(CNN Español) – América Latina desempeñó un papel importante en el incremento entre 2020 y 2021 de la producción y distribución de cocaína en el mundo, luego de que se registrara una “desaceleración” provocada por la pandemia de covid-19, sugirió este jueves un reporte que publicó la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC).
El Informe Mundial sobre la Cocaína 2023 detalló cómo “el cultivo de coca se disparó un 35% de 2020 a 2021, una cifra récord y el aumento interanual más pronunciado desde 2016”, explicó la ONU. Y agregó que “el aumento se debe tanto a la expansión del cultivo de arbusto de coca, como a las mejoras en el proceso de transformación de la hoja de coca en clorhidrato de cocaína”.
El reporte de 2023 indicó, además, que “el fuerte crecimiento de la oferta ha ido acompañado de un aumento similar de la demanda, y muchas regiones han registrado un incremento constante de los consumidores de cocaína en la última década”.
En el informe, la UNODC dedica varios segmentos sobre los roles que han desempeñado diversos actores en Latinoamérica. Estos son algunos de los principales datos que presenta el reporte:
- Los principales mercados para la cocaína en todo el mundo son América del Norte, Europa Occidental y Central, seguidos por Sudamérica, Centroamérica y el Caribe.
- El suministro mundial de cocaína se origina en su totalidad “prácticamente” en Sudamérica, en específico en Colombia, Bolivia y Perú. Mientras que otras naciones han “diversificado las rutas de transporte de la droga a través del cono sur del continente”.
- Sobre Colombia, el reporte sugiere —entre otras cosas— que la desmovilización de los combatientes de las ahora disueltas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) han propiciado que lleguen nuevos “actores” criminales de México y Europa, quienes “no pretenden hacerse con el control de territorio” sino “tratando de hacer que las líneas de suministro sean más eficientes. Su presencia contribuye a incentivar el cultivo del arbusto de coca y a financiar todas las fases”.
- Colombia —según el informe— domina las rutas de tráfico hacia América del Norte, donde “la mayor parte de la cocaína es colombiana”. Aunque agrega que “el papel dominante de los puertos de Colombia como punto de partida parece estar disminuyendo y los traficantes transitan cada vez más su producto por Centroamérica y otros países de Sudamérica”.
- Sobre los otros países de Sudamérica, el reporte de la ONU sugiere que “la cocaína procedente de Bolivia y Perú se transporta cada vez más a través de la ruta del Cono Sur a través de Paraguay y la hidrovía Paraná-Paraguay”. También “los grupos delictivos, a menudo procedentes de Brasil, utilizan aviones para cruzar la frontera y luego barcos por el río hasta el Atlántico”.
- El reporte indica sobre México que el país sigue siendo “un importante medio de tránsito” y que “funciona como puerta de entrada para que la cocaína llegue a Estados Unidos, que representa la mayoría de consumidores de cocaína en América del Norte”.
- Sobre México también, la ONU indica que dos cárteles, el de Sinaloa y el Jalisco Nueva Generación, tienen “significativos vínculos con mercados internacionales” y que este último incluso está estableciendo su presencia en otros puntos del continente americano, Australia y el sureste de Asia.
Hasta este jueves, los gobiernos de Colombia, Bolivia, Paraguay, Brasil y México no se habían pronunciado públicamente sobre el reporte de la ONU. CNN intenta obtener un comentario al respecto.
En la respuesta de Perú a una consulta de CNN sobre el tema, Martín Villafuerte, gerente de la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida), indicó que en el marco de la Política Nacional de Lucha contra las Drogas al 2030, las entidades competentes vienen desarrollando acciones para reducir el tráfico de drogas por las vías indicadas en el informe de UNODC”.
Villafuerte también indico que “en el marco de la responsabilidad compartida en la lucha contra las drogas, se viene articulando acciones conjuntas con los países vecinos, contando adicionalmente con el apoyo de la cooperación internacional”.
Lee el informe completo, aquí.
Jimena De La Quintana colaboró en este reporte.