(CNN) – Dos personas que vendieron el diario de Ashley Biden y otros artículos a Project Veritas se declararon culpables en un tribunal federal de Manhattan el jueves.
Aimee Harris y Robert Kurlander se declararon culpables de robar las pertenencias de Biden y venderlas al grupo de medios conservador por US$ 40.000, según documentos judiciales.
En septiembre de 2020, Harris se mudó a una casa en Delray Beach, Florida, donde la hija del ahora presidente Joe Biden había vivido recientemente y almacenó temporalmente algunas pertenencias personales. Harris solicitó la ayuda de Kurlander para vender los objetos de valor de Biden al mejor postor, según la información criminal.
La pareja asistió a una recaudación de fondos de Donald Trump el 6 de septiembre de 2020, con la esperanza de organizar una venta para la campaña del entonces presidente.
Según los documentos presentados el jueves, Kurlander le envió un mensaje de texto a Harris después del evento diciendo: “La campaña [de Trump] no puede usarlo. Quieren que vaya al FBI. NO HAY MANERA que [Trump] use esto. Tiene que hacerse de otra manera…”
Días después, enviaron fotos de algunas de las pertenencias de Biden a Project Veritas. La organización pagó el pasaje aéreo, el hotel y un servicio de automóvil para que la pareja transportara la propiedad desde Florida a la ciudad de Nueva York, según los documentos judiciales.
Kurlander reconoció el crimen en un mensaje de texto a Harris, diciendo que Project Veritas está en un “negocio deshonesto”, según muestran los documentos judiciales.
“Están en un negocio deshonesto y aquí están tomando lo que es literalmente un diario e información robados. Y tratando de hacer una historia que arruinará la vida de [Ashley Biden] e intentará afectar la elección. [Ashley Biden] fácilmente puede estar pensando todas sus cosas están allí y no estar preocupada por ellas… tenemos que andar con más cuidado y esas cosas deben ser revisadas por nosotros y si hay algo que valga la pena, debe ser entregado y DEBE estar fuera de esa casa”, decía el mensaje de texto.
Harris se llevó más pertenencias de Biden de la casa después de su reunión en Nueva York a pedido de Project Veritas, según los documentos judiciales. Un empleado de Project Veritas luego voló a Florida para obtener los artículos adicionales y los envió de regreso a Nueva York, dicen los documentos judiciales.
Nadie de Project Veritas ha sido acusado públicamente en relación con el presunto esquema.
Harris y Kurlander se declararon culpables de un cargo de conspiración para cometer transporte interestatal de propiedad robada, que conlleva una sentencia máxima de 5 años de prisión, según las pautas de sentencia, pero un juez finalmente decidirá su sentencia. No están detenidos, a la espera de su sentencia a finales de este año.
Harris “aceptó la responsabilidad por lo que sucedió y está ansiosa por seguir adelante con su vida”, dijo a CNN su abogado, Sanford Talkin.
CNN contactó a un abogado de Kurlander, pero no recibió respuesta de inmediato.
En un comunicado emitido el jueves sobre las declaraciones de culpabilidad, Project Veritas dijo que la recopilación de noticias de sus empleados era “ética y legal”, y agregó: “La recepción legal por parte de un periodista de material que luego se alega que fue robado es una rutina, un lugar común y está protegido por la Primera Enmienda.”
CNN se ha comunicado con los representantes de Biden para obtener comentarios.