(CNN Español) – Fiscales del Ministerio Público de Paraguay allanaron este martes la vivienda del exministro del Interior, Arnaldo Giuzzio, imputado por cohecho pasivo por supuestamente mantener contactos durante su gestión con un presunto narcotraficante detenido en Brasil.
El Ministerio Público informó en un comunicado que los fiscales Alicia Sapriza y Osmar Legal, de la Unidad Especializada de Crimen Organizado y la de Delitos Económicos y Anticorrupción, respectivamente, registraron la vivienda del exfuncionario, al que habían imputado previamente por cohecho pasivo agravado y contra quien solicitaron “medidas alternativas a la prisión”.
Según el Código Procesal Penal de Paraguay, los cargos de “cohecho pasivo agravado” se dan cuando un funcionario solicita, se deja prometer o acepta un beneficio a cambio de un acto de servicio ya realizado o que realizará en el futuro, en una acción que lesiona sus deberes. Esto puede ser castigado con una pena privativa de libertad de hasta cinco años.
CNN contactó al exministro Giuzzio, quien calificó la imputación como “descabellada”.
Giuzzio le dijo a CNN que cree que la imputación en su contra estaría dirigida a “ocultar y acallar acusaciones” que él mismo había realizado recientemente contra el expresidente Horacio Cartes.
El exmandatario paraguayo fue designado en julio por el Departamento de Estado de Estados Unidos como supuestamente involucrado en “significativa corrupción”, calificación que el exmandatario rechazó en un vídeo difundido en sus redes sociales, donde le pide a EE.UU. el derecho a defenderse.
En una conferencia de prensa brindada este martes tras el allanamiento de la vivienda de Giuzzio, el fiscal anticorrupción Osmar Legal negó que haya un trasfondo político en la investigación. Legal sostuvo que, según los datos que tiene su oficina, el exministro del Interior supuestamente mantenía una relación fluida con el líder presuntamente conectado a un esquema de narcotráfico detenido en Brasil.
Guillermo Duarte Cacavelos, abogado de Giuzzio, le dijo a CNN que este es inocente de los cargos. Cacavelos agregó que su defendido se presentó ante la Fiscalía el 4 de abril de este año para ponerse a disposición de la investigación sobre el narcotraficante brasileño que supuestamente intentó ser proveedor de insumos del Ministerio del Interior durante la gestión de Giuzzio, pero que desde la fiscalía le negaron la copia con el argumento de que su cliente no era parte de la investigación. Duarte Cacavelos agregó a CNN que la imputación contra Giuzzio “no tiene ningún sustento jurídico”.
Según explicó el fiscal Legal en conferencia de prensa, el pedido de la copia de la carpeta fiscal por parte de la defensa del exministro del Interior fue en abril y que “la cooperación con Brasil, donde se conoció de los supuestos vínculos entre Giuzzio y el brasileño, ocurrió en mayo.”
“Al momento de pedir la copia no había carpeta abierta”, aseguró Legal.
Legal señaló que hay mensajes que el presunto narcotraficante supuestamente le remitía de una noticia sobre una investigación abierta contra un clan narco “y él (Giuzzio) le seguía la conversación”. Posteriormente, Legal aseguró que también hay mensajes donde habría unas propuestas de inversiones “tanto en Brasil como aquí”.
“También podemos corroborar que se habrían realizado reparaciones a móviles de la Policía Nacional, del Ministerio Público, Ministerio del Interior, de forma, aparentemente, gratuita sumado al viaje que Giuzzio habría realizado con la camioneta que era de la esposa del presunto narco “, agregó.
“Se puede hablar, incipientemente, de que (el presunto narco brasileño) estaba en espera de una licitación pendiente para el blindaje de varias camionetas, de unas 50, de la Policía Nacional, y la provisión de chalecos antibalas”, dijo Legal.
El fiscal resaltó en la conferencia de prensa que “dejarse prometer “según la legislación paraguaya ya es elemento para imputación.
En relación al argumento de la fiscalía, sobre sus vínculos con el ciudadano brasileño, Giuzzio había explicado en febrero, antes de ser removido del cargo, que no sabía que era un presunto narcotraficante.
“Le conozco a este señor desde el año pasado, nos ofreció materiales balísticos, chalecos, vehículos blindados también (…) inclusive había presentado una exhibición de sus chalecos, fue particular. Invitamos a otros referentes de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad), Policía, hicimos un chequeo de la empresa en Paraguay, todo aparentaba normal. Recibimos a esta empresa como a tantas otras empresas”, declaró Giuzzio al diario ABC en febrero.
También en febrero, Giuzzio había reconocido en su cuenta de Twitter que alquiló una camioneta blindada del sujeto en cuestión, durante sus vacaciones en Brasil. Giuzzio aclaró en el tuit que mantuvieron contacto en más de una ocasión, pero “siempre sobre los servicios de su empresa”.
Este martes, la defensa de Giuzzio compartió con CNN documentos del alquiler del vehículo usado por Giuzzio en sus vacaciones, y sostuvo que eso prueba que su cliente no prestó el vehículo como alega la fiscalía, sino que fue alquilado a la empresa del sujeto que es un presunto narco.
La fiscalía informó que en el allanamiento de la vivienda de Giuzzio se incautaron varios equipos y documentaciones.
Giuzzio fue ministro del Interior de enero de 2021 a febrero de 2022.
Y además de haber ejercido ese cargo, ocupó diferentes puestos de gobierno, como el de fiscal anticorrupción, senador nacional y ministro de la Secretaría Nacional Antidrogas.