(CNN) –– Científicos del Acuario de Florida lograron un gran avance en la carrera para salvar un coral del Caribe: por primera vez, biólogos marinos reprodujeron con éxito el coral elkhorn, una especie muy importante, utilizando tecnología de acuarios.
Es un logro histórico que, esperan, podría ayudar a revitalizar los ecosistemas del Caribe, y podría retribuir a los humanos al ofrecer protección adicional contra la furia de los huracanes.
El coral elkhorn llegó a dominar en el Caribe alguna vez. Pero, así como otros ecosistemas coralinos vitales se han degradado en todo el mundo, ahora resulta muy inusual encontrar la especie elkhorn viva en la naturaleza. Esta especie es muy importante porque proporciona los componentes básicos para que florezcan los arrecifes, y hasta ahora ha sido notoriamente difícil de cultivar en acuarios.
Por eso, los científicos se emocionaron cuando vieron que su experimento reproductivo fue un éxito.
“Cuando finalmente sucedió, la primera sensación fue de puro alivio”, dijo Keri O’Neil, científica principal que supervisa el laboratorio de desove del acuario. “Este es un paso fundamental para evitar que el coral elkhorn se extinga en el estado de Florida”.
Los colegas de O’Neil la llaman la “susurradora del coral” porque ha logrado generar muchas variedades de coral. Elkhorn es la decimocuarta especie del acuario que se genera dentro del Laboratorio de Apollo Beach, pero el equipo la clasifica como la más importante hasta el momento.
O’Neil calcula que solo quedan alrededor de trescientos corales elkhorn en Florida Keys Reef Tract, pero el experimento de desove produjo miles de corales bebés. Ella espera que hasta 100 de ellos puedan sobrevivir hasta la edad adulta.
Llamado así por su parecido a los cuernos de alce (la traducción literal de elkhorn), el coral vive en la parte superior de la cresta del arrecife. Por lo general, crece en profundidades de agua de menos de 6 metros. Esto hace que sus colonias sean cruciales para romper grandes olas. Durante la temporada alta de huracanes, los arrecifes son un aliado silencioso pero poderoso que protege las costas de Florida de las marejadas ciclónicas, las cuales se hacen más grandes a medida que aumenta el nivel del mar.
“A medida que estos arrecifes mueren, comienzan a erosionarse y perdemos esa protección costera, así como todo el hábitat que estos arrecifes brindan a los peces y otras especies”, dijo O’Neil. “Ahora quedan muy pocos, solo hay unas pocas colonias dispersas. Pero realmente nos estamos enfocando en restaurar la población de coral elkhorn para la protección costera”.
La noticia del Acuario de Florida llega después de que los científicos informaran a principios de agosto que la Gran Barrera de Coral mostraba la mayor extensión de cobertura de coral en 36 años. Pero las perspectivas para los corales en todo el mundo son sombrías: los estudios han demostrado que la crisis climática podría acabar con todos los arrecifes de coral de la tierra para finales de siglo.
Al coral elkhorn lo catalogaron bajo amenaza a nivel federal en virtud de la Ley de Especies en Peligro de Extinción de Estados Unidos en 2006, después de que los científicos descubrieran que una enfermedad redujo la población en un 97% desde la década de 1980. Y el calentamiento de los océanos es su mayor amenaza. A medida que aumenta la temperatura del océano, el coral expulsa las algas simbióticas que viven en su interior y producen nutrientes. Este es el proceso de blanqueamiento del coral y generalmente culmina con su muerte.
“Están muriendo en todo el mundo”, recalcó O’Neil. “Ahora estamos en un punto en el que es posible que nunca vuelvan a ser los mismos. No se puede tener el océano con fiebre todos los veranos y esperar que no haya impacto”, insistió.
“Sabes que eso es imposible”
El coral elkhorn parece tener algo similar a un problema de fertilidad. Su reproducción es esporádica en la naturaleza, por lo que resulta difícil sostener el aumento de población que tanto necesita. Debido a su baja tasa de reproducción, la diversidad genética también puede ser muy poco, lo que los hace más susceptibles a las enfermedades.
“Se podría decir que están teniendo sexo con éxito, pero no están logrando tener bebés [en la naturaleza]”, explicó O’Neil. “Los animales terrestres hacen esto todo el tiempo. Cuando tienes un panda o un chimpancé en peligro de extinción, lo primero que haces es comenzar un programa de reproducción, pero la reproducción de los corales es muy extraña”, añadió.
La parte más desafiante para el equipo de O’Neil fue lograr algo sin precedentes: que el coral se reprodujera en un laboratorio. O’Neil dijo que otros investigadores dudaban que pudieran hacerlo.
“Enfrentamos muchas críticas de la gente”, dijo. “Decían no puedes mantenerlos en un acuario. ¡Sabes que eso es imposible!”.
Al principio, tenían razón.
El coral elkhorn solo se reproduce una vez al año. En el experimento de laboratorio de 2021, el entorno se controló estrictamente para imitar las condiciones naturales. Con luces LED, el equipo imitó con precisión los ciclos del amanecer, el atardecer y la Luna. Pero el coral no desovó.
“Nos dimos cuenta de que el momento de la salida de la Luna estaba desfasado unas tres horas”, relató O’Neil.
Después de ese fracaso frustrante, los científicos del acuario sabían que tenían una oportunidad mejor este año. Y con el apoyo del Centro de Restauración de la NOAA y la Fundación Nacional de Pesca y Vida Silvestre, el Acuario de Florida hizo en agosto lo que algunos compañeros pensaban que era imposible.
Este desove podría cambiar todo el panorama, según Thomas Frazer, decano de la Facultad de Ciencias Marinas de la Universidad del Sur de Florida. Además, podría conducir a un futuro en el que el coral sea más resistente a los cambios drásticos que provoca la crisis climática.
“Este tipo de trabajo es realmente importante”, le dijo Frazer a CNN. “Los corales seleccionados para la restauración podrían, por ejemplo, ser más resistentes a las temperaturas más cálidas del océano y al blanqueamiento, exhibir propiedades esqueléticas que puedan resistir la energía de las olas más intensas o rasgos que podrían hacerlos más resistentes a las enfermedades u otros factores ambientales estresantes”, añadió.
Margeret W. Miller es una ecologista de corales que se ha centrado en la investigación de restauración durante más de dos décadas. Miller fue coautora de un estudio en 2020 que encontró que la tasa de reproducción del coral elkhorn en la parte superior de los Cayos de Florida era tan baja que indicaría que la especie ya estaba “funcionalmente extinta” y podría desaparecer entre 6 y 12 años.
Miller dijo que el logro del Acuario de Florida abrirá nuevas puertas para abordar un esfuerzo de restauración más grande.
“Debido a que esta especie es un objetivo de restauración importante, la capacidad de desove bajo el cuidado humano abre muchas oportunidades de investigación para desarrollar intervenciones que podrían hacer que los esfuerzos de restauración sean más resistentes al cambio climático y otras amenazas ambientales”, dijo Miller.
Miller agregó que se necesita una mayor investigación para asegurarse de que cuando el coral elkhorn desove en el laboratorio esto sea razonablemente seguro y efectivo, y se pueda utilizar en la conservación de especies.
“Este tipo de desove en cautiverio no es una herramienta que enfrente directamente la restauración de coral generalizada a escala global que se necesita. De hecho, ningún esfuerzo actual de restauración de coral cumple con esa magnitud. Y ninguno tendrá éxito a menos que podamos tomar acciones serias para garantizar que los hábitats de los arrecifes de coral puedan permanecer en una condición viable donde los corales puedan prosperar”, aseguró Miller.
Según Miller, la crisis climática es el problema final que debe resolverse. Es necesario enfrentar el aumento rápido de la temperatura del océano, junto con las amenazas a la calidad del agua. Aún así, dijo, la capacidad de cultivar elkhorn en un laboratorio es una herramienta importante en el esfuerzo de restauración.
“Sin embargo, la investigación sobre la propagación de los corales y las intervenciones que puedan habilitarse con esfuerzos de desove en cautiverio pueden darnos tiempo para hacer tales cambios de manera efectiva, antes de que los corales desaparezcan de nuestros arrecifes por completo”, añadió Miller.
Ganando tiempo
Las ramas del coral elkhorn pueden crecer hasta 12 centímetros por año. Lo que lo convierte en una de las especies de coral de más rápido crecimiento, según NOAA. Y de acuerdo a las observaciones de los científicos del Acuario de Florida, sus nuevos bebés de coral elkhorn tardarán de 3 a 5 años en alcanzar la madurez sexual.
Dentro de 1 o 2 años, los científicos tienen la intención de replantar estos corales cultivados en laboratorio en el Santuario Marino Nacional de los Cayos de Florida.
En la carrera por restaurar los arrecifes, los científicos están de acuerdo en que este avance es solo un primer paso.
“Realmente estamos comprando tiempo”, dijo O’Neil. “Estamos comprando tiempo para el arrecife. Estamos comprando tiempo para los corales”.
El objetivo final es un programa de reproducción en el que los científicos puedan seleccionar la diversidad genética y criar corales más resistentes capaces de resistir amenazas como la contaminación, el calentamiento de las aguas oceánicas y las enfermedades.
Entonces la naturaleza puede tomar el timón.
“Hay esperanza para los arrecifes de coral”, enfatizó O’Neil. “No pierdan la esperanza. No todo está perdido. Sin embargo, necesitamos hacer cambios serios en nuestro comportamiento para salvar este planeta”.