(CNN) – Rusia incluyó al periodista de investigación Christo Grozev en su lista de “se busca”, según el Ministerio del Interior del país.
Grozev, de nacionalidad búlgara, es el principal investigador sobre Rusia del grupo periodístico Bellingcat.
La información que se publicó en el sitio web del ministerio decía que estaba “en busca y captura en virtud de un artículo del Código Penal”, sin especificar el artículo exacto.
Según el observatorio independiente de derechos humanos OVD-Info, se ha abierto una causa penal contra Grozev por difundir “noticias falsas” sobre el Ejército de Rusia.
El Gobierno ruso aprobó una ley que penaliza la difusión de lo que denomina información “deliberadamente falsa” sobre las Fuerzas Armadas rusas a principios de marzo, pocos días después de que el presidente Vladimir Putin ordenara una invasión a gran escala de Ucrania. La pena máxima prevista por la ley es de 15 años de prisión.
Grozev ha reportado ampliamente sobre la participación de Rusia en una serie de crímenes internacionales de alto perfil, incluido el derribo del vuelo 17 de Malaysia Airlines en 2014 en el este de Ucrania y el envenenamiento de Sergei y Yulia Skripal en 2018 en el Reino Unido. Moscú ha negado reiteradamente cualquier responsabilidad en ambos ataques.
Junto con el equipo del líder opositor ruso Alexey Navalny y periodistas de CNN y otros medios, Grozev también investigó el envenenamiento de Navalny en 2020.
El periodista se centra en “amenazas a la seguridad, operaciones clandestinas extraterritoriales y la militarización de la información”, según el sitio web de Bellingcat.
Las investigaciones del periodista sobre la guerra de Rusia
Desde el comienzo de la invasión rusa de Ucrania en febrero, Grozev ha utilizado herramientas digitales de código abierto para documentar crímenes de guerra y otras atrocidades cometidas durante el conflicto.
Grozev dijo este lunes que no sabía por qué lo incluyeron en la lista de personas buscadas por Rusia.
“No tengo ni idea de los motivos por los que el Kremlin me ha incluido en su ‘lista de se busca’, por lo que no puedo hacer ningún comentario en este momento. En cierto modo, no importa: durante años han dejado claro que tienen miedo de nuestro trabajo y que no se detendrían ante nada para hacerlo desaparecer”, dijo en un mensaje de Twitter este lunes.
El régimen de Putin lleva años desmantelando metódicamente la libertad de prensa, pero la represión de publicaciones y periodistas independientes se intensificó a finales de febrero.
Todos los medios de comunicación independientes que quedaban en Rusia han sido cerrados y se ha bloqueado el acceso en línea a los que operan desde el extranjero. También se han prohibido las publicaciones y las redes sociales occidentales.
Según OVD-Info, al menos 370 personas se han enfrentado a procesos penales por declaraciones y discursos contra la guerra. Decenas de ellas han huido de Rusia y han sido incluidas en la lista de personas buscadas, según el monitor.