(CNN Español) – Los cuatro años del gobierno de Jair Bolsonaro en el poder han estado plagados de polémicas. Las provocaciones y los escándalos se volvieron una marca registrada del mandatario, que este 2 de octubre apostará por renovar su mandato por un nuevo periodo, en unas elecciones que disputará con el expresidente y líder del Partido de los Trabajadores, Luiz Inácio Lula da Silva.
Los que han sido considerados por muchos como exabruptos del excapitán del Ejército y siete veces diputado por Río de Janeiro entre 1991 y 2018 parecen ser más que episodios aislados. Varios expertos consultados por CNN consideran que Bolsonaro ha hecho de eso los hitos principales de su presidencia, incluso llegando a forzarlos.
“Ese modo incendiario en Bolsonaro es una estrategia política, y debe ser entendido como tal. Está muy pensado. Hay que recordar que así es cómo construyó su carrera. Fue ganando atención, logró interés por medio de esas actitudes”, opina Lorena Barbería, investigadora y profesora titular del Departamento de Ciencias Políticas de la Universidad de São Paulo.
Según ella, el presidente crea distracciones para enfocarse en las cosas que verdaderamente importan, como las reformas o las privatizaciones. “Él crea ese ambiente de circo para desviar la atención”, añade Barbería.