(CNN) – En 2013, el género del apocalipsis zombi había llegado a su cúspide. “The Walking Dead” había concluido su tercera temporada, se esperaba que “World War Z” fuera un éxito de taquilla de verano y “Resident Evil” seguía siendo quizás el videojuego protagonizado por zombis más conocido. ¿A dónde más podrían ir los muertos vivientes desde allí?
Es entonces que entra un pequeño juego llamado “The Last of Us”. La exclusiva de PlayStation 3 se convirtió casi de inmediato en un éxito entre los jugadores y los críticos por su poderosa narración y una visión única de los zombis: en el juego, son humanos infectados y desfigurados por el hongo Cordyceps. Esta no era una historia ordinaria del fin del mundo, como lo demuestra la intensa devoción que los aficionados desarrollaron por sus protagonistas, el duro Joel y la joven y malhablada Ellie, mientras luchaban por sus vidas.
“The Last of Us” ahora es ampliamente reconocido como uno de los mejores videojuegos de todos los tiempos. Diez años después de su lanzamiento, el equipo detrás del juego también está intentando que una versión para televisión se convierta en la mejor adaptación de videojuegos de todos los tiempos. El listón para las adaptaciones de videojuegos es bastante bajo, dada la abundancia de decepciones y fracasos realizados en el pasado. Pero las expectativas para la versión de HBO de “The Last of Us” son altas, y la recepción de la crítica hasta el momento indica que la serie puede estar a la altura de esas expectativas.
Los aficionados están ansiosos por regresar al páramo estadounidense postapocalíptico con su dúo moralmente ambiguo favorito. Desde su desgarradora historia hasta su célebre elenco, he aquí por qué los aficionados del juego y los posibles nuevos espectadores esperaban con ansias el estreno de “The Last of Us”. (HBO y CNN comparten la empresa matriz Warner Bros. Discovery).
Es uno de los videojuegos más apreciados de todos los tiempos
Si a menudo existe una división entre los jugadores y los críticos, “The Last of Us” fue el raro juego que satisfizo a ambos. El juego, originalmente una exclusiva de PlayStation 3, obtuvo un aplauso casi unánime cuando debutó en 2013, y las primeras reseñas lo calificaron como el mejor juego del año y, potencialmente, uno de los mejores de todos los tiempos.
Las revisiones retrospectivas recientes del juego y su nueva versión son aún más enfáticas sobre los logros del juego: Inverse dijo que “The Last of Us” era “lo más cercano a la perfección posible”, y Rolling Stone también lo llamó “uno de los mejores juegos” de su época y una “obra maestra brutal”.
Parte de su atractivo es lo que comparte con muchos otros juegos: es violento y lleno de terror, ambientado en un páramo posapocalíptico. Pero “The Last of Us” también priorizó siempre la relación entre Joel y Ellie. (En su entrevista original de 2013, IGN calificó su relación como “uno de los mejores momentos” del juego). Él es un contrabandista a menudo implacable con un lado paternal profundamente enterrado; ella es una adolescente sin padres con lengua de marinero y un peligroso secreto. Juntos, se embarcan a través de lo que queda de EE.UU. para tal vez salvar el mundo, aun cuando al menos uno de ellos piensa que es una misión inútil. Como era de esperar, se convierten en algo así como una familia.
Lo que es tan impredecible acerca de “The Last of Us” es cuán hábilmente equilibra el juego atractivo con una narración convincente, a menudo desgarradora. Incluso sus monstruos causan empatía: “The Last of Us hace un trabajo fenomenal al hacer que todos y cada uno de los enemigos se sientan humanos”, escribió IGN en 2013. “Cada vida perdida tiene un peso y cada objetivo se siente único y vivo”.
Y así ha vivido y crecido desde su lanzamiento en 2013: se ha rehecho para consolas más nuevas y se ha remasterizado con imágenes actualizadas. Su secuela podría incluso superar al original en términos de devastación emocional (no hay spoilers aquí: los creadores de la adaptación de HBO dijeron que si se les otorga una segunda temporada, probablemente la basarán en “The Last of Us Part II”). Y ahora, está creciendo nuevamente para la televisión, con un mundo y una tradición ampliados.
Su elenco y creadores tienen un pedigrí de prestigio en la televisión
Los aficionados acérrimos de “Last of Us” se sentirán aliviados al saber que el creador del juego, Neil Druckmann, de la compañía productora de juegos Naughty Dog, está acreditado como el co-creador de la serie junto con Craig Mazin, quien está detrás de la sombría miniserie “Chernobyl” de HBO. En casi todas las entrevistas que han dado antes del estreno de la serie, han repetido lo comprometidos que están para hacer de “The Last of Us” la mejor adaptación de un videojuego (disculpas, “Sonic the Hedgehog”) al evitar los errores de predecesores como “Assassin’s Creed”, cuya historia era demasiado densa para audiencias no familiarizadas con el juego.
Con tantas expectativas, el casting tenía que ser perfecto. A primera vista, parece que la serie se acerca bastante, con el aclamado actor Pedro Pascal (el titular de “Mandalorian”, “Narcos”, “Game of Thrones”) como Joel y la actriz revelación Bella Ramsey (también de “Game of Thrones”, “Catherine Called Birdy”) como Ellie. Las voces originales de Joel y Ellie, Troy Baker y Ashley Johnson, también aparecen en la serie en diferentes roles, y Merle Dandridge, quien interpretó a Marlene en el juego, repite su papel aquí. Gabriel Luna (“Marvel’s Agents of SHIELD”), Nick Offerman (“Parks and Recreation”), Murray Bartlett (“The White Lotus”) y Anna Torv (“Fringe”) también interpretan papeles fundamentales.
HBO debe creer en la serie tanto como lo hacen Mazin y Druckmann, porque está se ha apoderado del horario estelar de los domingos a las 9 p.m., ocupado anteriormente por “Game of Thrones” y su precuela “House of the Dragon”, así como prestigiosas series como “Succession” y “The White Lotus”. Todas esas series ganaron premios, más recientemente en los Globo de Oro para “House of the Dragon” y “The White Lotus”.
Cuenta un tipo diferente de historia apocalíptica
“The Last of Us” no necesariamente reinventa el género post-apocalíptico, pero no es “The Walking Dead”. En comparación con el juego, poco de la serie se dedica a asesinatos espeluznantes o al implacable derramamiento de sangre: la violencia es principalmente emocional. Eso podría inquietar a los jugadores de “The Last of Us” acostumbrados a destruir monstruos con cara de hongo entre escenas, aunque todavía hay sustos.
El ritmo es rápido –hay un juego entero que cubrir– pero la serie aún tiene tiempo para digresiones ocasionales de la trama central. Visualmente, “The Last of Us” se parece a la mayoría de las historias de apocalipsis conocidas: están los paisajes urbanos estándar que se desmoronan y la vegetación intrusa que estamos acostumbrados a ver en tales programas. Más de unas pocas escenas recordarán la belleza agreste de “Station Eleven”, otra serie postapocalíptica que se emitió en HBO Max, aunque “The Last of Us” es menos optimista sobre la supervivencia y la bondad básica de la humanidad que la serie anterior.
Oh, y espectadores sensibles, tengan cuidado: “The Last of Us” puede ser profundamente triste. Verla no es un castigo, pero como con cualquier historia ambientada en el fin del mundo, esperen muchas pérdidas.
Es fiel a la historia original, aunque con al menos un cambio importante
No hay manera de complacer a todos los aficionados de una franquicia respetada, pero “The Last of Us” de HBO no necesariamente se desvía mucho de la historia principal que los jugadores han jugado una y otra vez. Joel y Ellie siguen siendo nuestros protagonistas, y la mayor parte de la serie está dedicada a su relación (aunque con algunos ataques de hongos-monstruos-personas intercalados). Los personajes secundarios del juego (Tess, Marlene, Bill) cobran vida en la pantalla y los espectadores tienen más tiempo que los jugadores para pasar tiempo con estos sobrevivientes.
Pero hay al menos una desviación importante de la trama del juego en un episodio temprano de la serie, ya que el arco de un personaje fundamental toma una dirección drásticamente diferente en la pantalla que no estropearemos aquí. Hay algunos personajes originales de la serie, incluida una sobreviviente con canas interpretada por Melanie Lynskey. Ah, y los monstruos de la serie ya no infectan a las víctimas con “esporas”, un cambio que podría molestar a algunos puristas de los juegos.
Por lo demás, gran parte de la serie se ve y se siente como una carta de amor a los fans: algunas de las líneas, los ángulos de cámara y las puestas en escena son casi idénticas a las famosas escenas del juego. Es posible que el público sin conocimientos previos de la serie no reconozca estas similitudes, pero seguramente deleitarán a los fans que han disfrutado estos momentos.