(CNN) – Los casos de influenza se dispararon en Estados Unidos tras el Día de Acción de Gracias, lo que llevó a la semana más grave hasta la fecha en una temporada que golpeó muy pronto al país. Más de un tercio de todas las hospitalizaciones y muertes por influenza registradas en lo que va de la temporada ocurrieron la semana pasada, y los casos aumentaron casi en la misma proporción.
Los nuevos datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC, por sus siglas en inglés) estiman que se han registrado al menos 13 millones de enfermedades, 120.000 hospitalizaciones y 7.300 muertes por influenza en lo que va de la temporada.
La última actualización incluye datos hasta el 3 de diciembre y es la primera semana completa de datos después de Acción de Gracias. Muestra que la actividad de los virus respiratorios sigue siendo elevada en todo el país en medio de una temporada de influenza que golpeó a EE.UU. antes de lo esperado y con fuerza, y los funcionarios de salud han advertido que reunirse en lugares cerrados durante las fiestas puede conducir a un aumento de los casos.
Según los CDC, todos los estados menos siete registran una actividad de los virus respiratorios “alta” o “muy alta”.
Los estados con actividad moderada, baja o mínima son Alaska, Hawai, Michigan, Nueva Hampshire, Dakota del Sur, Vermont y Virginia Occidental.
Se han registrado cerca de 26 hospitalizaciones por influenza por cada 100.000 personas, una tasa que llevaba más de una década sin alcanzar estos niveles para este punto de la temporada.
Casi 26.000 personas ingresaron al hospital por gripe la semana pasada, ocupando unas 6.000 camas más que la semana anterior. Alrededor de 1 de cada 4 pruebas de laboratorio dieron positivo por influenza la semana pasada y casi 1 de cada 10 muertes se debieron a neumonía, influenza o covid-19, muy por encima del umbral epidémico de alrededor del 6%.
Los datos de Walgreens que hacen un seguimiento de las recetas de Tamiflu y otros tratamientos antigripales sugieren que los focos de influenza se extienden desde El Paso hasta el suroeste de Virginia.
La temporada de influenza del año pasado fue relativamente leve, pero el número de casos de influenza, hospitalizaciones y muertes que se han notificado hasta ahora en la temporada actual ya ha superado el número total registrado durante toda la temporada pasada.
Los hospitales están más llenos ahora de lo que han estado durante toda la pandemia de covid-19, según un análisis de CNN de datos del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos (HHS, por sus siglas en inglés).
Alrededor del 80% de las camas hospitalarias están en uso en todo el país, lo que supone un aumento de 8 puntos porcentuales en las últimas dos semanas.
Desde mediados de 2020 se exige a los hospitales que faciliten información sobre su capacidad, como parte de un esfuerzo federal para hacer un seguimiento de los efectos de la pandemia de covid-19.
Los hospitales han estado a más de un 70% de su capacidad durante la mayor parte de ese tiempo. Pero alcanzaron el 80% en otro momento: en enero, durante el punto máximo de la oleada de ómicron en Estados Unidos. En enero, alrededor de una cuarta parte de las camas de los hospitales estaban ocupadas por pacientes de covid-19.
Pero ahora, solo representan el 6% de la ocupación hospitalaria.
En un comunicado difundido este viernes, Nancy Foster, vicepresidenta de calidad y seguridad del paciente de la Asociación Estadounidense de Hospitales, afirma que la afluencia de pacientes con influenza es una de las principales razones por las que los hospitales se están llenando, pero también se enfrentan al virus respiratorio sincitial y a enfermedades de personas que pospusieron la atención durante la pandemia.
“La escasez de personal no solo ha dificultado la labor de los hospitales, sino que también ha disminuido el número de pacientes que pueden ser atendidos en residencias de ancianos y otros centros de cuidados paliativos o de rehabilitación”, señala el comunicado. “Así, los pacientes están pasando más tiempo en los hospitales, a la espera de ser dados de alta al siguiente nivel de cuidados y limitando nuestra capacidad de poner una cama a disposición de un paciente que realmente necesita ser hospitalizado”.