(CNN) – California pasó de la sequía extrema a las inundaciones extremas.
Una potente tormenta —la más reciente en golpear la costa oeste en las últimas semanas— sigue azotando el estado. Este lunes, las calles volvieron a convertirse en ríos, hubo desplome de árboles, los hogares se quedaron sin electricidad, los ríos crecieron y las principales carreteras quedaron incomunicadas.
California es ahora extremadamente vulnerable a las inundaciones porque gran parte del estado ha sufrido sequías históricas o devastadores incendios forestales, lo que significa que la tierra no puede absorber una gran cantidad de precipitación.
Más de una docena de personas han perdido la vida en tormentas invernales este año, según la oficina del gobernador Gavin Newsom.
Colleen Kumada-McGowan se encuentra en las aguas frente a su casa en Watsonville el lunes. Crédito: Brontë Wittpenn/San Francisco Chronicle vía AP
Equipos trabajan para despejar un deslizamiento de tierra en la autopista 17 en Scotts Valley. Crédito: Carlos Avila Gonzalez/San Francisco Chronicle via AP
Se realizan trabajos de limpieza de escombros en Aptos el lunes después de que las calles y las casas se inundaron cerca de la playa estatal Río Del Mar. Crédito: Melina Mara/The Washington Post vía Getty Images
Naia Skogerson sale de su casa en Aptos. Crédito: Nic Coury/AP
Una carretera dañada el lunes en Scotts Valley. Crédito: Neal Waters/Anadolu Agency vía Getty Images
Esta foto aérea muestra un árbol que cayó en Sacramento el domingo. Crédito: Fred Greaves/Reuters
Residentes de Santa Cruz retiran los escombros de la tormenta y apilan sacos de arena cerca de sus casas el sábado. Crédito: Mike Kai Chen/The New York Times/Redux
Sacos de arena apilados frente a una puerta en Capitola el viernes. Crédito: Mike Kai Chen/The New York Times/Redux
Boone White salta de su auto luego de que un gran árbol cayera sobre él el jueves mientras conducía cerca de Capitola. Crédito: Shmuel Thaler/The Santa Cruz Sentinel vía AP
Una pieza de apoyo del muelle de Capitola se ve dentro del restaurante Zelda’s on the Beach dañado por la tormenta el jueves. Crédito: Shmuel Thaler/The Santa Cruz Sentinel vía AP
Evan Sousa, a la izquierda, recibe ayuda de Calvin Drake para sacar el agua de su departamento inundado en Pacifica el jueves. Crédito: Karl Mondon/Bay Area News Group vía AP
Henry Valletta corta un árbol caído en Sacramento el jueves. Crédito: Max Whittaker/The New York Times/Redux
Residentes caminan por una zona dañada de Aptos el jueves. Crédito: Carlos Barria/Reuters
Dominic King, propietario del restaurante My Thai Beach, examina los daños causados por la tormenta en su negocio de Capitola. Crédito: Nic Coury/AP
Un viñedo inundado el miércoles en Walnut Grove. Crédito: Max Whittaker/The New York Times/Redux
Conductores en San Francisco se abren paso a través del agua estancada en la Interestatal 101 el miércoles. Crédito: Josh Edelson/AFP/Getty Images
Khaled Dajani limpia el agua de su sala inundada en San Francisco el 31 de diciembre. Crédito: Mike Kai Chen/The New York Times/Redux