Jerusalén (CNN) – Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) admitieron por primera vez que existe una “alta posibilidad” de que la periodista palestinoestadounidense de Al Jazeera Shireen Abu Akleh muriera por disparos israelíes mientras cubría una operación militar israelí en Yenín en mayo, según anunciaron el lunes.
“Parece que no es posible determinar inequívocamente el origen de los disparos que alcanzaron y mataron a la Sra. Abu Akleh. Sin embargo, existe una gran posibilidad de que la Sra. Abu Akleh fuera alcanzada accidentalmente por los disparos de las FDI hacia los sospechosos identificados como atacantes palestinos armados durante un intercambio de disparos”, dijeron las FDI en un comunicado.
Pero el Ejército de Israel no tiene intención de presentar cargos penales o procesar a ninguno de los soldados implicados, dijo el lunes la Fiscalía General Militar de las FDI en un comunicado separado.
“Después de un examen exhaustivo del incidente, y sobre la base de todas las conclusiones presentadas, el abogado general militar determinó que en las circunstancias del incidente, a pesar del resultado nefasto, la muerte de la Sra. Abu Akleh y la lesión del Sr. Samudi, no había sospecha de un delito penal que justifique la apertura de una investigación”, dijo la declaración.
“La decisión se basó en las conclusiones de la revisión, que determinó que los soldados de las FDI solo apuntaron contra aquellos que fueron identificados como terroristas armados durante el incidente. Por lo tanto, no había ninguna sospecha de que se hubiera disparado deliberadamente una bala contra alguien identificado como civil y, en particular, contra alguien identificado como periodista”, dice el comunicado.
Un alto funcionario de las FDI que informó a los periodistas sobre las conclusiones de la investigación militar antes de que se hicieran públicas, dijo que las tropas de las FDI no sabían que estaban disparando a la prensa, y afirmó que el hecho de que Abu Akleh estuviera “probablemente” de espaldas a los soldados fue un factor que contribuyó a ello. En las imágenes del lugar del tiroteo, Abu Akleh lleva un chaleco de protección con la inscripción “PRESS” (prensa) tanto en la parte delantera como en la trasera.
“Cuando disparaban en esa dirección, los soldados no eran conscientes de que estaban disparando a los periodistas. Pensaban que estaban disparando a los militantes que les disparaban a ellos”, dijo el oficial de las FDI.
Una investigación de CNN realizada en mayo descubrió pruebas, incluidos dos videos del lugar del tiroteo, de que no había ningún combate activo, ni militantes palestinos, cerca de Abu Akleh en los momentos previos a su muerte.
Las imágenes obtenidas por CNN, corroboradas por el testimonio de ocho testigos presenciales, un analista forense de audio y un experto en armas explosivas, sugieren que las fuerzas israelíes apuntaron intencionadamente a Abu Akleh.
Al Jazeera, empleador de Abu Akleh, ha afirmado sistemáticamente que el Ejército de Israel es responsable de su muerte.
Cuando se le preguntó por las investigaciones, incluidas las de CNN, que no encontraron militantes cerca de Abu Akleh cuando murió, el funcionario dijo: “Estimamos que había militantes en las inmediaciones de la Sra. Abu Abkleh. Tal vez no a un metro de ella, pero estaban en esa zona”, pero no aportó pruebas para respaldar esa afirmación.
“El soldado lo lamenta, y yo lo siento. Esto no debía ocurrir y no debería ocurrir. No lo hizo a propósito”, dijo el funcionario. No nombró al soldado.
Cuando murió, Abu Akleh estaba acompañada por un grupo de otros periodistas, entre ellos su productor Ali al-Samoudi, que resultó.
En la sesión informativa del lunes con los periodistas, el alto funcionario de las FDI dijo que la bala que mató a Abu Akleh estaba demasiado dañada para poder identificar qué arma la disparó, la misma conclusión a la que llegó una investigación forense dirigida por Estados Unidos.
Sin embargo, las FDI han llegado a la conclusión de que el soldado que probablemente efectuó el disparo mortal se encontraba al sur de Abu Akleh en un vehículo militar blindado con un alcance visual limitado, no identificó a Abu Akleh como periodista y pensó que estaba disparando a los militantes.
El funcionario dijo que los soldados en la zona habían estado bajo fuego “durante una hora y quince minutos” antes de que se disparara a Abu Akleh.
Al preguntársele por qué los disparos parecían continuar incluso después de que Abu Akleh cayera, el funcionario dijo que no contaron más de siete balas disparadas después de que fuera abatida. Había drones israelíes filmando durante la operación, dijo el funcionario, pero no con una resolución lo suficientemente alta como para poder ver el disparo fatal.
Tras la muerte de Abu Akleh, las autoridades israelíes afirmaron en un primer momento que probablemente fueron los disparos indiscriminados de militantes palestinos los que la mataron, antes de reconocer que era posible que los disparos israelíes fueran los responsables de su muerte.
En su informe del lunes, las FDI dejaron abierta la posibilidad de que Abu Akleh “fuera alcanzada por balas disparadas por atacantes palestinos armados en dirección a la zona en la que se encontraba”.
Según la autopsia palestina, Abu Akleh murió de un solo disparo en la parte posterior de la cabeza.
La familia de Shireen Abu Akleh criticó la investigación de las FDI, afirmando que Israel se había “negado a asumir la responsabilidad del asesinato de Shireen”, y pidió una investigación independiente de Estados Unidos.
El informe “trató de ocultar la verdad y evitar la responsabilidad por el asesinato de Shireen Abu Akleh, nuestra tía, hermana, mejor amiga, periodista y palestina estadounidense”, dijo la familia en un comunicado enviado a CNN.
“Sabemos desde hace más de 4 meses que un soldado israelí disparó y mató a Shireen, como han concluido las innumerables investigaciones realizadas por CNN, Associated Press, The New York Times, Al Jazeera, Al-Haq, B’tselem, Naciones Unidas y otros”, dice el comunicado.
“Y sin embargo, como era de esperar, Israel se ha negado a asumir la responsabilidad del asesinato de Shireen. Nuestra familia no está sorprendida por este resultado, ya que es obvio para cualquiera que los criminales de guerra israelíes no pueden investigar sus propios crímenes. Sin embargo, seguimos profundamente dolidos, frustrados y decepcionados”.
En julio, Estados Unidos determinó que los disparos del Ejército de Israel eran “probablemente responsables” de la muerte de Abu Akleh, aunque un examen de la bala supervisado por Estados Unidos “no pudo llegar a una conclusión definitiva” sobre su origen debido al estado de la bala.
El Coordinador de Seguridad de EE.UU., que dirige un equipo interinstitucional que se coordina con el gobierno israelí y la AP, “no encontró ninguna razón para creer que fuera intencional, sino más bien el resultado de circunstancias trágicas durante una operación militar dirigida por las FDI contra facciones de la Yihad Islámica Palestina el 11 de mayo de 2022, en Yenín, que siguió a una serie de ataques terroristas en Israel”, según un comunicado de entonces del Departamento de Estado.
Las FDI han estado llevando a cabo incursiones periódicas en Ribera Occidental, especialmente en la zona de Yenín, dirigidas a lo que dice que son militantes y alijos de armas. La redada en Yenín en la que murió Abu Akleh se produjo poco después de una oleada de atentados perpetrados por palestinos que duró varios meses y que causó la muerte de 19 israelíes y extranjeros. Algunos de los presuntos agresores de esos ataques eran de Yenín, según el Ejército de Israel.