(CNN Español) – La Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) demandó la liberación de opositores nicaragüenses detenidos y el cese de la represión a dirigentes y líderes de Ia Iglesia católica, en una nueva resolución sobre la “crisis política y derechos humanos en Nicaragua”, aprobada este viernes.
En el primer punto del documento de la Asamblea General, aprobado por aclamación, se resuelve “instar al Gobierno de Nicaragua a que cese toda acción violenta contra la población del país y a que se restablezcan plenamente los derechos cívicos y políticos, las libertades religiosas y el Estado de derecho; a que ponga fin a la intimidación y acoso judicial, administrativo y de otro tipo, contra periodistas, especialmente las mujeres y contra medios de comunicación y las organizaciones no gubernamentales”.
Según el recuento de medios de comunicación nacionales, como Confidencial y el diario La Prensa, en el país se han cancelado más de 2.000 organismos de la sociedad civil alegando incumplimiento de normativas, y se han clausurado 54 medios de comunicación independientes durante los últimos cuatro años.
Los Estados miembros de la OEA demandan al Gobierno de Nicaragua “que liberen a todos los presos políticos, en cumplimiento de las desiciones y recomendaciones de la Corte Interamericana de Derechos Humanos y de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos”.
Según la resolución, el “empeoramiento de las condiciones económicas y políticas ha empujado a unos 250 mil nicaragüenses a huir del país desde 2018”.
La Asamblea General de la OEA invitó a los Estados miembros a crear una comisión de alto nivel con el mandato de ” ofrecer al Gobierno de Nicaragua la oportunidad de discutir todos los asuntos pertinentes”.
El Gobierno de Nicaragua no ha reaccionado oficialmente a esta última resolución y la delegación del país no estuvo presente en la 52 Asamblea General del organismo hemisférico, celebrada esta semana en Lima.
Nicaragua denunció la carta de la Organización de Estados Americanos en noviembre de 2021 alegando que el organismo intervenía en los asuntos internos del país y violentaba la soberanía nacional. El proceso de salida de Nicaragua de la OEA concluye oficialmente en noviembre de 2023.
En el 2019, la OEA había creado una comisión de alto nivel que contribuiría a buscar una salida a la crisis sociopolítica que vivía el país desde 2018.
El Gobierno de Nicaragua rechazó la comisión y no permitió su ingreso al país. La comisión se reunió en El Salvador con varios sectores nicaragüenses.
Por su parte, el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) valoró la resolución como “un aporte a la lucha que debe continuar, hasta que Nicaragua sea un país libre y democrático. El Estado de Nicaragua tiene el deber de cumplir sus compromisos internacionales y las demandas expresadas en esta resolución”, expresó el organismo de derechos humanos.