(CNN) – Franco Harris, estrella de los Steelers de Pittsburgh, quien posiblemente fue mejor conocido por una de las jugadas más icónicas en la historia de la NFL, apodada la “Recepción Inmaculada”, murió a los 72 años, anunció el miércoles el Salón de la Fama del Fútbol Americano Profesional.
Harris murió durante la noche, dijo el Salón de la Fama, citando a su familia. La causa de su muerte no ha sido anunciada.
“Perdimos a un increíble jugador de fútbol americano, un increíble embajador en el Salón y, lo que es más importante, perdimos a uno de los mejores caballeros que jamás haya conocido”, dijo el presidente del Salón de la Fama, Jim Porter.
“Franco no solo impactó el fútbol americano, sino que también afectó la vida de muchas, muchas personas de maneras profundamente positivas.
“El Salón de la Fama y los historiadores de todo el mundo contarán para siempre la historia futbolística de Franco. Sin embargo, la historia de su vida nunca se puede contar completamente sin incluir su grandeza fuera del campo”.
Una carrera de éxitos
Harris murió días antes del 50 aniversario de la “Recepción Inmaculada”, una atrapada de touchdown que llevó a los Steelers a la victoria sobre los entonces Raiders de Oakland 13-7 para el primer juego de playoffs de Pittsburgh en la Ronda Divisional de la AFC de 1972.
“Esa jugada realmente representa a nuestros equipos de los años 70”, recordó Harris después de que la recepción fuera votada como la mejor jugada en la historia de la NFL en 2020 durante la temporada del aniversario 100 de la liga.
Los Steelers habían planeado retirar la camiseta número 32 de Harris durante el medio tiempo de su partido contra los Raiders de Las Vegas el sábado.
“Lo que hizo por ellos esa temporada en términos de la trayectoria de la temporada. Lo que ha hecho por esta franquicia. Hay muchas cosas que hacen que sea la obra que es. La jugada más significativa en la historia del juego”, dijo el entrenador en jefe de los Steelers, Mike Tomlin, el martes.
Reclutado de Penn State como la selección número 13 en el Draft de la NFL de 1972, Harris se convirtió rápidamente en una estrella para el equipo, ganando el premio al Novato del Año de la NFL después de convertirse en el cuarto novato en la historia de la NFL en correr para 1.000 yardas.
En su carrera, Harris fue cuatro veces campeón del Super Bowl, nombrado como MVP en el Super Bowl IX después de correr para 158 yardas en el juego contra los Vikings de Minnesota para ayudar a los Steelers a capturar su primer título de liga.
Harris se retiró después de 13 temporadas: 12 con los Steelers y una con los Seahawks de Seattle.
El nueve veces jugador de Pro Bowl corrió para al menos 1.000 yardas en ocho temporadas, acumulando 12.120 yardas terrestres y 91 touchdowns en su carrera.
Fue consagrado en el Salón de la Fama del Fútbol Americano Profesional en 1990.