derecho de la libertad de expresión” en el país.
El documento se aprobó con 27 votos a favor, 1 en contra, 4 abstenciones y 2 ausencias.
El gobierno de Ortega no estuvo presente en la sesión y tampoco ha reaccionado a la resolución aprobada. Nicaragua denunció la carta de la OEA en noviembre pasado y anunció el retiro del país del organismo hemisférico en noviembre, argumentando que el organismo realizaba acciones injerencistas que violentan la soberanía nacional.