(CNN) –– Una persona en el condado de Charlotte, Florida, murió después de infectarse con la extraña ameba comecerebros Naegleria fowleri.
La infección posiblemente resultó de “prácticas de enjuague de los senos paranasales con agua de la llave”, según un comunicado de prensa del Departamento de Salud de Florida en el condado de Charlotte. La declaración se emitió en febrero para alertar al público sobre la infección.
Este jueves, el departamento confirmó a CNN que la persona infectada murió y las autoridades continúan investigando el caso.
“Hay una investigación epidemiológica en curso para comprender las circunstancias únicas de esta infección. Puedo confirmar que, lamentablemente, la infección resultó en una muerte, y cualquier información adicional sobre este caso es confidencial para proteger la privacidad del paciente”, dijo Jae Williams, secretario de Prensa del Departamento de Salud de Florida, en un comunicado enviado por correo electrónico este jueves.
La infección con Naegleria fowleri “solo puede ocurrir cuando el agua contaminada con amebas ingresa al cuerpo a través de la nariz”, indicó el comunicado de prensa del departamento. El Departamento de Salud de Florida en el condado de Charlotte advirtió a los residentes que solo utilicen agua destilada o estéril al preparar soluciones de enjuague nasal. El agua de la llave debe hervirse durante al menos un minuto y enfriarse antes de usarla para enjuagar los senos paranasales, lo que generalmente involucra una olla neti.
El agua del grifo que no se ha esterilizado no es segura para usarla como enjuague nasal, pues no está filtrada o tratada adecuadamente, y por lo tanto puede contener niveles bajos de microorganismos, como bacterias y protozoos, incluidas las amebas, advierte la página web de la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA, por sus siglas en inglés). Sin embargo, las personas no se infectan si beben agua de la llave, ya que el ácido estomacal generalmente mata esos organismos.
La Naegleria fowleri es una ameba, un organismo vivo unicelular, que se puede encontrar en el suelo y en agua dulce tibia, como lagos, ríos y fuentes termales en todo Estados Unidos. Comúnmente llamada “ameba comecerebros”, puede causar infecciones cerebrales, lo que generalmente ocurre cuando el agua que contiene ameba sube por la nariz, como al nadar.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), alrededor de tres personas en Estados Unidos se infectan cada año, y estas infecciones suelen ser mortales. De 1962 a 2021, solo cuatro de 154 personas en el país sobrevivieron a una infección por ameba comecerebros, de acuerdo a los CDC. Apenas el año pasado, murieron un niño que se infectó después de nadar en el lago Mead, otro en Nebraska que se infectó luego de nadar y un residente de Missouri que se contagió tras visitar una playa en Iowa.
Los signos y síntomas de infección son inicialmente fuertes dolores de cabeza, fiebre, náuseas y vómitos, y pueden progresar a rigidez de nuca, convulsiones, alucinaciones y coma. La infección se trata con una combinación de medicamentos, incluido el antibiótico azitromicina, el antifúngico fluconazol, el medicamento antimicrobiano miltefosina y el corticosteroide dexametasona.