(CNN Español) – El flujo de migrantes irregulares extranjeros que llegan a Honduras y que viajan en la ruta migratoria en busca del sueño americano en Estados Unidos está aumentando considerablemente, de acuerdo con las cifras oficiales.
Según estadísticas del Instituto Nacional de Migración (INM), solo en enero de este año ingresaron irregularmente a Honduras 18.879 personas de diversas nacionalidades. La cifra supera en casi 1.000% a la registrada en el mismo mes de 2022, que fue de 1.766 personas.
El número del mes pasado supera también al registrado en todo el primer trimestre de 2022, que sumó 13.117 migrantes.
En este contexto de enorme incremento de personas en tránsito, el gobierno de Honduras informó por medio del INM que habilitó un Centro de Atención Temporal para Migrantes Irregulares en la ciudad de Danlí, cerca de la zona fronteriza con Nicaragua.
Víctor Hernández, quien salió de Venezuela hace cuatro meses con su esposa, sus tres hijos y su mascota, dijo a CNN que en el camino nunca encontraron un lugar donde dormir.
“Nosotros nos quedábamos en la calle en carpas; en realidad es el primer país que llego y me mencionan que hay un refugio, que hay algo donde nos podemos acoger un día’’, contó Hernández.
El refugio, que atiende a 150 personas por día, se inauguró el pasado 16 de enero, aunque las autoridades reconocen que su capacidad es insuficiente para hacer frente a la llegada de extranjeros.
Eliza Ríos, de la organización no gubernamental Médicos Sin Fronteras, dice que algunos de los migrantes tienen que buscar otros espacios para poder pernoctar mientras están en Honduras, porque el refugio no da abasto.
En 2021, según datos oficiales, ingresaron a Honduras 17.590 migrantes irregulares de diversos países. En 2022, esta cifra creció a 188.858 personas.
Según dijo a CNN Fernando Oyagata, migrante ecuatoriano, la mayoría de estos viajeros duerme donde les sorprende la noche.
“Tú ves de todas partes del mundo: Ecuador, Colombia, Perú y más que todo Haití, se ve bastante, duermen ahí en cartoncitos en las terminales… Pero la mayoría se quedan ahí, a veces en la frontera misma de Nicaragua, se quedan en la carretera”, detalló Oyagata.
Las personas también reciben atención psicológica y de salud primaria por parte de Médicos Sin Fronteras, organización que también les brinda orientación sobre los bancos donde pueden retirar dinero, los albergues y el transporte, explicó su representante Eliza Ríos.
Aunque son de culturas diferentes, las motivaciones de los migrantes para llegar a Estados Unidos son las mismas: tener una mejor vida para ellos y sus familias. El migrante venezolano Hanlet Ortega comentó a CNN que emprendió el viaje junto a sus tres hijas y que salió de su país porque no encontraba cómo darle sustento y estudios a sus niñas.
Fernando Oyagata señaló que su misión es cumplir el ansiado sueño americano: “llegar hasta el norte, esa es la motivación, tener otro porvenir, eso vendría siendo la que nos motiva a seguir adelante”, manifestó.
Del 1 de enero al 8 de febrero de este año, según cifras del INM, el ingreso de migrantes irregulares ya asciende a 25.094.